Amores Fantasmas

Capítulo 15- La cena

Mini-Maratón 2/2

Se acerca a nosotros despacio y dirige su mirada a mí, yo me quedo de piedra y no sé por qué.

-Siento llegar sin aviso, pero vi el video que publicaste y vengo a hacerles una sola pregunta- su voz no es como siempre, pues esta se ha hecho fría.

Daniel y yo compartimos una mirada y después nos volteamos a él.

-Bien ¿Qué pasa?- pregunta Daniel.

-¿Son pareja?- nosotros nos quedamos quietos y con los ojos bien abiertos, compartimos una mirada y la regresamos a Gabriel, que sigue con su expresión más gélida que nunca.

-¡No!- soltamos al mismo tiempo y por un momento veo por unos segundos el alivio pasar por los ojos de Gabriel.

-Me gustan los hombres, pero por Cam me volvería hetero- dice Daniel con una gran sonrisa plantada en su rostro. Gabriel se sonroja ¡oh por Dios, acaba de sonrojarse! Y veo que suelta una maldición por lo bajo, por mi parte suelto una carcajada.

-Lo siento, pensé que eran novios. Los miraba tan apegados – dice y no se molesta en ocultar su vergüenza.

-Todos creen eso- Daniel suspira dramáticamente.

Después de tal escena vergonzosa Gabriel se va.

-Te dije que es celoso.

-No, solo estaba confundido.

-Si, claro y yo soy Megan Fox.

-Quisieras.

-Imagínate, entonces no serias mi mejor amiga, así que agradece que no lo sea, porque- se corta así mismo, porque su móvil empieza a sonar.

-Hola – dice con nerviosismo- Claro, ahí estaré. Bien. No te preocupes. Nos vemos.

-¿Pasa algo?

-Thomas acaba de llamar- traga grueso- dice que quiere hablar conmigo.

-Joder ¿Sera por lo de los videos?

-Creo que sí. Bueno...pues tengo que irme.

Empieza a cambiarse, cosa que también hago. Hasta que se tiene que ir.

-Te deseo suerte, princeso- digo antes de que las puertas del elevador se cierren.

Este será un día muy largo. Después de ducharme y ponerme la pijama decido llamar a Marcel, pues hace días no hablamos y tampoco he tenido la oportunidad de preguntarle lo que ha pasado el otro día, donde estaba hablando con Gabriel.

-Hola, Cami- contesta al segundo timbre- ¿Cómo has estado?

-Bien ¿y tú?

-Super aburrida.

-¿Qué dices si te paso a traer y vamos a comer o a tomar algo?

-Bien, solo me cambio, que ando en pijama.

-Está bien, nos vemos- cuelgo.

Subo a mi habitación y empiezo a vestirme, me pongo unos jeans algo ajustados, una playera negra, una gabardina negra y unas botas trenzadas, preparo mi bolso y voy al sótano en busca de mi auto.

Voy caminando tranquila, cuando de repente siento una mirada sobre mí, volteo en busca de alguien, pero se me dificulta ver ya que la iluminación del lugar es baja. Empiezo a caminar más rápido, pero esa sensación no se quita, rápidamente subo al auto, pero la sensación sigue ahí y por ningún motivo se va, arranco y lo pongo en marcha.