Después de la muerte. (Adaptación Brittana)

Capítulo Veinticuatro.

Desperté tal y como la primera vez, en un coche ubicado en un callejón casi obscuro, llevaba jeans negros y una sudadera gris, parecía como si me acabasen de secuestrar. A mi lado estaba Mar dormida, y lo más gracioso era que su ropa era totalmente igual a la mía.

-Hey Mar -la sacudí por el hombro ganándome un gruñido por parte de ella- Despierta, estamos aquí.

-5 minutos más, mamá -contestó adormilada, cambiando de posición,

-Soy Santana, despierta -intente de nuevo, logrando que abriera sus ojos poco a poco, sonriéndome en cuanto me vio.

-Oh, hola -los rayos del sol le alumbraron el rostro haciendo que se viera totalmente adorable- ¿qué hora es?

-9;30 -le conteste mirando el monitor del coche- ¿por qué?

-Tenemos que irnos, tienes clase a las 11 -se incorporó en su asiento abrochándose el cinturón.

-¿Clase? ¿Clase de que?

-Tienes que ir a la escuela, Santana, tu primera clase empieza a las 11.

-¿Y qué hay de mis padres? ¿No puedo verlos esta vez? ¿Dónde voy a vivir? -le pregunte con gran confusión por qué no me habían explicada nada de lo que tendría que hacer.

-Me caías mejor como Lawrence, hacías menos preguntas -Ally negaba con la cabeza- Para tus padres no existes, no tienes padres ahora.

-¿Y no puedo ir a vivir con ellos? -volví a preguntar y ella rodo los ojos.

-No, no están rentando ningún cuarto por qué tú nunca llegaste a sus vidas, solo puedes ver a Jake y a Bree, van en la misma escuela que tú, puedes hacerlos tus amigos.

-¿Cómo voy a ir a la escuela si no tengo nada?

-Por eso debemos darnos prisa, tenemos que comprar todo ahora mismo -Marley me explicaba mientras me enseñaba una tarjeta de crédito.

-¿Y Brittany? ¿Podré verla?

-Por supuesto, ella estará allá, al igual que Quinn y todos.

No hizo falta que Mar dijera otra cosa, con eso me convenció de darme prisa, arranque el coche y nos dirigimos al centro comercial, compramos todo lo que iba a necesitar de nuevo, ropa, útiles, una mochila, incluso un teléfono celular ya que el que tenía cuando era Santiago me lo habían quitado.

También compramos varias cosas para Mar, ya que íbamos a estar juntas la mayoría del tiempo, aunque aún no sabíamos dónde íbamos a dormir, lo más probable es que pagáramos por una habitación de hotel o algo así.

Después de casi una hora y media de compras, íbamos directo a la escuela. Mentiría si decía que no estaba preocupada, por qué era obvio que lo estaba. Vería a Brittany de nuevo, aunque ella no iba a saber nada de mi, haría lo posible para recuperarla, tenía que hacerlo.

Nunca supe que fue de ella cuando me fui siendo Santiago, si se habrá preguntado qué pasó conmigo, o que me fui sin despedirme de ella, cosas así, todo se sentía como un universo alterno.

Bajamos del coche en cuanto llegamos a la escuela, Ken se había ocupado de encontrarme un lugar ahí desde días antes, así que ya era estudiante oficial del Mckinley High.

La primera clase que decía mi horario, era Quimica y si Marley no estaba equivocada, Brittany estaría ahí.

-De acuerdo chicos, quiero presentarles a sus nuevas compañera, Santana López y Marley Rose -aquel profesor me hizo una introducción frente todo el grupo, algunos chicos nos chiflaban como si fuéramos unos perros, pero no le dimos importancia, lo único que pudieron ver mis ojos fue a Brittany sentada ahí, totalmente ajena a la situación, concentrada en su celular, creo que ni siquiera noto el momento en el que fuimos a sentarnos hasta el ultimo lugar del salón. Quinn estaba dormida a un lado de nuestro lugar junto con otro chico que no conocía y Rachel estaba hasta el frente- Alguien puede pasarles los trabajos que llevamos hasta ahora, ¿de acuerdo? Sientanse bienvenidas -ambas asentimos sentándonos en nuestros lugares.