AMANTES (JK & TN )

7

Al verla allí en el suelo llorando se le partió el alma. Se agachó para estar a su lado.

—TN mírame —cogió su barbilla con su mano y vio sus ojos rojos y llenos de lágrimas —se acabó, vamos a acabar con todo ésto.

La cogió en brazos y ella echó su cabeza en su pecho. La tendió despacio en la cama con un dolor que le atravesó el alma. Se acostó con ella y le acariciaba el pelo despacio intentando calmarla.

—Vamos a divorciarnos, tenemos que acabar con todo ésto —le dijo mientras ella lloraba en silencio, estaban abrazados— estaremos juntos ya lo verás y nadie más te hará daño porque yo tendré el poder de protegerte.

—Jungkook no es tan fácil —pudo decir ella bajito y entre sollozos.

—Me da igual lo difícil que sea, estoy cansado de verte sufrir. Así que prepárate que lo vamos a hacer, ya no puedo soportarlo más —besó su frente— en dos días lo haremos cariño.

Bajó sus labios a los de ella y los besó. Su sabor era salado por las lágrimas derramadas. Ella pasó sus manos por el cuello de Jungkook y lo apretó a ella mientras su beso se hacía más fuerte. Querían amarse de nuevo, nunca tenían suficiente porque cada día se deseaban más.

Volvieron a ser uno solo, se acariciaron lentamente. Los gemidos volvieron y el placer los unió una vez más.

Se fueron a sus hogares para prepararlo todo. Tenían que hablar con sus respectivos cónyuges.

TN entró en casa por la tarde y Taehyung estaba en el salón sentado en un sillón tomando una copa de coñac.

—Hola —le dijo ella seria.

—Vaya, hasta que vuelves —hizo él una mueca desagradable— ¿Mi suegro seguro que te habló?

Ella lo miró mal y decidió irse a su cuarto sin contestarle para no discutir, pero Taehyung se levantó deprisa y corrió hacia ella. La cogió de la muñeca con fuerza.

¿Porqué te comportas así conmigo? —le espetó dolido.

—¡Tae suelta! ¿No me harás daño ahora después de tanto tiempo,no? —lo miró a los ojos con miedo y tristeza.

—¿Cómo puedes decir eso de mí TN?...yo siempre te he querido y nunca te hice daño —arrugó su frente —yo te quiero.

Esa confesión fue la primera que escuchó TN por su parte, te quiero no eran unas palabras usadas por su esposo.

Era hora de decirle, había quedado con Jungkook que él lo haría primero con su esposa y que luego iría él mismo a contarle a Taehyung. Pero no pudo aguantar la espera. Lo haría ella sola.

—Tae tengo que hablar contigo —vio la oportunidad de poder contarle todo —hace poco he conocido... —el móvil de su marido sonó y él lo cogió para contestar. Soltó la mano de TN y se separó levemente de ella.

—¿Cómo? Eso no puede ser —habló al teléfono un poco serio —los documentos estaban en la carpeta de color verde.

Ella estaba allí parada sin moverse. Estaba deseando que terminara de hablar para decirle que iba a dejar su matrimonio a un lado y que había conocido a alguien, que se iría de una vez por todas.

Taehyung colgó y la miró de nuevo. Se acercó a ella.

—Tengo que hacer algo con urgencia pero tenemos que hablar cuando vuelva —lo vio separarse de ella y lo cogió de la mano para que no se fuera

—Porfavor tenemos que hablar ahora...tengo que decirte algo importante —no podía dejarlo ir sin contarle todo, se sentía valiente porque Jungkook le había dado seguridad para que lo hiciera con su conducta valiente con ella.

—No puedo ahora TN hay algo importante que tengo que hacer —se acercó a ella— perdona si me porté mal anoche —besó su mejilla y salió fuera.

Ese era Taehyung alguien que no sabías por donde te saldría.

Ella suspiró. En cuanto volviera fuese la hora que fuese tenía que hablar con él y terminar con todo. No podía demorarlo más.

Se fue a su habitación y decidió llamar a Hanna. Era su mejor amiga y le había ocultado todo. Cuando se enterara tal vez se enfadaria con ella pero es que no había tenido lugar de decirle antes. Todo había sido tan precipitado.

Le contó todo y Hanna le dijo que nunca la abandonaría. Que estaría con ella por siempre y es que no podía esperar menos de ella.

Se tendió en la cama y se quedó dormida. Pasaron unas horas y despertó desconcertada. Encendió la luz de la habitación y miró la hora, vio que era muy tarde y Taehyung aún no había regresado. Encendió la televisión de su dormitorio para distraerse un poco y esperar a su marido.

Estaban las noticias del día.

El gran empresario Jeon Jungkook tuvo un accidente automovilístico en el día de hoy...

Se levantó de golpe de la cama y se acercó al televisor, le dió volumen respirando agitado y con dolor en el estómago y en el pecho, estaba asustada.

En la nacional 304 cerca del parque nacional tuvo lugar el siniestro...un camión lo embistió y el coche ha quedado destrozado...

Destrozado estaba su corazón en estos momentos.

No podía escuchar nada más, le faltaba el aire y se sentía mareada. Se cogió al mueble que tenía a su lado y creyó que iba a desmayarse. ¿Que haría ahora?

Intentó calmarse para seguir escuchando. Que no haya muerto...pensaba una y otra vez. Sus piernas temblaban. Que no haya muerto por favor...

Lo han trasladado al hospital del Norte se debate entre la vida y la muerte...

Estaba vivo, aún lo estaba. La esperanza es lo último que se pierde.

Cogió rápidamente un chándal, unos deportes y un abrigo de su armario, se los puso sin saber cómo pudo hacerlo ya que temblaba todo en ella. Salió de la casa y cogió un taxi.

Las lágrimas salían y tuvo que abrir la ventanilla para que el aire exterior contrarestara las ganas de vomitar que sentía.

Al llegar al hospital corrió por los pasillos en busca de urgencias, allí lo habrían llevado. Cuando pudo llegar hasta allí paró en seco. Vio a alguna gente llorar y se escondió detrás de una columna. ¿TN estás loca? Quién dirás qué eres? No eres nadie...a ojos de su familia no eres nadie. Así estaban sus pensamientos, le dolía tanto no poder correr hacia él y decirle que lo quería, que no pasaría nada, que no tuviera miedo, que ella estaba allí a su lado. Pero no pudo hacerlo así que se sentó en el suelo y con su espalda echada en la columna tapó su rostro y lloró.