LA CASTAÑEDA [TAELICE] [COMPLETA]

CUARENTA Y UNO

Taehyung y Namjoon seguían de cerca al castaño, caminaron a una distancia prudente, además Nam había conseguido hacer una loción hace unos meses que ocultaba su olor, eso ayudó a los dos alfas a seguir a JungKook sin ser detectados.

Cuando JungKook entró a la manada un par de lobos negros custodiaban la entrada, los olores en el ambiente eran variados, Pino, madera y tierra mojada eran los más fuertes además de cítricos y florales.

-Namjoon, creo que esto es peligroso, si alguien nos descubre, podrían mal interpretar todo... -Taehyung analizaba toda la situación si su teoría era cierta y los humanos podían mutar a lobos, estaban en peligro, ellos no habían nunca intentado transformarse pero parecía que los lobos que estaban ahí ya tenían experiencia

-Espera un poco, quizá veamos a Jisoo o Lisa... -Y era verdad lo que más quería Namjoon era poder ver otra vez a Jisoo y claro Taehyung moria por arreglar las cosas con su omega

Yoongi seguía escondido en los arbustos esperando que anocheciese un poco más, pra poder acercarse a la cabaña donde suponía estaba Roseanne.

Después de unas horas, Yoongi empezó a avanzar a la cabaña, esta vez pensó que lo más normal del mundo era tocar a la puerta, así no causaría malos entendidos...

-¿Y que debería decir...? Hola de casualidad tienen cautiva a Rosé? -Pensó Yoongi, sin embargo olvidaba que alguien más vivía en su interior

-¡No seas idiota! -Solto una voz ronca, el alfa de Yoongi no tenía pelos en la lengua, siempre decía las cosas sin una pizca de delicadeza -Es mejor entrar por la puerta de atrás, una vez dentro sigue su olor...

No muy convencido de lo que su alfa le decía, Yoongi decidió hacer lo que le dijo, se dirigió a la puerta trasera, con mucho cuidado entró a la cocina, no había nadie por ningún lado, camino unos paso y observó el lugar, era acogedor, no había rastro de nadie, el olor a rosas y leve lavanda llegó a sus fosas nasales cuando salió de la cocina

Camino muy despacio hasta llegar a la puerta blanca del fondo, pegó su oreja a ella y aspiró más el aroma a rosas...

-¿Rosé? -Susurró y tomó la manija, por fortuna y como si el destino lo estuviera esperando, la puerta no tenía seguro, suspiro una vez más antes de adentrarse a la habitación

Una pelirrubia abrió sus ojitos en grande al ver frente a ella a un pálido con olor a café y menta, salto de la cama y se colgó del cuello del castaño.

-¡Estás aquí! -besaba su carita -¡No me dejaste! ¡Yoon... te extrañe tanto!- Rosé no dejaba de besar al pálido

Él estaba nervioso, pues recordó la horrible cicatriz que tenía en su ojo, quizá la pelirrubia o su omega lo rechazarían

-¡Rosie, Yo también te he extraño mucho! Perdóname por no venir antes! .... -Yoongi se separó lentamente del cuerpo de la rubia para por fin verla a los ojos

-Yoon~ -Rosé conectó sus ojitos a los ojos gatunos del pálido, sorpresa y dolor fue lo que sintió al ver la cicatriz que atravesaba su ojo.

-¡Lo siento tanto Yoongi! ... te arriesgaste tanto por mi y mis unnies- los ojitos de Rosé se cristalizaron

-¿No... no te causo repulsión? -Preguntó Yoongi limpiando las mejillas de Rosé con sus pulgares

-¡Claro que no! -Rosé tomó con sus dos manos las manos de Yoongi que aún permanecían en sus mejillas - ¡Yo te amo! Y no podría estar sin ti, sentí tu dolor y lamento que ese lobo te haya atacado por salvarnos

El pálido estaba feliz, su Rosé no lo había rechazado, al contrario sentía aún más amor que nunca, podía sentir a ese pulgoso en su interior brincara y correr de un lado a otro, junto sus labios con los de Rosé y en un delicado beso se dijeron cuanto se amaban