Su cabeza no dolía.Ardía y pesaba como si le hubieran encadenado el cuello toda la noche.
Sus recuerdos eran vagos, solo sabía que había bebido hasta perder el conocimiento, cosa que muy pocas veces sucedía. Cerró los ojos con fuerza y pequeños momentos eróticos pasaron por su mente.
Un cuerpo más bajo besándolo como si fuera la última persona en el mundo, unas pequeñas manos toqueteando sus abdominales y su... miembro.
No podría describir con exactitud que tanto pudo durar junto a su amante de una noche, ya que su último recuerdo se trataba de el mismo rompiendo unas medias negras que cubrían unas esbeltas piernas gruesas, las cuales no poco después le dieron paso a saciar las ganas de un borracho.
En un intento de levantarse su pecho se frenó, pues ambas manos estaban encadenadas a los barrotes de una cama, lo único que lo cubría eran unos pantalones de vestir, su pecho estaba al descubierto mostrando unos rasguños que tendrían un buen tiempo allí, su cabello sudado y cuerpo adolorido le alertó que no había sido una simple borrachera.
Ni una sola ronda de sexo, al precer.
— Oh, despertaste.
Del baño salió un jóven de estatura mediana, cabello rubio apagado, un maquillaje algo corrido y una vestimenta digna para salir a una discoteca de lo más barata, todo eso acompañado de una sonrisa.
— Lástima que hayas dormido tanto, hubiéramos tenido una despedida más... correcta, la próxima será — se rió un poco mientras guardaba en su bolso un reloj de oro gitano que Jungkook se había comprado hacía unos años — Cuando nos veamos puedes comprarme unas nuevas? Anoche fuiste un salvaje — levantó un poco la pierna mostrando sus medias transparente algo maltratadas.
— Puedes usar el dinero de ese reloj, créeme que podrás comprar todas las que quieras.
— Que tierno, te lo agradezco.
Y aunque el rubio mantenía una sonrisa firme y tierna, sus ojos no paraban de inspeccionar la habitación, dándole a entender a Jungkook que era un robo bastante personal. En su vida se había topado con muchos ladrones que querían lo de el, pero emborracharlo para luego cansarlo sexualmente y robarle era sin dudas una técnica nueva.
— Bingo! — antes de poder hacer un movimiento el rubio había saltado a la cama para colocarse sobre su cintura con las piernas abiertas — Agente Jeon, le daré un consejo.
— No sé si quiero un jodido consejo de un ladrón, para serte sincero — Las palabras del pelinegro provocaron una risa del contrario, el cual mordía sutilmente su labio observando el cuerpo tan buen formado bajo suyo.
— que boca sucia, me hieres — puchereó fingiendo haber sido lastimado.
Jungkook tembló un poco cuando unas manos pequeñas se envolvieron en su cuello, el rubio había quitado su collar misterioso de una forma tan delicada que en mente maldijo haber sido tan lento.
— Los agentes adinerados como usted no necesitan de accesorios tan grandes para hacer notar su fortuna, por eso mismo ésto debe ser...
Tic.
El rubio había abierto con sus uñas el collar, en donde cayó un papel tan pequeño en el cual a penas podría leerse las letras.
— Suelta eso.
— O sino... que? Hm? — se rió abriendo el papelito — Gracias a usted no me matarán, le agradezco.
— Espera! Es estúpido que quieras solo eso!.
— Lo sé, el que me mandó sin dudas no sabe absolutamente nada de los millones que pudo haber sacado, pero bueno... solo hago lo que me piden.
Antes de poder pararse y salir lo antes posible de esa habitación, Jungkook tiró tan fuerte de los barrotes de la cama que éstos, al ser de madera, crujieron rompiéndose. El pelinegro no tardó en, aún con las manos esposadas, envolver la pequeña cintura del rubio hasta apresarlo contra su pecho desnudo.
— Pero qué...
— Escucha, niño, antes de que salgas de aquí con eso vas a... vas...
Jungkook rodó su cuerpo sobre el del contrario y maldijo ante las nauseas y vista nublosa que se apoderaron de el, sus manos mantenían al rubio y éste simplemente sonreía con sus manos sobre el pecho desnudo del hombre.
— Vaya... realmente no pensé que te levantarías, muy fuerte sin dudas.
El pelinegro agitó un poco su cabeza y maldijo cuando todo se nubló, al abrir los ojos medio segundo después volvió a sentir el colchón suave de la cama bajo su espalda y esas gruesas piernas rodeando su cintura nuevamente.
— Buen intento — se rió un poco y con una llave que estaba entre sus medias, le sacó las esposas — No creo que puedas moverte ahora.
Antes de reír e irse, sus ojos se detuvieron en las manos del pelinegro, las cuales estaban sobre sus muslos tratando de "retenerlo", pero sin fuerzas claramente.
En su dedo meñique el hombre llevaba un anillo de rodio, uno de los tipos de oro más exóticos que conocía, no era simple, llevaba una rosa tallada a la perfección... tan brilloso, tan llamativo, tan caro.
El rubio no dudó en sacárselo y rió un poco notando que le quedaba grande en el dedo meñique, pero a la perfección en su dedo anular. Miró al pelinegro y apretó sus mejillas mientras acercaba su rostro al suyo, observando los ojos cansados de éste.
— Lo dejo dormir, agente — murmuró con una media sonrisa y plantó un suave beso sobre sus labios – Gracias por el regalo — alzó su mano mostrando el lindo anillo en su anular — Es mi preferido ahora.
Se levantó rápidamente y prosiguió a buscar sus cosas mientras se colocaba unas gafas que eran también del pelinegro.
— Si no le molesta, pagaré con ésto — Alzó su mano mostrando la tarjeta que Jungkook había recibido hace poco — Es un hotel muy caro! Como sea, nos vemos~.
Jeon cerró con fuerza sus ojos y apuñó sus manos al sentir la puerta cerrarse junto a pasos divertidos y tarareos por parte del rubio.
— Maldito niño, sin dudas nos veremos.
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-Empezar novelas sin haber terminado la anterior is my passion.
ACLARACIONES.
🐰 Habrá situaciones de violencia y escenas subidas de tono (sexo).
🐥 Diferencia de edad notoria entre los personajes (tampoco 30 años, capaz menos ah).
🐰 Es mi primera vez narrando acción u.u.
🐥 Aparecerán otros ships *guiño guiño*.
🐰 Todo en éste fic es pura y exclusivamente ficción, escrito por mi y de mi mente, no acepto adaptaciones.
Pd: los pollitos y conejitos para que sea más tierno.
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AGENT JK || Kookmin
FanfikceJungkook es un agente de seguridad para casos extremos. Rodeado de personas que buscan destruirlo por haber metido a los mejores bajo rejas. y Jimin es... el que se encarga de que las personas malas sedientas de venganza obtengan lo que quieren.