Castigar al Playboy a partir de Ahora

Capítulo 106: Ir a casa y vender batatas

 Xiao Ye llegó a la comisaría y poco después llegó también el abogado.

Los dos entraron juntos.

El ambiente en la comisaría era solemne, y Xiao Ye pronto encontró a las personas que buscaba entre ellos.

Los dos hermanos, Lu Yi y Luther, estaban sentados en las sillas como dos perros muertos, con aspecto ceniciento. Fu Zhouming estaba sentado junto a ellos, con una máscara negra y mirando a su alrededor con una mirada alerta de vez en cuando.

Para una figura de la industria del entretenimiento como él, mantener su imagen frente al público era la primera prioridad. Si saliera a la luz un escándalo como el de meterse a la fuerza en la cama de un hombre, dejaría de ser actor y se tendría que ir a casa a vender batatas.

Los labios de Xiao Ye se curvaron en una fría sonrisa cuando vio a esos tres idiotas.

El abogado se adelantó y habló con el agente de policía que llevaba el caso, que rápidamente les consiguió una sala de reuniones.

Xiao Ye se sentó frente a los tres hombres, con las piernas dobladas y una expresión ligeramente fría.

—"Cuéntenme lo que sucedió ayer",— dijo Xiao Ye, pasando por delante de los tres hombres, —"no esperen a que los obligue a hablar por otros medios"—

Fu Zhouming levantó tímidamente la cabeza, miró a Xiao Ye y volvió a bajar la cabeza: —"Sr. Xiao ..."— El tono aún era un poco débil, lo que sonaba lamentable.

Xiao Ye pensaba que Fu Zhouming era algo nuevo, al menos su piel era buena. Pero ahora, cuando miraba la cara de Fu Zhouming y escuchaba su patética voz, sentía una infinita sensación de asco en su interior.

Estaba tan malditamente ciego por haber gastado tanto dinero en ese tipo de cosas, e incluso había pedido en secreto a alguien que le diera el trofeo del premio de cine a Fu Zhouming.

Ahora que lo pensaba, se arrepintió mucho.

Si hubiera cogido ese dinero, podría haber comprado algunos regalos para Hai, para reconfortar su duro trabajo y calentar su corazón.

Xiao Ye arrugó las cejas, con una expresión de claro disgusto: —"No hables con tanta condescendencia, no quiero oír eso de ti. Sólo quiero que me digas qué pasó ayer y quién estuvo detrás"—

El agente bajó los hombros y se mostró abatido: —"Señor Xiao, sabemos que nos equivocamos. Lo de ayer fue un impulso de nuestra parte...nosotros...no fuimos ordenados por nadie"—

Las palabras "nadie nos ordenó" fueron dichas con los dientes apretados por el gerente.

No era fácil meterse con Xiao Ye, y tampoco lo era Guan Changfeng.

Originalmente, de acuerdo con el plan, sólo necesitaban dejar que Fu Zhouming y Xiao Ye tuvieran sexo, entonces Guan Changfeng naturalmente cumpliría su promesa de protegerlos.

Pero, ¿quién iba a pensar que Xiao Ye, a quien creían que se engancharía a la primera de cambio, sería tan cabeza dura?

Preferiría herirse a sí mismo hasta quedar ensangrentado que enfrentarse a Fu Zhouming.

Cuando el plan fracasó, se vieron en un dilema.

El agente se lo pensó y decidió que sería mejor negarlo todo. Xiao Ye claramente no iba a dejarlos ir, pero ahora como estaban apretando los dientes para no escupir al joven maestro Guan, tal vez...el joven maestro Guan todavía podria protegerlos gracias a su boca apretada.

Xiao Ye miró el rostro cambiante del agente y apartó la mirada: —"¿Nadie te está ordenando?"—

—"Nadie"— El agente mordió la bala.

—"Bien, si quieres responder así, es tu libertad",— Xiao Ye se levantó, su aura era tan fuerte que el agente no podía levantar la cabeza, —"pero te diré algo primero, no hay nada que se pueda ocultar cuando soy yo el que lo indaga. Ya que no quieres hablar de ello, abogado Fang, puedes hablar con ellos en mi nombre"—

Xiao Ye estaba harto de ver las caras de esa gente ahora. Como no podía pedirles nada de inmediato, dejaría que el abogado Fang negociara con ellos adecuadamente, para poder llegar al fondo del asunto y arreglar las cuentas juntos.

Con esto en mente, se dio la vuelta e intentó marcharse.

Fu Zhouming se levantó bruscamente: —"¡Sr. Xiao!"—

Xiao Ye se quedó quieto e inclinó la cabeza.

—"Por favor, perdónenos esta vez",— los ojos de Fu Zhouming aclamaban, —"No nos atreveremos a hacerlo de nuevo, prometemos que no lo haremos"—

—"No",— Xiao Ye estaba furioso al pensar que el hombre frente a él era el que casi le hacía imposible recuperar a Hai, —"no perdonaré esto a la ligera"—

La asistente aparcó el coche fuera de la comisaría, pero no se fue.

La mano de Xiao estaba lesionada y no podía conducir, así que naturalmente tomó el relevo.

Se sentó en el coche, miró por la ventana y bostezó. Pensando que el Sr. Xiao podría necesitar todavía un rato, sacó aburridamente su teléfono y pasó un rato por Weibo.

Entraba habitualmente en las primeras búsquedas y una le llamó la atención.

Murmuró: "¿Tímido CP?"

La curiosidad la llevó a hacer clic en él.

Pero eso fue todo lo que necesitó para que se le salieran los ojos de la cabeza.

Las personas que aparecen en la foto de la campaña de marketing eran claramente Zhao Xianghai y Song Xiu.

En la imagen, Zhao Xianghai cubría a Song Xiu con su traje de chaqueta. Song Xiu se estaba abrazando a sí mismo, con un aspecto un poco débil y miserable, y los dos estaban inclinados uno al lado del otro, caminando muy de cerca.