Mala borrachera

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Narrador Omnisciente


Dos golpes en la puerta los hicieron dejar de discutir por un momento

— ¡Yodo! —dos golpes más— ¿¡Yodo estás bien!?

Ambos miraron la puerta y Shikadai volvió a caerme al piso pero esta vez con ella.

— ¡Yodo!

El Kazekage había abierto la puerta, el joven Nara olvidó echar seguro producto de su embriaguez

— Papá —susurró

— Tío Gaara —trató de levantarse— ¿porqué entras así?

Yodo hiperventiló

— ¿Porqué estás tú aquí? —el Marionetista al escuchar las voces se aproximó a la puerta de su sobrina y al ver la situación suspiró entrecerrando los ojos— ¿Te hice una pregunta?

— Yo duermo con ella por eso estoy aquí —se puso de pie y Yodo quería morirse— pero ahora ella no quiere dormir conmigo —la miró— ella piensa que no la amo y yo... yo la adoro...

— Suficiente —el marionetista entró cogió a su sobrino y cruzó su brazo por sus hombros para llevárselo

— ¡Déjame aquí, ella tiene que creerme... ella tiene que escucharme!

— ¡Shikadai camina! —lo jaló

— Tio Gaara dile que se case conmigo por amor... —suplicó con lágrimas en los ojos— ella no quiere ser mi mujer y yo me estoy muriendo —sollozó

— ¿Pero que pasa porqué tanto ruido?  —la princesa miró absorta a su hijo siendo cargado por su hermano— Shi... Shikadai

— No pasa nada Temari, mala borrachera regresa a tu cama yo me encargo.

— Pero...

— ¡Dile que me escuche! —gritaba Shikadai siendo llevado— ¡Yodo!

Yodo empezó a llorar mientras el Kazekage se mantenía en la puerta observándola.

— Yodo

— Temari ve a tu habitación déjame a solas con ella.

Yodo miró a la princesa y negó con la cabeza pero la princesa miró tan serio y enojado a su hermano que lo obedeció y salió cerrando la puerta.

— Hablemos

Yodo se sentó en su cama e intentó no seguir llorando pero no podía.

El Kazekage no se movió de su lugar, se mantuvo cual su postura inicial.

— ¿Tu pregunta esa vez es debido a esto? —Yodo abrió los ojos y un escalofrío recorrió su cuerpo sin ella poder controlarlo— ¿No quieres casarte? —hubo un silencio— si eso es lo que quieres, no vas a casarte.

"No vas a casarte" las palabras que sentenció su padre sin temblarle un solo músculo del rostro.


     
                      💕                           💕




— ¿Cómo se te ocurre ir y meterte en su habitación? —lo soltó en su cama— quedamos en que le darías su espacio

— ¡No puedo! ¡Ella me va dejar!

— ¡Baja la voz! Los demás duermen

— No me importa... nada me importa, ¡Estoy harto! ¡Harto! ¡Nada sale bien! ¡Todo esto es una mierda!

La puerta de la habitación de Shikadai se abrió.

La princesa había entrado y de inmediato se dirigió a su hijo y lo abofeteó

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