𝐍𝐢𝐧𝐟𝐚 | 𝐄𝐧 𝐏𝐚𝐮𝐬𝐚

Capitulo 6-Aprender

Hal era una persona que era conocida por siempre conseguir lo que quería y si eso la divertía era mil veces mejor y ahora mismo esto lo era. Sentía mucha curiosidad por este chico, debía admitir que era atrayente su "inocencia" si así se le puede llamar, no sabía si estaba fingiendo, pero no le importaba, eso no le quitaba lo lindo a su actuar y menos con ella.

La mujer puso la mano del hombre en el inicio de su vientre dejando que el explorara a su voluntad. Matthew al sentir la suave piel movió su mano un poco hacia arriba sintiendo como la piel se estremecía levemente ante su tacto y después de un par de roses más aparto la mano del cuerpo ajeno.

–Creo que este método es ineficiente –aseguro el castaño–

–¿Por qué piensas eso?

–Es mucho más ventajoso tomar una foto o comenzar con un boceto, cubrirme los ojos y trabajar con los sentidos...es un proceso inútil para perder el tiempo –afirmo el más joven–

Hal suspiro levemente a escuchar la negativa lo que le hizo pensar que este tipo o era muy inocente o se hacia el estúpido.

–¿Sabes cómo los músicos practicamos cuando no tenemos a la mano nuestros instrumentos? –le pregunto a lo que el castaño negó con la cabeza– Con música en los audífonos movemos los dedos como si estuviéramos tocando la canción que oímos en ese momento, así nos mantenemos en forma y esto sería lo mismo solo que en vez de ocupar del todo el oído ocuparías el tacto -explico la rubia tomando la mano del chico poniéndola en su hombro viendo como el más alto se estremecía– Además si me quieres tener tendrás que aceptar esta condición o si no me iré 

–No, por favor –suplico rápidamente acercándose más al rostro de la chica– Quiero convertirte en mi modelo, de verdad lo quiero

–¿Sabes que lo mejor para un hombre es hacerle caso a una mujer? Es porque somos caprichosas y orgullosas y si quieres algo de ellas debes dar lo otro que ella desee así tendrás lo que quieras más rápido –explico la mujer– Depende totalmente de ti que yo sea tu modelo –uso un tono algo divertido y pícaro–

–...Hal ¿Te estas burlando de mí?

–¿Eso estoy haciendo~? –pregunto con una clara sonrisa descarada– ¿Que me harás si te digo que sí? ¿Me morderás?

–No...–afirmo–

La mujer apenas pudo reaccionar cuando fue tomada por los hombros para ser empujada contra el sillón cercano quedando ella debajo del gran cuerpo de chico.

–Todo...Por favor quítatelo 

La mujer apenas sonrió ante ese movimiento atrevido para llevar su mano al cabello castaño del muchacho para revolverlo un poco.

–Hazlo tú, eso también es parte del aprendizaje~ 

[...]

La habitación estaba en total silencio mientras que el castaño ahora con Hal ya desnuda pasaba su mano por todo el cuerpo de la rubia que estaba recostada en el sillón dejando que el la tocara como él quisiera para su "aprendizaje".

–(Pasa sus grandes manos por mi cuerpo y a pesar de sus duros callos es un toque delicado)–pensó la de mirada zafiro mientras miraba y sentía las acciones del chico en todo su cuerpo–(No es un toque lujurioso, es más como un masaje...Se siente bien) –pensó intentando mantener los ojos abiertos– ¿Y? ¿Qué opinas?

–Tu esqueleto es maravilloso, no es solo delicado sino también fuerte y tus músculos tienen mucha elegancia además de que la textura es tan suave y precisa

–Pareces un carnicero, pero dime ¿Aun crees que este método no sirve? –le pregunto divertida–

–Admito que es algo interesante –dijo el castaño admitiendo parcialmente lo dicho por la rubia– Podrías voltearte ¿Por favor?

–Si si –se volteo sin dar pelea para dar un bostezo leve al sentirse levemente cansada–

–¿Todo está en orden? ¿Quieres que me detenga?

–No no, tu sigue es solo que tu toque se siente tan bien que me da sueño es como un masaje –explico la rubia sintiendo como la mano del hombre pasaba de la parte baja de su columna hacia arriba haciendo que ella la arqueara levemente haciendo que el chico retirara la mano rápidamente– Oye con más cuidado 

–Lo siento...–respondió un poco cohibido para volver con su tarea para leve risa de la mujer al ver sus actitudes–

Muchas de las reacciones corporales que tenía ella al ser tocada en ciertas zonas hacía que el quitara la mano rápidamente, pero al ver que ella estaba bien volvía con su tarea, no se esperó jamás que el cuerpo femenino fuera tan sensible, ella tenía razón en eso, el cuerpo de los hombres era más simple pero el de las mujeres tenía muchos puntos que se podían explotar.

–Estas quedándote aquí ¿Cierto? –pregunto la mujer como una forma para quedarse despierta–

–Si

–El alquiler mensual debe ser elevado supongo 

–Es más barato que el precio del mercado porque me lo recomendaron –explico el castaño–

–¿Tu familia te ayuda a pagarlo? –pregunto curiosa–

–No tengo familia, estoy solo –afirmo para sorpresa de la rubia–

–Entonces ¿Como pagaste la matricula? –pregunto con sorpresa genuina en su voz–

–Conseguí una beca 

– Ya veo...–se quedó pensando un momento ante lo dicho por el castaño para recuperarse un poco de la sorpresa y volver a tomar la palabra– ¿Por qué escultura?

–Es una aburrida historia

–Ay vamos, necesito algo para mantenerme despierta siento que me voy a dormir –dijo en un tono algo caprichoso esperando que el chico aceptara contarle–

–Cuando era pequeño en el sitio donde estaba un día otro niño trajo un conejo...–comenzó a relatar– En ese momento ni siquiera podía decir que quería tocarlo porque no era tan cercano a los demás y solo después de que el interés de los niños por el animal se fue pude verlo de cerca

–¿Y luego? ¿Qué sucedió? –le pregunto la rubia con interés–

–El niño que lo trajo no quería que lo tocara

–Que desgraciado, yo lo hubiera golpeado –afirmo la rubia en un tono de indignación absoluta pero cuando espero que el chico continuara noto como su mano se quedó quieta en su muslo– ¿Sucede algo? –pregunto volteando a mirarlo pareciendo que esa pregunta lo despertó y lo hizo volver a retomar su acción y relato–

–...Al final hice un conejo de arcilla y así tuve el mío propio –termino el relato quitando las manos del cuerpo de la chica que solo se volvió a voltear para ahora sentarse frente al castaño–

–Bueno me esperaba una historia más interesante, pero me sirvió para no caer dormida –afirmo estirándose– ¿Algo interesante sobre mi cuerpo?

–Tienes una cicatriz en el muslo derecho ¿Tiene algún trasfondo? –pregunto el castaño recordando la sensación de la cicatriz sobre sus dedos–

–Oh eso...–se quedó un momento pensando en que decirle– Nada importante ya ni recuerdo cómo me la hice, pero te pediré una cosa...–acerco su mano hacia el rostro del castaño para tomarlo por la nuca acercándolo hacia ella quedando sus rostros demasiado cerca– Te recomiendo pensar que preguntas hacerme porque no soy muy paciente además de que si bien acepte ser tu modelo no pasara nada mas de ahí ¿Estamos claros?

–...Lo tendré en mente –afirmo el castaño–

–Bien ahora que te deje tocar mi cuerpo lo suficiente...

Matthew sintió como lo tomaban fuertemente por la camisa para terminar sentado en el sillón sintiendo un peso en sus piernas sintiendo como ponían sus manos sobre algo suave y caliente, ella se había sentado sobre el con ambas piernas a sus costados y había puesto sus manos en sus muslos.

–Ahora seguiremos con tu segunda lección y espero que aprendas rápido~

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