Eres un chico que esta cursando su primer año de preparatoria.
Eres parte de la Toman, siendo el segundo más fuerte solo superado por Mikey pero estando casi a la par de su fuerza.
Todo sera como el canon, solo habra unos cambios pequeños.
Gracias s...
- Q-Quiero que tengamos una cita - dijo bastante sonrojada -.
- ¿Eh? - mis mejillas empezaron a sonrojarse fuertemente ante las palabras de Yuzuha, (¡¿Qué acaba de decir?!, no puede ser lo que estoy pensando ¿cierto?) - Perdón creo que no escuché bien, ¿podrías repetirlo?
- ¿No lo escuchaste?, es un poco vergonzoso repetirlo pero no importa - dijo desviando la mirada - Quiero que tu y yo tengamos una cita - dijo nerviosa -.
Me quedé perplejo ante estas palabras, los nervios invadieron mi cuerpo.
- S-Sabes tengo varias c-cosas que hacer, así que - dije intentando escapar de ahí -.
Iba a escapar de ahi pero antes de que lo hiciera Yuzuha me abrazó por la espalda impidiendo que lo hiciera.
- No escaparas... - dijo mientras se aferraba más a mi -.
- Y-Yo no trataba de escapar, solo...tengo algo importante que hacer.
- Eso puede esperar, primero respóndeme
- ¿No te rendiras por nada verdad? - dije dándome la vuelta para verla a los ojos, ella solo agitó la cabeza - Yuzu-chan, no entiendo porque quieres una cita conmigo, sabes que no soy ningún experto en esas cosas pero si estás bien con eso, esta bien aceptó - dije intentando ocultar mi sonrojo -.
- ¿Enserio? - dijo mientras sus ojos empezaban a brillar, realmente es muy hermosa, yo sólo asenti con la cabeza - ¿Entonces te parece si la cita es el 3 de agosto y después vamos juntos al Festival Musashi? -.
- Me parece bien - dijeron sonriendo genuinamente, esto es un sueño hecho realidad -.
- Entonces nos vemos el lunes Tn - acercándose a mi y besando tiernamente mi mejilla - Te quiero - dijo susurrando para posteriormente salir corriendo -.
En este punto mi cara estaba extremadamente roja, me quedé estático por el beso de Yuzuha. Aunque fuera en la mejilla era una extraña pero agradable sensación.
Después de unos minutos salí de mis pensamientos y entre al edificio.
Al entrar varios vecinos que aún vivían ahí me reconocieron, tengo buena relación con todos ellos ya que desde niño convivia con todas esas personas junto con mi madre.
La nostalgia es algo que nunca falta al momento de regresar a este lugar. Llegué al elevador y seleccione mi piso, al llegar abrí la puerta y encendí la luz.
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Después de que dejara este lugar remodelé un poco el departamento a excepción del cuarto de mi madre, el cual sigue exactamente igual y solo entro ahi para limpiar.
