Pequeños problemas || Marcanne

Cap 3 | En la escuela

- ¡Amiga, por fin llegas! ¡Buenas noches!

Dijo una rubia dando una palmadita en la espalda de la Boonchuy, la cual se rió avergonzada.

Anne después de tener la pequeña conversación por la mañana con la azabache, en la cual por fin se presentaron correctamente diciendo sus nombres, se fue rápidamente a la escuela, pues se había hecho tarde... Como todos los días.

- Te estuve esperando por casi un año -exageró-, ya sentía hacerme vieja.

- Aunque fuera un año, seguirías siendo una adolescente Sash.

Sasha mantenía su sonrisa egocéntrica adelantándose para de una vez entrar a su respectivo salón, no sin antes desearle buena suerte en el examen que tendría Anne en su clase.

- Espera, ¿¡Tenía examen!?

- Que yo haya prestado más atención a tus clases que a la mía no es mí problema.

Dijo Sasha cerrando la puerta de su aula.

Anne se alarmó, ni si quiera recordaba de qué curso era ese supuesto examen, ahora sí estaba fregada, tendría una "C" más en sus calificaciones y sus padres ya la había advertido sobre ello. No la dejarían salir de casa en un mes entero.

Fue corriendo a su aula y ni bien abrió la puerta todas las miradas se posaron sobre ella.

- Buenos tardes señorita Boonchuy.

Habló el profesor sentado en su pupitre, estaba bien vestido con camisa amarilla y saco, era un mayor de edad que se hacía llamar por Hop pop.

- B-buenos días profesor.

- ¿Lista para el examen de matemáticas?

Matemática. Para nada era su fuerte. Era el curso que más odiaba en su vida, porque no entendía ni siquiera como encontrar la raíz cuadrada. Su profesor le había dicho varias veces que no encontraría un árbol con una raíz de esa forma al verla cavar cerca de una planta.

- S-sí profesor...

Mintió, tratando de convencerse a sí misma de que podría con esto, pero la presión de sus padres estaba allí y aunque la fe estaba presente la provabilidad de que repruebe era de 99%.

- No sé ni madres... - susurró para ella misma sentándose en su carpeta.

Uno de sus compañeros la había escuchado y poniendo una de sus manos en el hombro de la morena trató de hacerla sentir mejor

- Tranquila, yo tampoco se nada.

Savisa lo miró por un segundo y luego sacó su lapicero, lapiz y borrador, que era lo único que todos deberían tener el la mano para realizar el exámen.

Hop pop pasaba por cada mesa dejando dos papeles en las manos de los alumnos, uno en donde harían sus operaciones y otro dónde marcarían la respuesta, repitiendo siempre la frase de "No volteen las hojas hasta que yo lo diga".

Y así fue. Hop pop dio la señal y todos empezaron con el examen reinando el silencio total en el salón.

Anne solo se quedó mirando el papel, con los nervios en todo su cuerpo, el silencio era tal que podía escuchar su propio sonar de sus huesos o hasta la respiración de su compañero de al lado.