Problematic Assignment || jikook + taejin || [Terminada✓]

🍃 31 🍂

La noche había sido más que increíble. Taehyung había caído rendido después de la tercera ronda al igual que Jin, quien estaba disfrutando de por fin terminar el año de celibato, y no con cualquier persona, sino que lo hacía con alguien a quien realmente quería.

Cuando vio que Taehyung se había dormido, se levantó para ir por toallas y limpiarlo. También aprovechó para hacer lo mismo, luego volvió a acostarse a su lado.

Tae era algo extraño al dormir porque en cuanto sentía la presencia y calor de Jin se abrazaba a su cuerpo como un koala, aunque Jin no podía sentirse más a gusto con eso.

Taehyung estaba teniendo el mejor sueño en años, pero una alarma estridente lo estaba sacando de su ensoñación.

—Mimi, apaga eso —dijo adormilado el chico. Poco después el sonido desapareció y enseguida sintió un cuerpo cálido abrazarlo de la cintura—. ¿Quieres cariñitos, mimi?

—Preferiría que dejaras de decirme mimi.

Jin se estaba divirtiendo un poco con el adormilado de Tae. El idol abrió los ojos en grande y volteó a su espalda. Estaba tan dormido que no recordaba si lo que había pasado anoche había sido uno de sus sueños con el guardaespaldas o algo real.

Jin, al ver la cara de confusión de Tae, rió y le dio un pequeño beso en la nariz.

—¿Necesitas que te refresque la memoria, tete? —Tae sonrió ligeramente, dándose cuenta que no era un sueño. Aquello tan alucinante realmente había osado.

Jin también le sonrió, y después volvió a besarlo. No obstante, al apartarse, trató de hablar serio.

—Hay que irnos al penthouse, Tae. Jimin debe estar esperándote.

—Mimi estará bien con el cabezón de Jungkook, descuida. Mejor quedémonos aquí un rato más, ¿sí? —Tae puso el puchero más tierno que pudo, algo debió haber aprendido de ver a Jimin todos los días, además necesitaba intentar sacar ese lado tierno con Jin para ablandarlo.

—No hagas eso, Tae. —sonrió Jin, le apretó los cachetes y lo volvió a besar, dio un recorrido de besos por todo su rostro hasta terminar con un tierno beso en la frente, luego se levantó de la cama y comenzó a arreglarse—. Vamos, andando. Te prometo que volveremos aquí después.

A regañadientes, Tae hizo caso.

—Está bien, pero que conste que dijiste que me volverás a traer, Kim.

Tae imitó a Jin y comenzó a buscar su ropa para vestirse, pero su guardaespaldas se giró para verlo.

Taehyung se estaba terminando de poner su camisa mientras buscaba sus pantalones y boxers, por lo que no notó que Jin se había acercado a él hasta que sintió sus brazos rodeando su cintura y la barbilla de Jin recargada en su hombro.

—¿Vuelvo a ser Kim?

Taehyung río.

—Me gusta decirte Kim, suena sexy porque me da la sensación de algo prohibido.