Capítulo 1- La primera conversación

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A lo lejos escucho un ruido muy molesto y obligo a mis ojos abrirse, cuando por fin lo logro veo que es mi celular con una llamada entrante, quien se digna a llamarme en la madrugada y ¡oh sorpresa! Me he quedado dormida en el desayunador de mi cocina con el portátil enfrente y miles de documentos regados alrededor de ella, busco mi celular hasta que lo encuentro bajo la silla, contesto sin ver de quien se trata.

- ¿hola? - contesto con la voz somnolienta.

- ¿Dónde estás Camille? Son las 7 de la mañana y tu ni siquiera das señales de vida, el doctor Mirez me ha preguntado 4 veces por ti- se trata de mi mejor amiga Marcel- le he inventado que te quedaste en casa de tus padres y le he dicho que queda demasiado lejos- abro los ojos como platos y despego el celular de mi oído ¡vaya! El mundo me odia este día, son las 7:45 am y entro a trabajar a las 7:00 am.

-Gracias por avisarme, llego en 10 minutos- le digo rápidamente y cuelgo.

Me levanto rápidamente y voy hacia mi habitación, me visto con un vestido negro ajustado, me calzo unos tacones negros y me maquillo un poco para que no se vea que casi no he dormido, desventajas de ser médico cirujano, cepillo mi cabello negro azabache que combina muy bien con mis ojos castaños y mi tez morena clara, busco mi bolso negro, llevo todo lo que necesitare, tomo las llaves de mi auto y bajo al estacionamiento, estando allí veo mi Mercedes Benz blanco y finalmente me subo y pongo en marcha el auto.

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Me parqueo en el sótano del hospital, bajo rápidamente tomando mis cosas, presiono el botón del elevador y este rápidamente abre sus puertas, entro y presiono el séptimo piso, cuando por fin llego corro a mi oficina y rebusco la tarjeta en mi bolso y cuando por fin la encuentro veo que la puerta de mi oficina ya ha sido abierta dejando a la vista al doctor Mirez, mi jefe de 45 años y solo me queda esperar un regaño de su parte.

-Buenos días doctor Mirez- digo regalándole una de mis mejores sonrisas.

-Buenos días Camille ¿Cómo están tus padres? - me pregunta con un gesto serio.

-Bien, le mandan saludos- miento y mentir es algo que me va bien a mí.

-Dígale que gracias y empiece rápido su hora laboral por que ya hay muchos pacientes que atender- dice y se da la vuelta desapareciendo por el pasillo sin esperar por una respuesta de parte mía.

Sin más empiezo a dejar mis cosas en el escritorio, voy por mi bata y recojo los documentos que necesitare de mis pacientes, salgo de mi oficina con dirección a las habitaciones de mis pacientes, le hago un chequeo a cada uno de mis pacientes y veo que los demás estén bien, me gusta ser medico porque me gusta ayudar a las personas y sé que todos merecen buena atención como pacientes así que me gusta ver si los demás están bien aunque no sean mis pacientes.

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La hora del almuerzo llego y bajo a la cafetería del hospital a comprar algo de comida, haciendo fila veo una cabellera negra, se trata de Marcel.

-Hola mar- le digo dándole un beso en la mejilla.

- ¿Cómo va tu día cami? - dice separándose de mí.

-Super cargado de trabajo, ni te imaginas-digo mientras avanzo la fila, Marcel no es doctora aun ella es enfermera pero nos toca el almuerzo juntas.

-Me imagino- dice haciendo su cabello negro hacia un lado, Marcel es de color con ojos café oscuros y siempre se ve bien aun si esta desarreglada algo que envidio de ella.

Me acerco a la cajera y le pido una bandeja de sushi de Salmon, mi favorito, con un té blanco, pago lo que voy a consumir y me despido de Marcel para subir a mi oficina a disfrutar de mi almuerzo.

Cunado termino de almorzar regreso al trabajo de siempre pero sé que ya se acabara mi turno y así podre irme a casa a mis clases de portugués y darme una buena ducha, el trabajo de hoy es un poco menos cansado así que sigo con mi día laboral.

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Cuando por fin termino de trabajar exactamente a las 7:15 pm, recojo mis cosas de la oficina y me voy hasta el sótano para buscar mi auto, cuando lo encuentro me subo y lo pongo en marcha.

Pongo mi banda favorita para cantar mientras manejo es algo que amo hacer, mi banda favorita la escucho desde los 13 años y sigo amándola, Coldplay es una banda que me hace sentir de una forma extraordinaria, mis pensamientos se esfuman cuando me entra una llamada, se trata de mi madre, Alessia Leblanc.

-Hola - le digo tan solo descuelgo.

-Hola cariño- me dice con la dulzura que la caracteriza a ella.

- ¿Cómo están allá? - le digo mientras espero que el semáforo cambie a verde.

-Como siempre, Antoine sigue necio que quiere casarse con esa mujer y yo esperando que tu padre firme el divorcio- dice y cada vez que recuerdo lo del divorcio se me parte el corazón porque mis padres eran de los que se amaban tanto que algún día empalagan con tanto amor que se tenían, aunque me dañaran en el camino, pero todo cambio por mi padre, el engaño a mamá.

-Entiendo- digo con los ojos cristalizados, mientras avanzo.

-Lo siento, por recordarte lo del divorcio, eso es algo entre tu padre y yo- dice con tristeza en su voz.

-No madre, sabes que puedes contar conmigo en lo que sea- digo limpiando la lagrima rebelde que se ha escapado de mis ojos.

Seguimos hablando hasta que llego a mi edificio y me despido de ella, subo hasta el último piso, donde vivo es un pent-house que en ocasiones lo siento demasiado solo, la señorita de la limpieza ya se ha ido dejando todo limpio y ordenado a su paso, preparo mi cena que solo es arroz blanco, pollo a la parrilla y ensalada, termino de cenar y lavo mis platos.

Subo a darme una larga y relajante ducha, me visto con unos shorts negros y una playera a juego, seco mi cabello y me hago un moño, bajo y preparo todo para mi clase de portugués y si, es en línea.

Al entrar a la sala en línea saludo a todos, todos tienen su cámara encendida y ahí es cuando lo veo a él, sus ojos verdes y su cabello negro le quedan de maravilla con su tez blanca, Gabriel es un chico muy apuesto.

La clase pasa y yo solo lo veo a él aunque no se dé cuenta y dudo que sepa de mi existencia.

-La tarea será en pareja así que yo las hare-dice el profesor y empieza a nombrar a las parejas hasta que escucho mi nombre.

-Señorita Camille con el joven Gabriel- dice y mi corazón se acelera al pensar que tendré que hablar con Gabriel, los nervios empiezan a hacerse presentes y eso que ni siquiera estamos en persona, voy al chat de la sala y el escribo en privado.

-Hola, soy Camille y este es mi número para contactarnos y hacer el trabajo que ha dejado el profesor *******-

Camille Leblanc.

-ok, este es el mío *******-

Gabriel Miller.

Guardo su número y salgo de la sala de clases así que con una estúpida sonrisa me voy a dormir, mañana empezaremos el trabajo y por fin tengo una excusa para hablarle.

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¡Hola! hoy les traigo el primer capitulo del libro, espero que les haya gustado, es un capitulo corto ya que solo se presentan a los personajes principales.

Publicare un capitulo cada dos días o un poco mas depende de cuanto tiempo tenga disponible.

¡Gracias por darle una oportunidad a mi libro!

-Yanely C.

Amores FantasmasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora