La brisa sopla mi cara, y el sol arde sobre ella. Ninguna sensación como estar mirando el amanecer en la playa. El agua se torna anaranjada con el reflejo de la aurora sobre ella. Hermoso, muy hermoso.
Alguien toma mi mano y volteo a mirar, llevándome una gran sorpresa—¡Hey! ¿Qué haces aquí?
Esa persona ríe. Su sonrisa se hace más hermosa cuando sus ojos claros se combinan con el sol.
—Sólo quería acompañarte un rato mientras estabas aquí sola—dice—Yo sólo... quería estar contigo.
Asiento y comienzo a percibir el calor sonrojando mis mejillas—Oh, de acuerdo.
Nos sentamos juntos en la playa. Estoy mirando el amanecer, y aún no puedo creer con quién.
—Oye, estoy aquí para declararte mi amor—Él me mira a los ojos, lo que me hace sentirme en el aire.
Suspiro, encantada—¿Hablas en serio?
—Sí,—contesta al tiempo que asiente con su cabeza—para declararte mi amor... por este perro.
Un perro sale detrás de él y lo abraza. ¿Y recuerda la parte en la que estaba confundida? Bueno, sigo muy confundida, ahora sí lo estoy.
Se puso de pie con un semblante de que la cosa va en serio, ¡y yo sigo sin saber por qué!
—Ruffus, eres tan lindo—dice, ridículamente inspirado—Nunca conocí a nadie como tú.
—Espera,—interrumpo—¿de dónde lo sacaste?
—Nunca me enamoré de nadie como estoy enamorado de ti, Ruffus—Continúa su discurso, ignorándome
Me levanto—Un segundo, ¿cómo que Ruff...
Y no he terminado de decir mi queja cuando de pronto un enorme helicóptero militar aparece detrás de él, sacando unas enormes escaleras desde arriba. Él toma al perro y se aferra a la escalera:
—Lo siento, nena—me dice—Debo ir a salvar a una vaca en peligro en el polo norte, nos veremos pronto.
Mi confusión alteró todo me hace alterarme, y la forma en la que él evade las preguntas que le hago me enoja. Trato de que al menos me escuche:
—¿Pero qué...
—De verdad—me interrumpe, y coloca la palma de su mano frente a mi cara en señal de que no hable más—Lo siento, el deber me llama. No ruegues más. Ruffus y yo te extrañaremos.
No me queda de otra que asentir. Él se va con el perro en brazos, aún agarrado de la escalera del helicóptero en vuelo. La playa vuelve a quedar tranquila, hasta que un par de ovnis aparecen y me secuestraron en pleno. Ya no estoy en la playa. Ya no puedo ver el amanecer.
Sueños, son tan ilógicos. Pero no más ilógicos que el mío.
–×××–
Holaa, Princesos xD
¡¡Bienvenidos a MPI!! Si estás leyendo esto, gracias; si no lo estás leyendo... o.O
Ahm, en fin, este es un proyecto que tengo desde hace menos de un año y pues... quería compartirlo con alguien. MPI se sentía Forever Alone xD
Espero que les guste:3
Bye♥
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Mi Perfecto Idiota.
Teen FictionSusan es completamente una "corazón de roca". Nada puede conmoverla o hacerla cambiar, sus bases están clavadas dentro de sí y ninguna persona la hará cambiar de opinión. Pero eso se pone a prueba cuando su mejor amigo Dylan, un chico con más aire e...