SOLO UNA VEZ- hyunho

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Al salir del hospital cuando estaban dirigiéndose Hyunjin no podía dejar de pensar en que involucró en esta nube de sufrimiento a Minho, no quería hacer sufrir a nadie más y menos al castaño.

El pelinegro no le dirigió la palabra a Minho más que monosílabos y el castaño sabía que algo malo pasaba pero él creía que era porque lo qué pasó en el hospital debió de haber sido algo muy difícil para Hyunjin, así que decidió animarlo.

—Tengamos la cita hoy en la noche—Mientras el castaño esperaba en el hospital a Hyunjin su mente dio con la idea perfecta para la cita que le prometió al pelinegro.

—Hoy?—Hyunjin no quería salir con Minho, quería alejarlo de una vez por todas, aún estaba a tiempo de que no viviera su muerte.

—Si, solo tengo que arreglar unas cosas—Minho estaba más emocionado por la cita que Hyunjin.

—No lo se, no sé si sea buena idea hacer esto

—Si ya no quieres mi ayuda puedes decirlo, lo entenderé—El pelinegro volteo a ver al castaño, este lo miraba con tanta atención que no pudo evitar pensar que le encantaría estar con él, vivir su primera cita, el primer encuentro sin que su vida estuviera por terminar.

'Solo hoy, solo hoy viviré esta cita y después lo dejaré, tengo derecho a vivir esto solo una vez. Me lo debe la vida' pensó Hyunjin.

—Está bien, iré a donde quieras que vaya

—Genial—Minho dio un pequeño brinco de emoción en su interior. —Ahora a donde te llevo?

—Déjame en la universidad, ahí está mi auto

Minho condució hasta el campus para dejar a Hyunjin.

—Bien, gracias por no dejarme solo—Dijo el menor mientras el castaño le abría la puerta del coche para que bajara.

—No hay de que

Cuando el pelinegro bajo de este, el castaño de igual manera le brindó su mano para que se apoyara.

—En donde te veo, p-para la cita?—El menor aún se sentía un poco avergonzado ya que está iba a ser su primera cita, aunque fuera falsa.

—Aquí, te veré aquí en la entrada de la universidad a las 8:30

—Bien, supongo que nos vemos luego—Hyunjin subió a su auto y fue directo a su casa para arreglarse, en estos momento agradecía que sus padres regresaran hasta el otro día, así no harían tantas preguntas.

Mientras Minho corría como desesperado por toda la cuidada para comprar las cosas que necesitaba para que todo quede tal y como él lo imagina.
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Dieron las 8:30 en punto y Hyunjin llega en su auto a la entrada de la universidad, al ver que el auto de Minho estaba estacionado ahí pero él no se veía por ningún lado optó por mandar un mensaje de texto.

~Ya estoy aquí, tú dónde estás~

Después de unos segundo el castaño contestó.

~Espérame ahí~

A los pocos segundos la puerta de la universidad se abrió y dejo ver a un Minho con una linterna. El castaño se acercó a Hyunjin con una sonrisa y lo tomó de la muñeca.

—Sígueme—Hyunjin se dejó guiar por el mayor.

—Como conseguiste entrar?—Pregunto el pelinegro.

—Recuerdas a Rose, la de la dirección, ella me ayudo—Minho caminaba con una sonrisa en el rostro, orgulloso por haber conseguido que le prestara las llaves después de rogarle mucho a la chica.

Hyunjin se limitó a asentir y seguir caminando. Hasta que llegaron a las mesas del campus, donde el menor siempre admiraba la vista de los árboles y se percató que en una de las mesas había velas, rosas y platos con una cena ya lista.

Todo se veía tan lindo y perfecto, desde la mesa y la cena, hasta el paisaje de la noche con las sombras de los árboles.

—Esto es hermoso Minho, Como se te ocurrió?

—Pues recordé que cuando te enseñe el campus te quedaste pasmado al ver la vista de aquí y recuerdo haberte visto varias veces aquí mirando hacia el cielo—Claro que Minho recordaba esos detalles, más porque la imagen de como al pelinegro se le iluminaron los ojos al ver ese lugar se quedó pasmada en su mente.

Y ahora también se quedaría guardado en su mente la imagen de este mismo instante, Hyunjin con las mejillas sonrojadas y en sus ojos centelleantes reflejadas las estrellas.