Together | SUNOO

CAPÍTULO 13

Tenían muchas cosas que hacer Yeong se dedicó a hacer los quehaceres de la casa con música amaba poder sentir emociones con el ritmo poniendo canciones viejas. Sus hermanas limpiaban sus habitaciones sin quejarse porque la mayor haría un pastel de chocolate terminando.

A dos horas pudieron darle fin al quehacer solo la mayor estaba limpiando las ventanas con ayuda de Minsuk cambió la lilas por las blancas.

— Listo hemos terminado chicas pónganme los recipientes y lo que lleva para hacer el pastel mientras me lavo las manos — ambas asintieron rumbo a la cocina.

Yeong una vez terminando baja para preparar la masa. Las hermanas listas para ayudarla lo primero que hicieron fue mezclar huevos, harina, mantequilla, leche en la batidora cuando ya no tenía grumos lo coloraron en un molde que eso hizo Minsuk le agregó un poco de sal y azúcar.
A unos cincuenta minutos se horneó aunque ya tenían el chocolate en otro recipiente Chaemi tenía todo listo para decorarlo estaba todo listo hasta que llaman a la puerta.

— Iré yo procuren no hacer un desastre — Yeong se quitó el mandil para abrir no esperaba alguna visita o a lo mejor Sunoo cayó de sorpresa pero no fue así su madre estaba enfrente.

— Alicia... — la pelinegra se quedó en blanco.

— Mi cielo me dejas pasar.

— Qué haces aquí — cierra más la puerta.

— Vine a ver a mis niñas por supuesto.

— ¿Mi papá lo sabe?

— Si le llame pero como siempre no contesta le envié un mensaje.

— Por supuesto que no te va a hablar el trabaja no se si lo recuerdas — Alicia esboza una media sonrisa.

— Buen punto...

— ¿¡Yeong quien es!?

— Nadie solo las señoras de la iglesia.

Chaemi abre más la puerta que no pudo evitar la curiosidad, a lo que estaba enfrente su madre.

— ¡Mami! — grita la pequeña abrazando a su mamá.

— ¡Mi cielo hermoso! Te extrañe.

— ¡Mamá! — ahora Minsuk llega feliz abrazándola.

Ver que extrañaban a Alicia, Yeong se ponía aún más triste.

— Mamá pasa acabamos de hacer un gran pastel de chocolate.

— Chaemi... Alicia tiene prisa no puede entrar.

— ¿Es cierto mami? — Chaemi había puesto una cara triste.

— No mi amor vamos a dentro.

Y como si se tratase de algo entraron Alicia le puso una cara cínica a la pelinegra. Entraron yéndose a la cocina todas estaban distraídas la mayor sacó su teléfono del bolsillo llamando a su padre esperando que le conteste.

¡Hola papá! Que bueno que me contestaste

¿Que paso mi niña?

Algo no andaba bien.

¿Papá de casualidad Alicia te llamo?

No porque la pregunta

Papá escucha Alicia está aquí y mintió que te mando mensajes

¿¡Que!?

Si que hago...

¿Sunwoo no está contigo?

No...

Eso me preocupa si se lleva a las niñas no la dejes ¿si? Tiene que hablar conmigo no se porque hace eso si siempre le digo que si se las lleve mejor pásame a tu madre...

La mayor va directo a la cocina para que hablaran Alicia estaba sentada en los bancos comiendo de su pastel.

— Es para ti... — le entrega el celular.

La mayor atiende el teléfono saliendo de la cocina.

— ¡Mamá nos quiere llevar al safari ahorita!

— ¿Porque?

— Porque tiene entradas Yeong — responde Chaemi de vuelta.

La mayor de las Lee solo suspira.

— ¿Alicia sabe manejar? — vuelve a preguntar.

— No, nos va a llevar su chofer — ahora responde Minsuk.

Alicia llega dándole el teléfono a su hija.

— Listo nos vamos.

— Bien si ya hablaste con mi papá esta bien.

— ¿No quieres ir Yeong? — dice Minsuk.

Niega — Tengo que lavar la ropa pero diviértanse —despeina— Nos vemos luego.

Se despiden de sus hermanas listas para salir hacia el coche rojo que se estacionó enfrente de la casa arrancando sin más.

Yeong sin ánimos de nada decide comenzar a sollozar a ella le hubiera gustado que se llevara así con su madre cuando aún estaban bien pero las actitudes de aquella mujer lo hacían difícil.

Vuelven a tocar la puerta esta vez la pelinegra toda molesta sale.

— ¡Ahora que se te olvidó maldita sea!

Abrió la puerta encontrándose con Sunoo llevando un tulipán naranja mirando la escena rápidamente deja la flor en el suelo abrazando a su novia.

— Llora todo lo que tienes ahora —como si le dijera soltó lagrimas— No tuviste un buen día ven vamos a dentro.