"Si este sufrimiento me matará, moriré con mi frente en alto".
Jungkook
El castillo real tiene aproximadamente doscientas habitaciones. Está dividido en tres palacios destinados para la familia real. Limita al sur con todo el Bosque Real y está rodeado de muros de aproximadamente diez metros de alto imposibles de escalar. Posee cuatro entradas en cada punto cardinal; este, oeste, norte y sur, todas custodiadas por aproximadamente veinte caballeros en cada una. En la noche aumentaban a treinta. Además de ello, las torres vigías cuentan con diez arqueros en cada una y hay unas veinte entre las que pude visualizar. Era una fortaleza impenetrable.
Llevaba ya una semana desde que Yugyeom me dejó salir de las celdas. Por dentro, agradecía poder respirar aire puro, sentir el calor y que mis ojos vieran la luz. Corte Verano era hermosa, debía admitirlo, siempre lo había sido; el castillo en forma de ele rodeado de arbustos perfectamente podados que se extendían kilómetros y kilómetros, caminos de adoquines que serpenteaban entre los muchos edificios del palacio, el delicioso aroma que se sentía en el aire gracias a los árboles llenos de frutos, y lo más hermoso era el campo lleno de flores de gerberas, la flor de la corte, pequeñas flores rojas que se balanceaban con el viento. Pero dentro de esa belleza, vivía gente horrible, personas que no debía olvidar el sufrimiento que aún me causaban.
Las tareas diarias estaban hechas para ser imposibles. Primer día, barrer todos los adoquines del palacio. Segundo día, lavar todas las ollas de la cocina con un cepillo del tamaño de mi dedo. Tercer día, limpiar todos los desechos de los cerdos. Cuarto día, regar cada una de las plantas del palacio. Quinto día, cargar los alimentos que llegaban al castillo, kilómetros y kilómetros hasta la cocina. Sexto y séptimo día, recoger todas las hojas caídas de los árboles.
Mi motivación de no volver a experimentar la tortura de Yugyeom me hizo poder completarlas todas. Solo comía una vez al día y era más de lo que había podido comer en años, así que no me quejaba.
Todas las noches intenté escapar. Ingresaba al bosque para tratar de encontrar el camino, pero todo era como un laberinto. Parecía caminar en círculos porque siempre llegaba de nuevo al castillo. Otras noches, en donde parecía avanzar, los grandes lobos me impedían el paso, y desde entonces, no lo volví a intentar. Si ellos avisaban de algo a los guardias, me matarían sin pensarlo.
No pude dormir en todo este tiempo. Siempre me despertaba sudando y con el corazón agitado por las pesadillas de Yeri llamándome y yo corriendo hacia ella sin poder alcanzarla. El sueño se repetía una y otra vez, y no podía permitirme llorar sin dejar que mi aroma me delatara, haciendo que el dolor en mi corazón, fuera peor.
Me levanté agitado al sentir una presencia en las caballerizas. Ni Lucy ni Yugyeom me dieron lugar alguno para dormir y me sentí aliviado de no tener que estar encerrado en el castillo, así que las caballerizas eran la mejor opción, aunque dormir en paja y rodeado de caballos, no tanto.
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La Corte Oscura | Taekook & Yoonmin
Fiksi PenggemarNacido en un mundo sin esperanza para los omegas, Jungkook ha escapado toda su vida del cruel destino de morir. Sin saber que en su cuerpo carga con la marca de la Diosa Luna y su otra mitad, Kim Taehyung, es su enemigo. ● Géneros: Romance, Fantasí...