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Al día siguiente del incidente en Lisboa, cogí el primer avión que salió hacía Londres para volver a casa. No podía volver a verle, por eso me fui a primera hora de la mañana. Y después de varias horas en las que estaba ausente del mundo, tanto física como mentalmente, llegué a mi casa.

Nada más entrar por la puerta escuché como May venía corriendo hacia mí y me abrazaba con tanta fuerza que me era casi imposible respirar. Mis brazos también se aferraron a ella como si fuera la primera vez que la veía en años, la abracé tan fuerte que sentía que si la soltaba me caería al vacío. Segundos después se separó para agarrarme la cara y mirarme a los ojos.

"No sabes cuánto te he echado de menos" me dijo mientras seguía agarrándome la cara.

"Y yo" dije sintiendo como mi voz se rompía, así que la volví a abrazar.

"Vamos al sofá, tienes que ponerme al día de todo" dijo separándonos y cogiéndome del brazo arrastrándome hacia él.

Así que eso hicimos, estuve hablando con ella y contándole como me había hecho amiga de Dana, la sensación que tenía cada vez que me subía al escenario y cuando me reconocieron aquellas chicas en España. Le conté todo lo que me había hecho feliz estos meses y todo lo que había disfrutado con mis compañeros. Todo iba bien hasta que salió su nombre en la conversación, ese nombre que tanto quería evitar. Ignoré como pude el tema, pero ella no me dejó escapatoria, así que tuve que contárselo y ponerle al día de casi todo lo que había pasado. Decidí omitir que me dio un ataque de pánico, ya que no quería preocuparla. Paré de hablar de él cuando noté mi voz rasgada a la par que mis ojos se cristalizaban y sentía una leve punzada en mi garganta.

"¿Y antes de irte no te ha dicho nada?" negué con mi cabeza.

"Me he ido antes de que si quiera pudiera hacerlo"

"Es un capullo Eve"

"Lo sé..."

"Tienes que evitarle como sea, solamente va a hacerte más daño"

"Ya he intentado eso"

"Bueno pues tienes que intentarlo más, no puedes dejar que juegue contigo como le plazca"

"Es muy fácil decirlo pero es difícil cuando él ha sido la única persona en todos estos meses que me ha hecho sentir viva, aunque fuera solo por unos minutos"

"¿Y crees que merece la pena todo lo que estás sufriendo por esos minutos?"

"Tiene muchos problemas"

"¿Y eso es excusa para tratarte así?"

"No puedes entenderlo porque no lo has vivido como yo"

"Es que no se entiende vamos..."

"No espero que lo hagas"

"Deja de defenderle y buscarle excusas Evelyn"

"No le defiendo, yo-"

"Sí lo haces" suspiró después de haberme interrumpido. "¿Enserio crees que vale la pena aguantar todo lo que te hace por un chico que ni siquiera se preocupa por no hacerte daño? ¿De verdad lo crees? Porque ni siquiera le importó como te sentiste cuando te cerró la puerta en la cara, o cuando te gritó y te dijo todo lo que me has contado"

Y lo que no sabes...

De repente todas sus palabras chocaron en mi mente como una ola rompiendo en la orilla del mar. La verdad me golpeó fuertemente, esa verdad que yo misma me había procurado de ocultarme. Sabía que lo que yo estaba haciendo estaba mal, pero no me di cuenta de lo grave que era hasta que alguien más lo dijo en voz alta. Y en ese momento, cuando se suponía que debía de odiarle con todas mis fuerzas, todavía seguía queriendo estar a su lado y que me abrazara como él sabía hacerlo para que me olvidara de lo malo. Aún después de todo yo seguía viendo a una buena persona en él.

INEFABLE  [ *Niall Horan* ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora