Si tú supieras [en proceso ]

*Capítulo 15*

Hugo
-¿estás listo bae?- me dijo Riley mientras se miraba al espejo y se aplicaba más maquillaje del que llevaba.

-ehh, si, no me falta nada-

-bien, pues vamos ya-

Salimos hacia el patio y me comencé a poner un poco nervioso, no sabía si iba a venir Dianne, además no estaba Jackson para apoyarme, dijo que se quedaría en los sofás de abajo estudiando un poco.
Tan pronto como escalamos la pared vimos a dos chicos y otras dos chicas, eran Marco y Nils que estaban fumando algo mientras hablaban con Carla y Rose.

-hombre, coño pensé que nunca ibais a llegar- dijo Nils abriendo los brazos de forma amistosa.

-Aparta Nils- Riley como siempre se decidió por ir a hablar con Carla y Rose se quedó aquí, un poco incómoda, cabizbaja, jugando con sus manos mientras disimulaba incomodidad.

-¿Por qué no vas?-

-coño Nils eso no se pregunta- Marco tiro su cigarrillo y lo aplasto contra la hierba.

-porque no quiere imbecil- dije disimulando.

-bueno pues vamos bajando al bar ¿no?- Nils volvió a preguntar y todos accedieron, aunque yo quería esperar a Dianne.

-Id yendo que yo me he dejado la... cartera- la excusa perfecta para poder esperarla.

-siempre igual macho- Marco se quejó y luego bajaron todos la colina.

Pasaron minutos, que ya parecían horas y ella no bajaba, así que me di por rendido.

-pfff, seguramente este ocupada estudiando o se le halla olvidado, no hay de que preocuparse ella me ama- esto que me dije a mi mismo provocó un escalofrío que recorrió todo mi cuerpo mientras bajaba la colina, y cada vez más preguntas pasaban por mi cabeza, no se porque por primera vez me sentía, inseguro.

Al llegar al bar de la esquina los vi sentados en una de las mesas de fuera.

-puedes irte ya rose a tu sitio que Bailey ya llegó- se que a veces Riley podía parecer muy borde y mala persona pero en el fondo es una persona dolida y al fin y al cabo no todo el mundo entiende a este tipo de personas, por eso siempre tengo bastante paciencia con ella, porque se que sufre, aunque no siempre me lo cuente.

-no rose quédate ahí, que me voy a sentar con Marco- me senté y agarré un cigarro.

- así me gusta cabrón, a mi ladito como buen amigo- mientras todos reían el paso su brazo al rededor de mi cuello y con su mano contraria me alborotó el pelo.

-¡¿Qué haces imbécil!?- Dije dándole una hostia.

En general estuvimos riendo y hablando todo el rato, luego vimos cómo Marco intentaba ligar y nos reímos aún más. Por un tiempo me consiguieron quitar a Dianne de la cabeza.

- bueno estuvo bien pero ya, suficiente que hay que irse- Carla se levantó de la silla y seguidamente todos hicimos lo mismo.

-si bro, yo tengo que terminar unos ejercicios de matemáticas-

-¡Bailey! Te toca pagar- Nils me gritó mientras se iban y yo pedí la cuenta. No era muy tarde pero decidí no cogerles y andar yo solo hasta allí, pase por varias tiendas, y luego encontré el callejón viejo, donde Jackson y yo jugábamos en el Arcade del bar. Así que solo decidí asomarme.

¿Qué coño? Estaba viendo a Dianne y Jackson bailar y divertirse, me quede mirando un poco cabreado y en cuanto sus labios se juntaron estallé, no se porque me sentí así pero mis impulsos se decidieron por contarle a la directora que ellos estaban fuera, lo iba a matar. ¿Como es que Jackson me mintió? El ardor en el pecho comenzó y una vez en el cuarto busqué las pastillas de la ira, me tomé una, pero no pareció hacer mucho efecto. Mentí a la directora de que yo no salí y le expliqué que el no estaba en su habitación, en efecto se tragó mi mentira y me dio las gracias. En cuanto Jackson apareció por la puerta mi ira se volvió inmensa.

-¡De que coño vas!- grité

-¿que dices Bailey?-

- ¡¿Te crees que no me iba a dar cuenta?! ¡¿Me ves con cara de imbecil?!-

- ¡Que coño te pasa ahora joder!-

-¡¿te crees que no te he visto, por ahí, bailando y besuqueándote con Dianne?!-

-¡Osea que has sido tu el que nos ha delatado!¡No me lo puedo creer! ¡Bailey que te quede claro una cosa, ella no es tuya, además tú tienes novia, déjame por una puta vez ser feliz! ¿es que no lo entiendes? ¡Tú me robaste a Riley!- su sobresalto me sorprendió

-¿q-que?-

-oh vamos Hugo, como si no lo supieras ¡Ella me puso los cuernos contigo! y aún así yo he seguido siendo tu amigo, apoyándote, porque no aprendes a hacer eso joder, déjame por una vez...- vi como el comenzó a llorar y su ansiedad apareció también, sus manos temblorosas y su respiración acelerada no me preocuparon, me había quitado a Dianne y solo eso me importaba ahora.

-me la suda lo que pasara, ¡ya no podrás verla! Y será mía, ¡me la suda Riley o tú! ¡Solo quiero que no te pongas en mi puto camino y que me dejes en paz!-

- ¿o sino que?- vale su pregunta ya me hizo estallar.

Le agarre de la camisa y le arrastre hasta la pared, luego le pegue un puñetazo y me dirigí a la puerta para salir y desahogarme, pero eso no fue todo, antes de que tocara el pomo el se abalanzó contra mi y me reventó. Como dijo mi padre un hombre que llora es un hombre inútil, así que con dos narices me levanté del suelo y me salí a fuera. Tenía sangre por todas partes y no lo podía disimular, así que para bajar busqué el lugar con menos gente posible.

-¿Lucas?- le vi a lo lejos del patio.

-¿enano que haces aquí todo sangrado?- tomo un poco de su cigarro y me escucho atentamente esperando una respuesta de mi parte.

-dame uno- se que no tenía la edad para esto, pero a veces era mi única salida, cuando las pastillas de la ira no me hacían efecto recurría a un cigarro, que me calmaba al instante.

-¿Ya te has metido en bulla? ¿Con quién?-

- Déjalo Lucas-

-Como quieras enano- los dos nos llevamos el cigarro a la boca y continuamos fumando el resto de nuestros cigarrillos en silencio.

-bueno enano, me voy a cenar, que hoy ponen piña- me dio unas palmaditas en la espalda y se marchó.

Cuando estuve suficientemente relajado me acerqué al baño a limpiarme las heridas y más tarde al cuarto a cambiarme de camisa, luego bajé a cenar, pero ya sólo quedaban restos de comida y no quedaba casi nadie cenando, mejor, así nadie me veía, quería dejar mi popularidad por hoy un poco de lado. Por una vez necesitaba desaparecer.

en este preciso instante me sentí iluminado, fue como si algo me hubiera dado la mejor idea de mi vida, no se como pero aquí esta, lo tengo, ya se como hacer que Dianne caiga a mis pies, como al principio.