Capítulo 19. Conversación entre Namekianos

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La pobre ___ no paraba de beber agua porque estaba sedienta por el duro enfrentamiento con los dos Saiyans

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La pobre ___ no paraba de beber agua porque estaba sedienta por el duro enfrentamiento con los dos Saiyans. Y lo ganó con todo el esfuerzo del mundo. Aún seguían en el planeta de Bills porque el ángel les propuso quedarse para comer un buen plato de ramen. No era una mala idea. No tenía ninguna herida, solo un pequeño rasguño en sus ropas y nada más. Una mujer con mucha suerte capaz de prevenir cualquier ataque directo, ya sea físico o no.

Whis invocó la comida con su bastón. ___ se impresionó demasiado el tamaño del envase del ramen. Ella sola no podía comerlo entero. Entonces recordó que Goku tenía un apetito insaciable. Eso no había cambiado al parecer y Vegeta hizo el mismo gesto. Incluso los Dioses de la Destrucción. Pues sí que tenían un estómago sin fondo. Un agujero negro.

A sus lados izquierdo y derecho, estaban Hit y Jiren casi a modo de protección y comiendo con mucha tranquilidad. De vez en cuando se echaban miradas de rivalidad porque no les agradaba que estuvieran al lado de su "pareja". Saonel no le dio tanta importancia porque no entendía las indirectas, sin embargo, esto a Piccolo le molestaba demasiado. ¿Cómo era posible que en un principio detestasen a ___ y que, al final, se estuvieran comportando de esa manera? Un remordimiento se le pasó por la cabeza, pero prefirió ignorarlo como solía hacer.

En cambio, ___ hacía todo lo posible para no abrazar a ambos alienígenas. Su "yo" interno se lo estaba impidiendo. Imaginadla con un cartel enorme diciéndole «¡abrázalos!». La ignorancia era la mejor arma del mundo. ¡Dios! El ramen estaba buenísimo. El envase tenía el nombre de Shio Ramen que consiste caldo de pollo y cerdo, fideos, carne de cerdo, verduras y huevo Onsen. Un huevo semi cocido bañado en soja y mirín que está tremendamente rico. La espera valió mucho la pena.

—¡Volvería a repetir este plato! —exclamó Champa.

—Champa-sama este plato tiene mucha sal y no es buena para su salud. Además, no se está comiendo las verduras.

—¡No estropees mi momento, Vados! Además, tú sabes perfectamente que las odio.

—Pero si están muy buenas —dijo Vermoudh soplando un poco el plato aún caliente.

—Prefiero mil veces los dulces y la carne que comer esa cosa verde.

—Con razón te ves más gordo —añadió Bills.

—¡Yo no estoy gordo! Soy atractivo.

¿Dónde veía la belleza en ese gato seboso? Era todo lo contrario a su hermano que le gustaba comer, pero al mismo tiempo mantener su figura. ___ pensó que tal vez haya una Kauneus destinada a estar con algún dios. ¿Te imaginas? No se imaginaba a ellos cuidar de unos bebés. No tendrían la paciencia suficiente porque eran seres destructivos. Bueno, las apariencias podían engañar debido a que, en el caso de Bills, a veces se encargaba de la hija de Vegeta cuando Bulma se lo pedía.

Ya la pobre ___ se estaba imaginando sus futuros hijos con los chicos. La cuestión era si era posible tenerlos con los Namekianos porque ellos mismos dijeron que eran asexuales. ¿Y cómo se reproducían entre ellos? Una vez se lo contaron, pero lo olvidó completamente. Aunque era cierto que sería muy complicado.

Obsesión alienígena (Dragon Ball x Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora