Castigar al Playboy a partir de Ahora

Capítulo 105: El beso de buenas noches

Xiao Ye dejó escapar un suspiro y soltó a Zhao Xianghai.

Se acostó junto a Zhao Xianghai durante mucho tiempo, pero no pudo evitar decir: —"Hermano Hai, en el futuro recordaré cada palabra que te dije, y mantendré cada promesa que te hice, lo juro"—

Zhao Xianghai le dio la espalda a Xiao Ye, respirando con tranquilidad, y no dijo nada.

—"Todavía te amo",— Xiao Ye puso subrepticiamente su mano en la cintura de Zhao Xianghai, la luz de la luna brillaba a través de la ventana en sus ojos, —"Te recuperaré, recuperaré nuestro antiguo hogar, no importa cuánto tenga que dar, lo haré con gusto, de verdad"—

Mientras Zhao Xianghai escuchaba sus palabras, su ya calmado corazón sintió como si unas pequeñas piedras hubieran sido arrojadas en él, haciendo que se formaran ondas. Respiró hondo y estiró la mano para taparse con las mantas: —"Duérmete"—

Xiao Ye se sintió satisfecho de estar acostado junto a Zhao Xianghai, —"Hermano Hai, buenas noches".— 

Cuando le dio las buenas noches, dejó de hablar y se acostó en silencio mirando al techo.

El sonido del reloj marcando uniformemente en sus oídos y el sonido de la respiración de Zhao Xianghai hicieron que el corazón de Xiao Ye se sintiera como si hubiera un pequeño gusano arrastrándose, picando por todas partes, sin poder dormir.

Se dio la vuelta de nuevo, miró el cuello de Zhao Xianghai y llamó tímidamente: —"Hermano Hai, ¿estás dormido?"— 

La voz impaciente de Zhao Xianghai sonó: —"Estoy durmiendo profundamente"—

Xiao Ye frunció los labios y se acercó, —" Yo... quiero pedirte una cosa más, ¿puedo?"—

Zhao Xianghai rozó la cabeza y frunció el ceño hacia Xiao Ye: —"¿No acabas de decir que no querías nada más y que sólo querías que confiara en ti una vez?—

Xiao Ye levantó las cejas, con un toque de expectación en sus ojos: —"¿Puedes hacerlo?"—

"'¿Qué quieres hacer?"—

—"Yo puedo..."— Xiao Ye dudó, pero no pudo resistirse a decir: —"¿Me das un beso de buenas noches? Como antes"— 

Zhao Xianghai se congeló por un momento, aparentemente no esperaba que Xiao Ye pidiera esto.

—"No quiero decir nada más, de verdad, quiero un beso de buenas noches",— Xiao Ye bajó la cabeza y se apoyó en el hombro de Zhao Xianghai, sus cejas de espada cayeron un poco mostrando un aspecto extrañamente lamentable. —"Te echo tanto de menos que no puedo evitarlo. ¿Puedes... dejarme besarte un poco? No quiero más, sólo un beso"—

Los ojos de Zhao Xianghai se movieron y no dijo nada.

Xiao Ye sintió el silencio de Zhao Xianghai y suavizó su tono: —"¿Puedes?"—

Zhao Xianghai miró los sentimientos de Xiao Ye y permaneció en silencio.

Xiao Ye no obtuvo respuesta de Zhao Xianghai y pensó que estaba diciendo que no. Estaba a punto de volver a tumbarse, decepcionado, cuando de repente se dio cuenta de que la mano que había puesto en secreto en la cintura de Zhao Xianghai no había sido apartada por él.

Se atrevió a parpadear, con el corazón temblando ligeramente, y empujó tímidamente hacia adelante. Su rostro se acercó más y más, pero Zhao Xianghai no reaccionó en absoluto para evitarlo.

El corazón de Xiao Ye se llenó de éxtasis y reprimió su respiración pesada y con un latido del corazón frenéticamente acelerado, besó suavemente los labios de Zhao Xianghai. ¡Por fin habia logrado besar a Zhao Xianghai!

Una vez que Xiao Ye se encontró con los labios de Zhao Xianghai, sintió como si hubiera pasado un Año Nuevo chino antes de que se prohibieran los fuegos artificiales, y miles de fuegos artificiales explotaron en el cielo nocturno.

Quizás esto es lo que se conoce como un corazón floreciente.

Xiao Ye besó los labios de Zhao Xianghai, y un impulso creció en su corazón. Cerró los ojos y se llenó de pensamientos: "Bésalo más, bésalo más profundamente, bésalo una vez, bésalo lo suficiente antes de decir nada".

No sabia cuándo seria la próxima vez que pueda besarlo.

Con esto en mente, Xiao Ye besó más y más profundamente, incluso uso su mano para alcanzar la parte posterior de la cabeza de Zhao Xianghai, presionando contra él y entrelazando sus labios y su lengua. El beso duró un tiempo desconocido antes de que Xiao Ye lo soltara.

La respiración de Zhao Xianghai estaba tan agitada por el beso que se tomó un momento para calmarse antes de decir: —"Los besos de buenas noches, ¿son tan apasionados y calientes como los tuyos?"—

Xiao Ye sonrió acaloradamente y bajó la cabeza para darle a Zhao Xianghai otro beso en la comisura de los labios: —"Te amo"—

El corazón de Zhao Xianghai dio un vuelco mientras tarareaba y se alejaba de sus palabras.

—"Hermano Hai, te amo",— Xiao Ye estaba feliz, —"haré que me aceptes de nuevo"— 

Zhao Xianghai tiró de la manta: —"No me hables, me voy a dormir"—

—"Ve a dormir, realmente no te molestaré esta vez",— Xiao Ye suspiró satisfecho, —"Hermano Hai, buenas noches"—

Cuando la asistente vino a recoger a Xiao Ye del hospital para llevarlo a la comisaría, se sorprendió al ver que su jefe estaba hoy de muy buen humor. No, no estaba de buen humor, estaba de muy buen humor.

Su apuesto rostro sonreía como una flor y estaba lleno de alegría.

Sentada en el asiento del conductor, sintió la energía y la alegría en el cuerpo de su jefe, dejándola un poco desconcertada.

Acababa de ser drogado, casi lo llevaban a la cama y se había hecho una herida tan grave en la mano. ¿Era esto tan agradable? La asistente dijo: —"Sr. Xiao, hoy parece especialmente feliz"—

Xiao Ye la miró y dijo con una sonrisa: —"¿Es así?"—

—"Sí",— añadió la asistente, —"y ha estado sonriendo desde que subió al coche"—

Xiao Ye estaba tumbado en la parte trasera del coche, su mente recordaba la sensación de besar a Hai la noche anterior, y todo su corazón estaba crispado: —"¿Qué, todavía quieres que te regañe todos los días?"—

La asistente se sonrojó: —"No, no, está bien, está bien, es solo que es un poco raro"—

La asistente apretó los labios, reprimió su curiosidad interior y condujo hasta la comisaría.