Together | SUNOO

CAPÍTULO 10

Los Lee corrían a todos los lugares de la casa una no encontraba su mochila, la otra aún no se había cepillado los dientes y el su padre no encontraba sus zapatos todo era un caos en la mañana que Yeong tuvo que bajar lo bueno que Sunoo tenía el sueño pesado.
Bajo rápidamente las escaleras ya con los zapatos del señor Lee.

— Estaban en tu cuarto.

— No lo recordaba gracias mi amor.

— Chaemi tu mochila está regada en la lavadora — menciona algo obvia.

— Creí haberla perdido — se rasca la nuca yendo al cuarto de lavado.

Minsunk terminó de lavarse los dientes y era la primera en estar en la puerta esperando a los demás.

— Amor no hagas ninguna locura con Sunoo, si vas a salir mándame un mensaje y hoy llego en la madrugada, recoges a tus hermanas a las dos de la tarde entendido.

— Si papá ya vete que se les hace tarde a TODOS.

— Bien te amo, cuidado eh!

— Si si si papá adiós.

Como si fueran flash entraron a la camioneta listos para partir Yeong se despide de todos cerrando la puerta de la casa subiendo a la recámara donde aún Sunoo dormía, ella se acostó de nuevo sacando de su buró un libro que comenzó a leer hace unas semanas atrás.

Sunoo se remueve de la cama para tallarse los ojos haciendo gruñidos, Yeong ve lo tierno que es despertándose.

— Buenos días amor — le da un beso en los labios.

— Buenos días nunu.

— Quieres desayunar afuera yo invito.

— Bueno si mi novia me consiente mucho mejor.

— Vístete amor tienes diez minutos — Yeong aviso para salir por una sudadera que tenía su hermana en la habitación de esta.

Lista con lo que traía era más cómodo un pantalón deportivo y tenis con plataformas saca una liga gruesa para hacerse una coleta alta entra a la habitación Sunoo aún no se había puesto la playera blanca que podría verse su torso desnudó a lo que Yeong cerró los ojos. El rubio solo soltaba risas escandalosas.

— Oye déjate de reír.

— Amor tu cara me dio gracia.

— Soy payaso o que — niega ya estando listo.

A lo que iba de su ropero saca su chaleco negro creyendo que sería un bonito día hoy estaba nublado. Ambos salen de la habitación bajando hasta la planta baja Yeong se aseguró que no se quedará nada encendido a lo que salieron de la casa poniéndole seguro a la puerta. Sunoo encendía el motor Yeong entra rápidamente porque moría de hambre en veinte minutos llegaron, pidieron sus menús en lo que esperaban la mesera les ofreció café.

— Amor es americano eso es muy fuerte por las mañanas.

— Descuida Sunoo no suelo tomar americano solo descafeinado pero esta vez es la excepción.

Después de minutos llegaron sus pedidos la pelinegra pidió un desayuno americano con huevos revueltos, molletes con tocino y jugo de naranja, Sunoo una pila de hot cakes con mucha miel para acompañar una malteada de fresa.
En lo que conversaban disfrutaban del lugar recomendado por la amiga de Yeong, hasta ahora es su favorito por el cual desayunaría con su novio.

Yeong después de pagar salen de aquel lindo lugar tomados de la mano Sunoo la jala para quedar frente este ahora la toma de la cintura apretando levemente estando cerca une sus labios a los que la pelinegra corresponde besar aquellos labios gruesos hacia su mundo girar esta apoya sus brazos en los hombros haciendo que se profundice el beso se separan por la falta de aire mirándose nadie quiere perder el juego de miradas que se traen.

De su muñeca ve en el reloj marcando 12:30 aún tenía tiempo para dar una vuelta.

— ¿Ahora a donde vamos? — pregunta la chica aún apoyada en los hombros de su novio.

— Y si vamos a mi casa.

— Bueno vamos a tu casa — sonríe Yeong.

Sunoo quita el seguro del carro entrando quedaba cerca el restaurante de su casa en un tramo súper corto. Rápidamente Seokjin su hermano mayor sale de la casa vestido de traje ve a ambos jóvenes que se acerca a saludarlos.

— Tortolitos no los había visto desde el mes pasado.

— Trabajas hyung por eso.

— Aún así los extraño linduras — Seokjin hace un puchero.

— Espero verte pronto oppa.

— Esperando lo mismo pequeña Yeongie — sin más se despide yéndose en su otro auto que compro dejándole el otro a Sunoo.

El rubio deja pasar a su novia primero cerrando la puerta al último la casa estaba vacía hasta que Sukyu baja las escaleras.

— Oye te espere para ver películas pero no llegaste.

— Ay se me olvidó me quede a dormir a casa de Yeong.

— Pues claro como tienes novia desde hace tres años solo te dedicas a ella el 100% — rueda los ojos molesta a lo que los menores ríen.

La mayor de los Kim se va a la cocina desapareciéndose Sunoo sube hasta su habitación cerrándola Yeong se acuesta en la cama haciendo nada Sunoo llega abrazando a su novia esparciendo besos en su cuello.

— Amor me gusta pasar tiempo contigo — suelta el rubio.

— A mi también es todo más divertido.

— Recuerdas cuando a Riki le mande la carta y tu la rompiste al instante.

— Sunoo no otra vez...

— Es que me dio risa que hayas roto mi primera carta de amor — confesó.

— Es porque en ese entonces no quiera ningún novio.

— Lo se pero el la pegó con cinta y te la entrego otra vez pero ya molesto jajajaja extraño a Riki Japón queda un poco lejos de Corea.

— Riki esta felizmente con su familia después vendrá para Seúl.

— Si tu lo dices pero mejor a que tener nuestra sesión de besos no lo crees.

— Si completamente — ambos se iban a besar hasta que los interrumpe la alarma que Yeong puso indicando 13:45 ya era hora para ir por las pequeñas Lee.

— Vamos Sunoo tengo que recoger a las niñas.

— Ay no quiero ya me canse.

— Ni modo nos vamos.