-¿Estan todos?
- Si, están todos – se acerco - ¿Él estará?
- Si, nos ayudara un poco – le sonrio – Tú calma.
- Bien, solo te digo que si lo jode, la responsabilidad cae sobre ti.
Gustabo tenso la mandíbula y asintió.
Tiene razón, si Jack jode eso, es su culpa.
-¿Estas listo? – lo miro.
- No se que es lo que harán, pero supongo estoy listo.
- Vale – carraspeo y entraron en la habitacion – Hola chicos, se que todos queremos estar en las Bahamas pero el trabajo es trabajo y no se preocupen, él esta de nuestro lado – todos asintieron, no muy convencidos – Vale ¿Qué tienen?
- El perfil que nos diste es conciso, pero es muy pequeño. No me refiero a que sea un problema, sino me refiero a si el bebé lo soportara.
- Lara dijo que es seguro, pero tienes razón es una probabilidad en que su cuerpo no acepte dicho órgano. Una probabilidad que siempre hemos llevado cuando hacemos esto – suspiro – Nosotros conseguimos dicho órgano, pero no tenemos la seguridad de que su cuerpo lo acepte. Solo véanlo como un trabajo mas y si ese bebé acepta bien el corazón, será el puto trabajo de nuestra vida.
- Tiene razón – carraspeo – He contactado de mi lado, pero por mas enfermos que haya en la red oscura, no hay eso.
- Vale, yo hice unas llamadas, solo es cuestión de tiempo que alguien llame – dijo Gustabo – Aun asi, preparen la sala quiero que todo este listo para hacerlo rápido.
- Si señor.
Jack solo habia permanecido de pie, escuchando lo que decían, cuando la mayoría se habia retirado mientras que otros trataban de conseguir lo que necesitaban, se acerco a Gustabo.
-¿Esto es lo que haces?
- Si – sonrio Gustabo – Esto es el trabajo administrativo, aun no has visto lo mejor.
- Gustabo esto es...
- Un momento – dijo Gustabo respondiendo una llamada – Aquí James.
- James, tengo algo que estas buscando.
- Haber dime si es lo que busco.
- Tenemos un paquete con todo lo que ordenaste, tiene un corazón que late muy bien.
- ¿Qué defecto tiene?
- Estaba en un bote de basura y aunque ha estado en la lista para ser adoptado nadie lo quiere, termino en el mercado negro hace unos días y que mejor que alguien como tú para que le de un mejor uso y no tenga una vida de mierda.
- Perfecto ¿Dónde lo tienes?
- Esta de camino a Los Santos, llegara en una hora aun asi te contactare cuando haya llegado.
- Excelente, estamos en contacto – corto la llamada – Ahora hablamos – dijo mirando a Jack – Chicos, reunense.
- ¿Qué ocurre?
- Uno de mis contactos ya lo trae para aca, llega en aproximadamente una hora asi que atentos.
- ¿Cuál es su historial?
- Bebé abandonado en un bote de basura, nadie lo quiere adoptar y hace poco termino en el mercado negro. Nosotros le podemos dar mejor uso y asi no tenga una vida de mierda.
- Perfecto, preraremos todo.
- Necesito hablar contigo – dijo Jack llamando su atención.
- ¿Qué pasa? – salieron de la habitacion.
- ¡¡UN BEBÉ!! ¿Estas loco?
- Es mi trabajo Jack – se cruzo de brazos – Te lo dije, mi lado criminal son drogas, armas, eliminar a tal persona. Este es mi lado de ángel de la muerte, salvo vidas Jack, ve ese lado.
- Salvas vida, a costo de una vida mas.
- Mira si dejamos a ese bebé donde esta, será victima de pornografía infantil, hay cada loco en la red oscura.
- Y tú eres un loco mas.
- Un loco que eliminara el sufrimiento que ha tenidos desde que ha llegado ha este mundo, le daremos vida a un niño que de verdad lo merece y una felicidad a sus padres – suspiro – Jack, yo sere padre y si supiera que mi hijo tiene alguna falla, pagaría lo que fuera para tenerlo sano. Tú has sido padre, dime ¿Qué harias por tu hijo? – Jack tenso la mandíbula – Si supieras que tu hijo estaria mejor con un órgano y vivira una vida plena y feliz, harias lo que fuera por verlo bien, sin importar que.
Tenia razón.
Permanecieron en silencio solo unos segundos cuando Gustabo volvió a hablar.
-Lo que yo hago es salvar la vida de dos almas inocentes.
- ¿Quién te nombro ángel de la muerte? No eres quien para decir quien muere y quien no.
- Nat me proclamo asi – sonrio de lado – Jack si con esto ya te has puesto como loco, no querras ver que pasara cuando el bebé llegue.
- Tienes razón, no quiero – lo miro – Conozco donde esta la salida.
- Perfecto.
Ni un adios, nada. Solo se fue.
Gustabo tiro la colilla de su cigarro y volvió a entrar para comenzar a preparar la llegada de bebé.
Confirmaba que su relacion con Jack, no hubiera funcionado.
{...}
-Mi princesa hermosa.
- Hola – sonrio divertida, abrazandose al cuerpo del agente.
- Dios tenia ganas de verte – le sonrio – Tu vientre esta comenzándose a ver.
- El bebé esta dando acto de precensia – los dos sonrieron – Extrañaba verte Horacio, estos días han sido, realmente difíciles.
- Lo he notado – suspiro - ¿Cómo te sientes?
- Acabo de vomitar mi perfecto desayuno, tengo hambre de nuevo pero se que volvere a vomitarlo.
- El efecto del embarazo – acaricio su mano – Pero no me refiero a tu estado físico, sino tu estado emocional – la miro – Gustabo no me ha querido decir nada, pero noto que algo esta mal. Y ahora mismo, aquí contigo, siento que algo esta mal – bajo la mirada pero Horacio levanto su menton obligándola a mirarlo - ¿Qué pasa Nat?
- Las cosas están algo mal – hizo una mueca – Gustabo y yo estamos tomando terapia de pareja, lo cual me resulta una jodida mierda, pero él acepto y de cierta manera esto tratando de aceptarlo yo igual.
- ¿Terapia? ¿Qué paso? No me digas todo, porque es su vida de casados y lo entiendo, pero toda la tensión y emociones que sientes ya no solo los afecta a ustedes como matrimonio, esta afectando al bebé.
- Lo se – susurro Nat con sus ojos llenos de lagrimas – Creeme que lo se, yo di tantas veces esa charla a mujeres en espera de su primer embarazo. Se que todo esto, no me afecta solo a mi.
- Oh cariño – Horacio se acerco y la abrazo, acariciando su cabello y consolándola mientras ella derramaba cada sentimiento y emoción que de cierta manera se tenia guardada dentro de ella – Sea lo que sea que hayan pasado juntos lo resolverán, pero si de momento no esta funcionando, deberían tomarse un tiempo. Tú debes respirar, tomar aire fresco, estar tú solo y pensar en que es mejor ya no solo para ti, sino para el bebé. Gustabo también debe hacerlo, deben estar separados un tiempo – se separo un poco de ella, tomo su rostro en sus manos y limpio sus lagrimas – Sera difícil, pero debes pensar en que hacer para estar bien.
- No quiero dejarlo, no quiero que mi bebé crezca como lo hicimos nosotros. Tú bien sabes la mierda que es eso, no quiero que mi bebé crezca asi.
- Si no quieres que viva como lo hicimos nosotros, haras que el bebé viva en una familia en la que sus padres solo están juntos por el y eso también lo afectara. Quiero que tú seas feliz, que el bebé sea feliz y que Gustabo sea feliz, pero si estando juntos solo se dañaran, será mejor que se separen.
- Lo amo – sollozo – Amo demasiado a Gustabo, que lo que me hizo me hace complicado el odiarlo – lo miro – Gustabo me engaño – susurro sorbiendo su nariz – Trate de odiarlo, en verdad que trate, pero solo me hizo darme cuenta de que en verdad lo amo y me es inevitable odiarlo. Y tampoco quiero que el bebé lo odie, no hare eso. Nuestro hijo, conocera al hombre del que yo me enamore.
- ¿Te engaño? – susurro tensando la mandíbula – Esto es sumamente increíble – susurro.
- ¿Horacio, que pasa?
- Nada, es solo que – se levanto y gruño frustrado – Me parece increíble que te haya echo eso.
- Lo perdone, no es algo de suma...
- ¿Suma importancia? Natalia, abre los ojos, Gustabo te engaño. Si lo hizo una vez, lo hará de nuevo.
- Pero...
- Piensa muy bien en lo que te dije, no pienses en la felicidad de Gustabo porque él no pensó en su matrimonio al momento de engañarte. Piensa en ti y el bebé, debes darle lo mejor y ser una buena madre.
- Horacio...
- Por favor, solo escucha Natalia, necesitas comenzar a pensar en ti y tu bienestar – Nat bajo la mirada – No quiero que salgas mas lastimada.
- Entiendo – asintió – Lo pensare.
- Perfecto – la abrazo – Ahora, te hare algo de almorzar ¿Qué se te apetece?
- Si te digo, vas a vomitar.
- Vamos no será tan asqueroso.
- Quiero huevos revueltos con tocino y mermelada de fresa.
- Vale no suena asqueroso, tal vez comerlo si – sonrio divertido – Quiero que te relajes, hoy es dia de que tu cuñado te concienta.
- Gracias Horacio – le sonrio – Por estar aquí.
- Siempre querida – le sonrio. Se fue a la cocina y puso soltar toso el aliento que contuvo. Debe encontrar a Gustabo y romperle la cara, rompió la promesa que le hizo.
Nat se abrazo a si misma, estaba cofundinda. Su mejor amigo, su cuñado, en verdad la quieren lejos de Gustabo. Pero los dos tratan de hacer lo mejor, tratan de reparar su matrimonio, pero... Pero ¿y si ya no hay vuelta de hoja? ¿Y si de verdad tiene razón?
No quiere alejar su bebé de su padre, realmente quiere que este involucrado en todo el proceso, no quiere estar sola. Lo ama y ama que ese bebé sea una muestra de amor que ellos dos se tuvieron, porque si, ese bebé fue echo con mucho amor y los dos lo esperaban con ansias. Pero parece que todo se viene abajo poco a poco.
Tampoco quiere sufrir mas de lo que ya lo hizo. No quiere que su bebé sufra, pero tampoco quiere que Gustabo sufra.
Realmente necesita un respiro.
Como dijo Horacio, ya no solo es ella por quien debe pensar.
-Horacio – lo llamo y a los pocos segundos él apareció con un mandil.
- ¿Qué pasa?
- Necesito que canceles la fiesta de hoy, no me siento de humor para hacerla.
- Esta bien – asintió frunciendo el ceño – Yo avisare de la cancelación de la fiesta.
- Gracias.
Horacio se fue dejandola sola. Nat solo suspiro y acaricio su pequeño vientre.
{...}
-Manden esto al hospital, el retso de órganos a hospitales que se necesiten.
- Si.
Gustabo se quitaba su ropa sucia, se tomo un pequeño descanso, abrió una cerveza y le dio un gran trago. Tomo su teléfono y vio varios mensajes, abrió los de Horacio.
"Tenemos que hablar"
"Por cierto, estoy con Nat, no se siente muy bien, dijo que cancelara la fiesta de hoy, asi que he cancelado
todo. Lamento si no tomamos tu opinión, pero me preocupo por el bienestar de la futura mamá"
Gustabo suspiro frustrado, algo le hace creer que ya sabe que paso. Y sabe que se merece todo lo que le vaya a hacer. Aunque la cancelación de la fiesta le sorprendio, Nat de verdad se veía muy emocionada por la fiesta.
Tal vez con un regalo le suba el animo.
Pero no solo con ella debe lidiar, sino con Jack también.
-La fiesta se cancela chicos, Nat no se siente del todo bien.
- Esta bien, avisa si podemos ayudar en algo.
- Claro, gracias – les sonrio – Me tengo que ir.
Gustabo subio a su auto y condujo hasta la casa.
No quería que las cosas acabaran asi.
Al menos quiere que todo quede en buenos términos.
Toco un par de veces la puerta y espero. Cuando abrió la puerta, él le sonrio.
-No quiero que esto acabe asi Jack.
Jack lo miro, hizo una mueca, se hizo a un lado y le dejo pasar.
ESTÁS LEYENDO
Play Dirty ~ Intenabo ~
ФанфикEl club de sexo donde todo puede pasar y no sale nada de ese club... Interesante ¿verdad? La curiosidad llevo a qué Jack Conway, el Superintendente de Los Santos, fuera a ese club, sin saber que podía esperar o a quien esperar... ¿Listo para entr...