Mi Celoso Vago

Celos en Suna

⏰Tres días después 10:45am

Tren 🚂

Narra Shikadai

— ¿Y hablaste con ella?

— Si —asentí— quedamos en que esperaríamos a que la situación se de cuándo ella y yo estemos listos.

— Así debe ser...

— Papá ese día no te lo pregunté, pero...

Papá puso sus ojos en mi.

— Cuánto tiempo se tomaron tú y mamá para dar el siguiente paso.

— Un mes.

— ¿Un mes?

Papá asintió

— Yo hice algo para celebrar nuestro primer mes juntos y coincidió con una misión que tenía en Suna.

— ¿Entonces fue en Suna?

Papá asintió

— Si las paredes de la habitación de tu madre hablaran

Me abochorné

— Papá no quiero saber.

Papá se empezó a reír

— ¿Dónde creerías que sería?

— No lo sé, en cualquier otro lugar.

— Tiempo después tuvimos un punto medio dónde nos encontrábamos porque las distancias eran de tres días y medio entre ambas aldeas.

— Ya veo...

— ¿Y que llevas en esa caja?

— La abuela me dejó esto de parte del Clan para Yodo, me dejó una nota diciéndome que debía entregárselo cuando oficialicen mi noviazgo.

— Yo también le entregué una Yukata a tu madre con el símbolo del Clan cuándo formalizamos nuestros noviazgo, cuándo nos comprometimos también el Clan le regaló otro, pero ya lo hicieron directamente a ella, no me lo dieron a mi para que se lo entregue.

— Entonces es una Yukata.

Papá asintió

— Ella también te dará algo.

— ¿Que te dio mamá?

— Una canasta con Te verde y frutas, es tradición en Suna regalar eso a los novios.

— Y es tradición de nuestro Clan regalar Yukatas bordadas con la insignia

Papá asintió.

— Las frutas en Suna son muy costosas, a pesar de haber solucionado el tema del agua, el clima juega mucho en contra, la fruta es muy valiosa para ellos, por eso la obsequian como señal de buena voluntad y fortuna.

— Ok... algo más que deba saber.

— Van a ir algunas personas muy importantes, se trata de los hijos del Kazekage y esta oficializando una relación con una aldea vecina por segunda vez.

— Y otra vez con un Nara.

Papá asintió

— Los años avanzan pero las tradiciones no cambian.

— Las tradiciones son la base de una nación, son su espejo ante la sociedad, son buenas costumbres que pasan de generación en generación y eso no va cambiar, no tiene porqué.