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Salí de la ducha lo más rápido que pude, Jaden estaba llamando, conteste.

-¿Si?- Pregunté al teléfono.

-Mas vale que me digas en dónde te metiste, por qué jamás faltas.- Reclamo molesto

-Ey, tuve unos pequeños problemas, por eso no pude ir, pero mañana iré y me pondré al corriente.

-Oh jaja, me las pagarás muy caro, Osborn. Por tu culpa tuve que trabajar todo el día con Cielo.- No pude aguantar la risa. -No te burles, Osborn.

-Jaden, seguro no estubo tan mal...

-Ni estibi tin mil, Osborn, intenta trabajar todo un día con alguien que no para de tocar tu cabello.

-Bueno, tal vez te lo merecías, oye tengo que irme, te veo después.- Y antes de que se negara colgué.

Me comencé a vestir.
Mis hermanos no estaban en casa, tampoco papá.
Saldré a comer.

Y como lo planee lo hize, fue a almorzar, después pase por unas tiendas a comprar unas cosas, solo para pasar el rato hasta que recibí una llamada de Peter.

Al llegar a la dirección que me pidió, baje del auto y subí al techo del edificio como lo pidió. Peter es muy raro a veces, pero hoy más.

Después de subir unas muy extensas escaleras en tacones llegué a la azotea.

-¿Peter?- Lo llame entrecerrado los ojos por la repentina luz del sol

-¡Raisel! Al fin.- Dijo acercándose a mi.

-Si, bueno hubiera llegado más rápido, si no me hubieras pedido verte casi del otro lado de la ciudad.- Mis ojos se acostumbraron a la luz, y Peter me jalo de la mano.

-Si, mi error, no importa. Paso algo muy extraño, yo estoy extraño.

-¿Eso? Crei que ya lo sabías, Peter.

-No, Raisel. Ahg mira. Ayer me pico una araña, llegué como zombie a la casa...- Lo interrumpí.

-Me asustaste, y por eso era que tenías la bola horrible en la mano, que asco...- Asqueada hablé, Peter me interrumpió.

-Cuando desperté ya no necesitaba lentes, puff no, y mi cuerpo estaba más.. más fuerte...- Lo volví a interrumpir.

-Si, lo noté hoy en la mañana...- Me interrumpió de nuevo.

-Raisel déjame terminar.- Regaño

-¡Bien!

-Hoy en el almuerzo ahh, podía ver todo como si mis reflejos estubieran mejorados, y esta cosa de las manos...- Decía recordando.

-¿Qué cosa?

-Salio de mis muñecas, y no se despegaba, me hizo meterme en una pelea.- Recordaba mientras veía sus muñecas.

-¿Peter Parker en una pelea?- Pregunté sin poder creerlo.

-Y creo que gane...- Me miró extraño

-¡¿Ganaste?!- No lo podía creer, ¿Peter? ¿Mi Peter en una pelea y ganó?

-¡Raisel!- Volvió a regañar y volví a prestarle atención.

-Ay, es que.- Intente excusarme pero no podía. -A ver, ¿que cosa salió de tu muñeca?

-Ahg, dejame ver...- Se puso en la orilla de la azotea. -Era algo como telaraña... Solo extendí el brazo y salió.

-Hazlo...- Alenté y este solo asintió y miró al edificio de enfrente.

-¡Telaraña!. ¿Vuela?. ¡Arriba, arriba y muy lejos!. ¡Shazam!. ¡Anda!. ¡Sal!. ¡Sal telaraña!- Como dijo tantas frases, hizo muchas poses con la mano y nada, esto me daba mucha pena.

Raisel Osborn // SpidermanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora