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Minho tenía algo entre las manos, era una sorpresa para Hyunjin, le había pedido ayuda a sus únicos dos amigos Seungmin y Jisung.

El castaño tenía decidido pedirle al menor ser su novio.

Él se encontraba en la sala de espera del hospital ya que aún no comenzaba la hora de visitas.

Su teléfono comenzó a sonar.

—Ya tienes todo Seungmin?

—Si, solo que no creo que pueda llevar todo en el metro

—Pues pide un taxi

—Ya no me queda dinero

—Agh, está bien, mándame la dirección voy por ti

—Ya te la mande

—Y Jisung?

—Está aquí conmigo—Se pudo oír un "hola" lejano.

—Llego en 5 minutos

Al colgar el teléfono se dio cuenta que aún faltaba una hora para que comenzaran las visitas, así que con pesar se levantó de su asiento para ir a buscar a sus amigos.

Cuando llegó a la dirección que sus amigos le mandaron vio a "dos idiotas" con un par de cajas sentados en la banqueta.

—Pero no son tantas cosas, se podían haber ido en metro

Jisung trato de abrir el coche para entrar , pero este seguía teniendo los seguros.

—Vamos Minho, corrimos por toda la ciudad para conseguirte las cosas, estamos cansados—dijo Seungmin.

—Está bien, solo porque me caen medianamente bien, porque si no les juro que los dejaba varados aquí—Minho por fin quito los seguros permitiéndoles abrir.

—Cállate Minho, nos amas demasiado—Ambos amigos subieron las cosas a la cajuela y entraron en el auto.

—Como pasáremos al hospital con todo esto?—Pregunto Jisung.

—El padre de Hyunjin me ayudara a distraer a las enfermeras

—Ya no te da miedo?—Cuestiono con burla Seungmin.

—El nunca me dio miedo—Los dos amigos del castaño estallaron en risas ante lo que dijo el mayor.

La verdad es que si le había tenido miedo al señor Hwang, pero estos últimos meses su relación se había fortalecido y lo cierto era que el señor Hwang había ayudado mucho a Minho en asimilar toda la situación.

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Tal como lo tenían planeado, el padre del pelinegro distrajo a las enfermeras para que ellos pudieran subir las cosas al techo del hospital, ya que en este lugar se llevaría a cabo el plan de Minho.

—Seungmin, pon las luces, Jisung pon las mantas, yo comenzaré a acomodar la comida

Así los tres se pusieron manos a la obra para hacer la sorpresa de Hyunjin.

Por el otro lado el menor se encontraba triste en su habitación, se le hacía muy extraño que el castaño aún no apareciera por su cuarto.

La hora de visitas había iniciado hace ya más de una hora y Minho siempre era el primero en llegar a visitarlo, pero justo ahora no había señales del mayor y eso en parte preocupaba al pelinegro.

Alguien tocó a la puerta de Hynjin, este se asustó ante el repentino sonido pero contestó un rápido 'pase' con la esperanza de que fuera el castaño.

SOLO UNA VEZ- hyunho Donde viven las historias. Descúbrelo ahora