Después de la muerte. (Adaptación Brittana)

Capítulo Veintiocho.

-Por favor Sanny, deja de llorar -me consolaba Mar dándome sobadas en la espalda, y la verdad es que llevaba desde ayer llorando.

-¿Cómo quieres que deje de hacerlo? Mi padre está muerto! -y me eche a llorar de nuevo, la cabeza me estaba matando de dolor.

-Ken te advirtió que estas cosas podían pasar.

-¿Si no hubiese aceptado a venir a esta nueva vida mi padre seguiría con vida? -le pregunte y ella se quedó un largo rato callada con la mirada baja- ¿Hubiese muerto de cualquier manera? -volví a preguntar y ella asintió sin mirarme.

-No puedes evitar a la muerte, Santana.

-Esto es una mierda...necesito saber como está mamá y Jake -me levante de la cama donde estábamos sentadas y tome mi bolso directo a ir hasta la casa de mis padres pero Mar rápidamente me detuvo.

-¿Estás loca? Tu padre murió hace años, no puedes aparecerte así como así -me tomo de los hombros y me volvió a sentar

-¿Puedo preguntarte algo, Mar?

-Lo que tú quieras -me sonrió débilmente.

-¿De qué murió?

-Diabetes -contestó rápidamente. Todo tenía sentido.

FlashBack

-¿Sabes lo mal que le hace a tu cuerpo comer tanto tocino de esa manera? -le pregunte a mi padre, era la hora del desayuno y él ya había empezado mal el día.

-Todas esas cosas son un mito hija, el tocino es tan bueno para el cuerpo así como un gran trozo de lechuga -dijo y siguió comiendo, solo me dedique a mirar a mi mamá, que no hacía nada para detenerlo.

-Ya no tienes 5 años papá, deberías cuidar lo que comes, desde ahora, yo te haré tu propio desayuno, todos los días a partir de ahora -dije decidida sonriendo al ver que mi papá no ponía resistencia alguna.

-¿segura? -me preguntó y yo asentí entusiasmada- Entonces está bien, lo haré solo por ti, Sanny.

Fin del Flashback

-Esto es una mierda -fue lo único que dije mientras secaba mis ojos con la palma de mi mano- Vamos, tenemos que irnos.

-¿Qué? ¿A dónde? -me preguntó Mar sin entender.

-Vamos a lo de Quinn, quiere comprar ropa para la fiesta de mañana -me retoque el maquillaje frente al espejo y no parecía que había estado llorando desde ayer.

-¿Segura que quieres salir? Aún te veo un poco afectada -Mar me miraba con preocupación.

-Tu lo dijiste, nadie puede evitar a la muerte, tengo que aceptar que él está muerto, se ha ido, empiezo a entender a las personas que no duran ni dos dias aquí, es bastante doloroso -tome mi bolso y las llaves de el coche- ¿vamos?

-Vamos.

-

Brittany POV

-¿Qué más nos falta? -les preguntaba a las chicas, íbamos caminando por el centro comercial comprando las cosas necesarias para la fiesta de mañana, casi la más importante del año.

-Un poco más de alcohol -contestó Lauren- y que nos cuentes que te traes con la nueva, López.

-Un pajarito me dijo que irá mañana a la fiesta.

-Obviamente, ustedes me hicieron invitarla -voltee los ojos irritada.

-Como si te costará mucho trabajo -dijo Mercedes mientras me golpeaba con el hombro.

-De echo, también invite a sus amigas... -agache la mirada esperando la peor de las reacciones.

-¿Estás bromeando? ¿Invitaste a Quinn y a la cerebrito que se sienta siempre al frente en todas las clases? -me preguntó Jane y asenti tímidamente- No te lo creo.

-Santana me hizo invitarlas.

-¿Y por qué aceptaste? -preguntó Mercedes de nuevo.

-Es mi fiesta, puedo invitar a quien quiera -me encogí de hombros mientras seguíamos caminado con las bolsas en la mano.

-Sé nota a kilómetros que la tal Santana te atrae, pero quiero que recuerdes que tienes novia, la cual llega mañana.

-¿Y eso que? -conteste enojada, yo podía hacer lo que quisiera, era Brittany Pierce.

-Solo te estoy recordando, cálmate -dijo Lauren haciendo reír a todas, menos a mi.

-Hablando del rey de Roma... -empezaba diciendo Jane- ¿No es esa Santana la que va allá? -apuntó con el dedo a una tienda de ropa, no más de unos 20 metros de nosotras.

Y si, era Santana, se veía bastante bien, aunque siempre lo hacía, pero siempre me preguntaba por qué a cada lado al que iba siempre tenía que estar con la chica pequeña, Mar creo que era su nombre.

-Deberías acercarte -me empujó Mercedes levemente- Vamos, no pierdes nada.

Me acerqué a Santana y a sus amigas con un poco de inseguridad, pero sin mostrarla obviamente.

-Hey Santana -llame la atención de las tres chicas que voltearon a ver me sorprendidas- ¿Cómo están?

-Brittany, hola -me saludo Santana con un beso en la mejilla, y lo más raro es que el contacto me parecía tan familiar, era tan extraño- Estamos bien, buscando un vestido para Quinn.

-Oh, la sección de tallas extras está del otro lado -dije riendo tratando de hacer una broma, pero por la cara de las 3 chicas, parecía que mi broma fallo- Hmm, era una broma, yo...

-Ni te molestes Brittany, tenemos que irnos... -La tal Mar se llevó a Quinn y Santana de la mano sin darme tiempo de disculparme por ser tan idiota.

-Santana, espera... -trate de llamar su atención una vez más pero no volteo.

Lo último que pude ver fue a las tres perdiéndose entre tanta gente, eres tan idiota Camila.

-Hey, ¿qué pasó? -llegaban mis amigas viendo como Quinn, Mar y Santana se iban.

-Dije algo estupido sobre Quinn y las 3 se fueron -conteste sin ánimos.

-Eres una idiota -decía Mercedes riendo junto con las demás- puedes disculparte mañana.

-Y por cierto, te llego un mensaje -Jane me entrego mi celular con la bandeja de mensajes llena, procedí a leer el primero con la vista de todos en mi celular.

"¿Adivina que?

Mañana estaré ahí para tu fiesta! No me la perdería por nada mi amor, te extraño :("

-Elaine.

No, no ahora por favor.