Capítulo 115: No vayas demasiado lejos

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Al día siguiente al amanecer, Zhao Xianghai se levantó.

Acababa de terminar de lavarse y cambiarse de ropa cuando entró a la cocina y percibió un olor a quemado.

Zhao Xianghai abrió la puerta corredera para echar un vistazo y se quedó de repente sorprendido.

Xiao Ye se había levantado incluso antes que él. Llevaba su delantal habitual sobre el pantalón del traje y la camisa negra, sosteniendo una espátula y mirando la comida ennegrecida en la olla.

Xiao Ye giró la cabeza cuando escuchó un ruido detrás de él y vio que era Zhao Xianghai. —"Hermano Hai, estas despierto"—

—"¿Qué estás haciendo?"—

—"Estoy preparando el desayuno para ti y nuestra hija",— dijo Xiao Ye con un brillo en sus ojos, —"Espera...ya casi he terminado aquí"—

Zhao Xianghai enarcó las cejas mientras miraba la bola de cosas que había hecho Xiao Ye: —"Los huevos se están quemando"—

Xiao Ye giró la cabeza abruptamente con una expresión tensa, y comenzó a saltear de forma un tanto nerviosa.

 Zhao Xianghai sacudió la cabeza, se acercó a él y cogió la espátula: —"Tú descansa, yo lo haré"—

Xiao Ye dejó caer la mano de mala gana y sonrió ante los hábiles movimientos de Zhao Xianghai: —"Parece que aún tengo mucho que aprender si quiero alcanzar tus habilidades"—

Zhao Xianghai frió tranquilamente los huevos y no dijo nada.

Xiao Ye se conmovió y se colocó detrás de Zhao Xianghai, rodeando tranquilamente su cintura con las manos y apoyando la cabeza en su hombro: —"¿Puedes al menos darme una oportunidad para practicar?"—

Zhao Xianghai percibió el gesto íntimo de Xiao Ye y se puso rígido.

Con su mano libre, dio una palmada en la cintura de Xiao Ye y dijo fríamente: —"No vayas demasiado lejos"—

Los ojos de Xiao Ye mostraron una pizca de pérdida.

Le soltó la mano, todavía apoyando la cabeza en Zhao Xianghai, y dijo con voz apagada: —"Esta bien, lo sé..."—

Cuando llegó la hora de desayunar, Lele parecía muy emocionada.

Esta niña estaba deseando que llegara la excursión y la fiesta de cumpleaños.

Cuando Zhao Xianghai vio su entusiasmo, sacudió la cabeza con una sonrisa.

Cuando llegó el cumpleaños de Lele, Zhao Xianghai empezó a hacer los preparativos al mediodía.

Llamó a unos cuantos asistentes de vida y redecoró la casa, colgando globos, colocando pancartas especiales y sacando todo el material de fiesta que había encargado con antelación.

Mientras pegaba los globos a la pared, miró a través de la pared de cristal y vio el coche de Xiao Ye entrando lentamente desde fuera.

Xiao Ye aparcó el coche, salió de él y entró rápidamente en la casa.

Zhao Xianghai le vio acercarse a él y enarcó una ceja: —"¿No dijiste que tenías una reunión de fin de año y que hoy no estabas libre?"—

—"La reunión fue pospuesta por dos horas"— Xiao Ye sonrió: —"No tenía nada más que hacer en la empresa, así que he vuelto para ayudar. ¿Qué puedo hacer?"—

Zhao Xianghai tarareó ligeramente y giró la cabeza hacia atrás: —"Casi lo he arreglado todo, no hay nada más que hacer"—

Xiao Ye se acercó, con los ojos ansiosos: —"Hermano Hai, por favor, dame algo que hacer. No importa el trabajo que sea"—

Zhao Xianghai le miró fijamente durante mucho tiempo: —"Ve y trae las cajas de fuera"—

Xiao Ye se alegró: —"De acuerdo"—

Salió por la puerta con pasos rápidos y una sonrisa en la cara, como si fuera a divertirse en lugar de hacer tareas.

Cuando movió algunas cajas de cosas, suspiró: —"¿Puedo dejarlo aquí?"—

—"De acuerdo",— asintió Zhao Xianghai, —"Si no estás ocupado, ve a ayudar al Asistente Wang y a los demás a decorar el patio, todavía están ocupados por allí"— 

Xiao Ye dijo "hmm" y levantó la pierna para irse.

Antes de irse, tosió, se detuvo en seco y preguntó expectante: —"Hermano Hai, ¿viste el regalo que te hice la última vez?"—

Zhao Xianghai estaba ocupado con el trabajo que tenía entre manos y respondió despreocupadamente: —"Sí, el reloj de diamantes es bastante bonito"—

—"¿Y el libro?",— el corazón de Xiao Ye latía más rápido, —"¿Has leído el libro?"—

—"¿Libro?"— Zhao Xianghai se quedó atónito, y luego recordó que Xiao Ye le había regalado un reloj de diamantes y un libro sobre curación psicológica.

Sacudió la cabeza: —"No lo he leído todavía, no necesito sopa de pollo para el alma en estos días"—

Los ojos de Xiao Ye mostraron instantáneamente un toque de decepción.

—"Hermano Hai"—

Xiao Ye estaba a punto de abrir la boca cuando una voz masculina le interrumpió.

Giró la cabeza y vio a Yang Jiali y a Ye Ting de pie en la puerta de su casa.

Yang Jiali llevaba una sudadera de color beige y el pelo cortado, tenía un aspecto muy elegante.

Ye Ting seguía vestido con un traje, sosteniendo la mano de Yang Jiali y sus ojos estaban fijos en el cuerpo de Yang Jiali, como si temiera que huyera.

NT: Estaré actualizando un capitulo a dos durante estos dias debido a un pequeño problema de salud. Gracias por su apoyo y cuídense <3 

Castigar al Playboy a partir de AhoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora