Los descendientes de los fundadores. (PAUSADA INDEFINIDAMENTE)

Capítulo 47: Charla de mejores amigos.

Durante un lapso que duró un mes Paul se dedicó a vigilar a Derain. Sus palabras el día en que dió su primer clase le dieron más de que pensar.

Lamentablemente, eso lo distraía del resto de sus responsabilidades.

Si no fuera porque es muy inteligente, el castaño se habría retrasado mucho en sus clases, pero fallaba estrepitosamente en varios de los deberes teóricos. Su concentración en los hechizos en las clases de Encantamientos y en Transformaciones fue tan escasa que provocó dos accidentes. En Pociones provocó otro y así estuvo hasta octubre.

Paul no hablaba con sus amigos sobre lo que sospechaba porque quería asegurarselo. Ni siquiera comentaba lo poco que averiguaba con Lily u Olive.

De vez en cuando era hostigado por el grupo de Xavier pero más que nada Lacrosse. En esas ocasiones, Paul tenía la suerte de ser ayudado por sus amigos o sus demás conocidos del colegio. Era como si él supiera cada vez que Paul iba a estar solo.

--- «Bueno--- pensaba Paul, acostado a un lado de su árbol favorito del patio del colegio---, últimamente siempre estoy solo.»--- observó.

Y era verdad.

Cuando se disponía a investigar sobre las Familias se aislaba en la Sala del Heredero o en alguna zona alejada de la biblioteca. Y ahí permanecía hasta que se dormía o lo echaban, lo que ocurra primero.

No me molestaba en estudiar y por eso le estaba yendo tan mal, pero era lo que menos le preocupaba al castaño.

Hoy era 14 de octubre y en estos momentos Paul seguía metido en su mundo de investigación. Ni siquiera el cumpleaños de Neg lo alejó de sus investigaciones.

Razón por la cual en 5... 4... 3... 2... 1...

--- ¡Paul Carter, mueve tu puto trasero a la Sala de Menesteres en este instante!--- era la voz del cumpleañero, entrando en la Sala del Heredero dando fuertes zancadas y Paul también pudo oír pasos detrás del chico.

Cuando alzó su mirada se topó con Neg con una mirada extraña que no supo distinguir (¿Era molestia o diversión?). Detrás de él venían Dom con los brazos cruzados, Leo con las manos detrás de su nuca y Lily con cara de pocos amigos y los brazos cruzados también.

--- Desgraciado, estás en el paraíso--- comentó Leo, viendo como pasaba Paul sus días de investigación.

El castaño estaba acostado en uno de los sofás con un chupetín en la boca. En la mesa al lado del sofá habían dos latas de Coca-Cola (una vacia y la otra a medio tomar), una bolsa de gomitas y otros dos chupetines. Todos dulces muggle.

--- ¿Quieres uno?--- le preguntó a Leo, que veía todo con baba cayendo de su boca.

[Leo: ¡Mentira! / Paul: 😒.]

El otro castaño de Hufflepuff no tardó en agarrar uno de los chupetines.

--- ¿Todo eso son dulces?--- inquirió Lily, cambiando su cara de pocos amigos por una curiosa.

--- Sí; muggles. Si quieres puedes agarrar--- le dijo Paul, volviendo a la lectura.

--- ¡Nada de eso!--- exclamó Neg, sacándole el libro a Paul--- Amigo, se supone que tendríamos una super fiesta en la Sala de Menesteres. ¿Por qué estás encerrado leyendo vete a saber que cosa?--- le hechó una mirada al libro que se titulaba «Colonias australianas.»--- ¿Por qué quieres saber sobre los canguros?--- inquirió.

--- Porque Ballack es miembro de la Familia Real australiana--- contestó Paul, poniendo tensos a su novia y sus amigos---. Por eso no puedo ir a tu super fiesta, Neg. Llevo un mes tratando de averiguar algo sobre la Familia Melzealand, pero los libros dicen poco--- Paul apuntó a una fila de libros que estaba al lado del sofá que sus amigos no habían visto.