Raisel Osborn // Spiderman

1.13

Peter me llamo.

-No pude llegar a tiempo, y la vi con alguien más...
-¿Está con alguien?- Pregunté mientras bajaba a el primer piso.
-Si, me lo dijo el día de mi cumpleaños...
-¿Peter, aún la quieres?
-Si... La quiero y creo que siempre la voy a querer, pero la pongo en peligro estando con ella...
-Lose, por eso la rechazaste un vez, si lo hiciste, dejala que este con quién ella quiera... Ella te dijo lo que sentía y tú la alejaste
-Era por su bien
-Era y es por su bien, ya lo haz dicho. Entonces no la culpes a ella por querer superarte.
-Esta bien, te veo luego. Tengo que ir a una clase.
-Esta bien. Te veo en la presentación de Otto.
Colgué la llamada y seguí bajando.

-Raisel, tu vestido están por traerlo, es el que usarás para la presentación del Doctor Octavius.- De la nada llegó Eirene hablándome.

-Esta bien...

-Tiene que estar mejor que bien, si sale algo mal Harry nos matará a todos.- Dijo y se fue de nuevo, desaparecío por un pasillo.

Casa de locos tengo.

Estuve paseando por toda la casa, Jaden había salido por la mañana por unos encargos de Harry.
Harry estaba más nervioso y emocionado que nunca.
Eirene estaba totalmente estresada.
Harry logro que hoy faltará al laboratorio y nos acompañará.

Escuché gritar mi nombre por Eirene, sabía que estaría enojada conmigo por aún no comenzar a vestirme. Corrí de nuevo a mi habitación mientras reía, esperando no encontrarme con Eirene, por qué me matará al ver que sigo en pijama.

Normalmente o antiguamente solía ser como Eirene, creo que intercambiamos papeles, por qué yo siempre era la que estaba lista y elegante par a cualquier ocasión, siempre apurando a Eirene y Harry.

Entre a mi habitación que por suerte estaba sola, comencé a vestirme, un vestido lindo color azul cielo, solté mi cabello y lo peine en un moño alto con la mitad baja del cabello, suelto. El maquillaje ya lo traía puesto desde hacía rato.

Salí caminando tranquila, abajo ya me estaban esperando Eirene y Harry.

-Vez, ahí está.- Dijo Harry al verme.

-Menos mal y hoy no uso los 30 minutos de espera.- Añadió Eirene. -Vamonos ahora

Los tres salimos y nos metimos a la camioneta negra.
Condujeron directo al edificio del Doctor Octavius.

Al llegar había mucha gente llegando a este evento, cuando ya estábamos adentro, estando ahí al poco tiempo llego Peter. 

-Damas y caballeros, mi esposa Rosie y yo les damos una cordial bienvenida.- Saludo el Doctor Octavius. -Pero primero, antes que nada. ¿Alguien perdió un rollo de billetes de veinte dólares con una liga? Por qué encontramos la liga.

Que chiste tan malo.

Todos se rieron

-Que mal chiste. Gracias por venir.- Agradeció, y se puso listo para presentar. -Este día, verán nacer una nueva fuente de energía basada en fusión. Energía renovable y segura, electricidad barata para el mundo. Les presentaré a mis asistentes.

Fue detrás de él y quitó una manta blanca que cubría algo detrás de él, cuando la quito dejo ver unos brazos de metal, cuatro en total, apagados.

-Estos cuatro actuantes se desarrollaron y programaron con el propósito de crear una exitosa fusión.- Explicaba mientras se quitaba la bata, y subiéndose frente a los brazos de metal. -Som resistentes al calor y al magnetismo.

Tecleo sobre un aparato algo y después se puso una especie de cinto muy grueso de metal al rededor de su estómago, quedó muy bien asegurado.
Siguió con una especie de columna de metal con algunas agujas, se subió por toda su espalda y después se clavaron las agujas para que quedara bien asegurada la columna de metal sobre la espalda del Doctor Octavius.
El Doctor Octavius y todos hicimos gestos de dolor al ver cómo se enterraban las agujas en su espalda, todas al mismo tiempo, pero al final el doctor Octavius siguió como si nada.