Castigar al Playboy a partir de Ahora

Capítulo 44: Es su olor

Cuando Ye Ting salió del palco, Xiao Ye estaba bebiendo solo junto a la pequeña ventana.

Se rascó la cabeza y se acercó a él: "¿Por qué has salido de repente?".

El nudo en la garganta de Xiao Ye rodó por un momento, sus ojos oscuros reflejaron un poco de luz, su rostro era apuesto y frío: "No me interesan esas personas".

¿No decías que te sentías cansado de tu vida de antes y querías encontrar algo nuevo y probar el sabor del amor? ", dijo Ye Ting con un encogimiento de hombros y una leve sonrisa, "por qué ahora..."

La cara de Xiao Ye cambió de repente.

Cogió la botella, la levantó, dio un trago y se la tragó de un tirón, como si quisiera reprimir el remordimiento y la amargura que inundaban su corazón.

Un impulso, había arruinado la vida que había llegado a tener.

Un impulso que alejó a la única persona que más lo aceptaba, que más lo cuidaba y que alguna vez lo amó. <<ya me hizo sentir mal el Xiao :')

Si hubiera sabido que la confianza de Zhao Xianghai en él se derrumbaría por completo a causa de sus acciones y si hubiera sabido que Zhao Xianghai estaría tan decidido a marcharse, se habría aferrado a él pase lo que pase y no habría tenido el valor de salirse a involucrar con otra persona.

"¿Realmente no quieres a esas personas?" Ye Ting puso su brazo alrededor del hombro de Xiao Ye y lo sacudió un poco, "Te ordené especialmente que los eligieras, todos ellos son de estilo maduro y pueden ser más traviesos y más poderosos en..."

"Por mucho que lo pretendan, no son Zhao Xianghai, sus sentimientos, su temperamento y sus modales son mundos aparte", Xiao Ye le miró con frialdad, "Que se den prisa y se vayan, ni siquiera tengo ganas de mirarlos una vez más". 

"Bien, bien, bien", respondió impotente Ye Ting y se dio la vuelta para marcharse, gruñendo mientras lo hacía, "les dejaré ir ahora, ¿de acuerdo? Si hubieras estado más sobrio, no estarías aquí ahora, bebiendo vino y fingiendo ser un amante..."

El vino picante que bebía en su estómago e intestinos era constantemente estimulante.

Su rostro se volvió blanco de repente y se apoyó en el alféizar de la ventana, angustiado.

Cuando Ye Ting miro hacia atrás y vio el aspecto de Xiao Ye, se apresuró a ayudarle: "Vamos, vamos, no bebas, estás muy borracho, hueles a alcohol maldición".

Xiao Ye respiró profundamente unas cuantas veces y se apartó de Ye Ting: "No tengo ningún problema con el alcohol, no me hagas caso".

Frunció el ceño y señaló la botella de vino en la mano de Xiao Ye: "Xiao, ¿sabes a qué altura está este vino?".

Xiao Ye ni siquiera lo miró y tarareó suavemente," No importa ".

Una hora más tarde.

"Qué mierda", Ye Ting medio cargó a Xiao Ye, y salió del palco con dificultad, su rostro estaba oscuro "No importa mi culo, estas tan borracho, maldita sea..."

Xiao Ye estaba lleno de alcohol, un par de ojos perdidos abiertos y cerrados, "Quiero...beber..."

"Si no crees que el vino es lo suficientemente estimulante, puedes beber el maldito Paraquat".¡vamos!" Ye Ting maldijo en secreto y se esforzó por meter a Xiao Ye un hombre musculoso en el coche antes de dar un largo suspiro de alivio.

Se subió al asiento del conductor, arrancó el coche, dudó un momento, volvió la cabeza hacia atrás y le preguntó a Xiao Ye que estaba tan borracho que sólo le quedaban los últimos vestigios de conciencia: "Oye, ¿a dónde vas a volver?".

Xiao Ye no dijo nada, sólo movió su cuerpo incómodo.

"Te enviaré a casa, a la casa de la familia Xiao, ¿de acuerdo?" Ye Ting volvió a preguntar, sin inmutarse.

Xiao Ye abrió ligeramente los ojos y exhaló: "No...no quiero volver..."

"Entonces, ¿a dónde puedes ir? No puedo dejarte en un hotel, ¿verdad?" Ye Ting se rascó el pelo con irritación, "Con tu estado actual, ¿Que harás si mueres dentro? Tengo miedo".

Xiao Ye volvió a cerrar los ojos y no dijo una palabra, sólo quedó su pesada respiración.

Ye Ting se tiró del cuello de la camisa y pensó en ello y de repente se le ocurrió un lugar.

Pisó el acelerador y se adentró en la noche.

Los árboles de la calle y los edificios altos fuera de la ventana del automóvil se retiraron rápidamente.Después de más de diez minutos, Ye Ting estacionó el automóvil frente a una pequeña villa.

Salió del coche, sacó a Xiao Ye del coche, se lo puso al hombro y lo llevó a medias hasta la puerta del chalet, dudó pero pulsó el timbre.

Después de que sonara el timbre, no hubo movimiento en el interior.

Ye Ting lo presionó por segunda vez y las luces de la villa se encendieron. Luego, la puerta se abrió desde el interior. Zhao Xianghai vestía pijama y gafas, y una apariencia gentil apareció en su visión.

Ye Ting se apresuró a sonreír: "Es...Sr. Zhao, ¿verdad?".

Zhao Xianghai frunció el ceño: "Usted es..."

"Soy Ye Ting, estoy enviando de regreso a Xiao..." Antes de que pudiera terminar de hablar, Xiao Ye, que había estado agachando la cabeza a su lado, escuchó la voz de Zhao Xianghai y levantó la cabeza.

Fue entonces cuando Zhao Xianghai se fijó en el borracho Xiao Ye que estaba a su lado.

Frunció el ceño: "¿Qué le pasa?".

Los ojos aturdidos de Xiao Ye se abrieron penosamente y su nariz se movió un par de veces antes de lanzarse hacia adelante y antes de que Zhao Xianghai pudiera reaccionar, las manos de Xiao Ye ya habían rodeado la cintura de Zhao Xianghai y su cabeza estaba apoyada en el cuello y los hombros de Zhao Xianghai y todo su cuerpo estaba pegado al de Zhao Xianghai como una especie de gran animal.

Respiró ligeramente, cerró los ojos y murmuró confuso: "Mmm, es su olor....".