Los 100 y tú (fanfic)

CAPÍTULO 34

Narra (T/N):

Clarke: Tenemos que avisarles que aún hay gente repartida por más lugares, además de donde cayeron – dice tras pensar un rato sobre la nueva noticia – no podemos dejar a esa gente allí

Dinah: Lleváis aquí bastante tiempo, es un milagro que aún estén vivos – dice sirviendo algo de comida, la cual agarro sin pensármelo dos veces – sobre todo si se encuentran en Azgeda

Raven: ¿Tan peligroso es el terreno de Azgeda? – me mira – ya me has hablado sobre los clanes y tu cara cambia a una más desagradable cada ve que se menciona a Azgeda

¿Qué si podría responder a su pregunta? Puede que sí, pero no es mi tema favorito y además la comida es mucho mas interesante que este nuevo tema de conversación.

Dinah: No vas a conseguir que te hable de ello – Raven la mira extrañada – a ninguna de las hermanas les apasiona el tema de Azgeda

Clarke: Eso ahora da igual – se levanta y empieza a andar por toda la pequeña habitación – hay que ayudarles, Azgeda no es un buen sitio para vivir

(T/N): A mi no me mires – todas me miran sorprendidas – solo hace un día que llegamos y ya quieres que vuelva a arriesgar mi vida

Clarke: No es eso lo que te estoy pidiendo, solo que hay que sacarlos de ahí

(T/N): Pues habla de ello con Lexa, porque yo no pienso mover ni un musculo – me levanto a por más comida – estoy muy bien en Polis, Raven esta aquí conmigo...yo ya no tengo porque hacer nada

Clarke: ¿Pero que mierda te pasa? – se acerca a mi cabreada – solo te estoy pidiendo sacar a los míos del territorio de Azgeda, no que des la vida por mi

Dejo que siga, me fijo en que Dinah también me ve extrañada, pero se mantiene fuera de la conversación. Raven por otra parte tampoco ha intervenido, podría parecerme extraño...pero prefiero no darle importancia.

(T/N): Sin embargo estuve a punto de morir por vosotros – sonrío de lado, viendo como cambia la cara de todas – mira Clarke, pídeme todo lo que quieras excepto que vaya a Azgeda

Dejo la comida en la mesa y salgo de la casa de Dinah, para mi buena suerte ninguna de ellas me sigue. Algo que les agradezco, no me apetece seguir con esa conversación.

Dirijo mis pasos hacia la torre, en un primer momento pienso en ir con mi hermana para hablar con ella sobre el tema, pero como he dicho no quiero pensar en ello.

Por lo que guio mis pasos hacia la habitación donde tienen encerrado a Roan. Ontari dijo que seria un buen candidato para sustituir a Nia, eso es algo para tener en cuenta.

Guardias: Seken Heda – hace una pequeña reverencia y me dejan paso a la habitación

Al entrar veo al príncipe en el pequeño sofá leyendo algún libro, cuando nota mi presencia lo deja en la mesita y sonríe de lado.

Roan: ¿Qué te trae por aquí?

(T/N): ¿Qué harías si fueras rey? – no me ando con rodeos, necesito analizarle - ¿Cómo sería tu gobierno?

Roan: Veo que ya has hablado con Ontari – se acomoda en el sofá – quitaría algunas leyes, por supuesto. Siempre me han parecido crueles e innecesarias

(T/N): ¿Tu clan aceptaría nuestra coalición?

Roan: Eso ya lo... - enarco una ceja al saber como termina esa frase – mi pueblo acepta a Lexa como su comandante, solo unos pocos influenciados por mi madre son los que se oponen contra ella

(T/N): ¿Y qué pasaría con aquellos que se oponen? ¿Respetarían tu reinado? – antes de que conteste le callo con tan solo levantar la mano – porque mi hermana seguirá siendo Heda, eso no va a cambiar por mucho que te conviertas en rey y si tengo que acabar con ellos lo haré, no dudaré en ningún momento