Capítulo 31

3.6K 478 38
                                    


El sol brillaba con fuerza, el aroma a césped mojado se sentía en el aire y la cálida brisa del verano andaba a su alrededor, al abrir la gran cesta varios postres comenzaron a ser dejados frente a ellos, la sosa mesa rápidamente se transformó en un parque de dulces y delicias saladas

_ mamá mira ! Pastel de chocolate *sonríe* tu favorito

_ muchas gracias mi pequeño príncipe *sonríe* Atenea no deseas algo de miel para tu leche ?

_ si mamá *sonríe*

Melissa sonrió al ver a los niños comer alegremente los dulces, su largo cabello se movía gracias al viento, sin duda una hermosa tarde....

_ segundo principe *sonrie* desea probar algo en especial ?

_ está bien su majestad *sonrie* con este pastel de limón me conformo

_ pude pedir lo que desee *sonríe* después de todo usted ayudo a mi pequeño durante la competencia de caza

_ no fue nada *sonrie* después de todo el también es mi hermano menor

Robert acaricio el cabello rubio de Caín con una sonrisa, Melissa conocía la buena relación de estos pero aún era algo arriesgado, no confiaba para nada es Yurisse...

_ mamá escuché que andaba sueltos los perros del emperador *preocupado*

_ así es *suspira* lo mejor es no acercarse a ellos, lastimosamente esos pobres animalitos fueron criados de mala forma.....

_ escuché que son sumamente agresivos *serio* será mejor que vallan con cuidado su majestad

_ lo sé *sería* por eso sir Joseph tiene caballeros a nuestro alrededor

La tarde paso tranquila, Robert fue muy amable y estuvo jugando todo el día con los pequeños, Melissa quien observaba todo a penas podía respirar tranquila, el papeleo del palacio había aumentado en estos años y el emperador apenas se molestaba en realizarlo, debía dividir su tiempo entre las montañas de papel, educación de los príncipes y actos reales....
Por eso había perdido peso últimamente y su piel comenzaba a verse pálida, si seguía ese ritmo de vida el médico imperial dijo que podría en riesgo su salud, pero que más podía hacer ? Además la rebelión ocupada más tiempo de lo que pensó...

_ a este paso moriré por exceso de trabajo *suspira*

Sarph seguía a su lado, como ese viejo zorro podía vivir tanto ? A este paso moriría ella primero, sería bueno dejarle a cargo sus hijos ? Una pequeña carcajada se escapó de sus labios...
Pero que pasaría una vez que la historia original comience ? Bueno ya había cambiado muchas cosas así que solo quedaba derrumbar al tirano.....

La rubia se había metido tanto en sus pensamientos que no noto cuando los príncipes y la princesa se alejaron de su vista, sería algo de lo que se arrepentiría....

_ Su majestad!!!!

El segundo principe llegó a su lado completamente cansado, su mirada mostraba pánico y sus manos tenían heridas

_ príncipe ?! Que sucedió !?

_ e...estábamos j..jugando al escondite *asustado* y...y no encontramos a A.. Atenea?!!!

Su mirada se torno oscura al escuchar eso....
Como era posible que con tantos guardias la princesa desapareciera...

_ dónde está Caín...

_ con sir Joseph

_ muy bien *sería* lleven al segundo principe a su palacio yo iré con sir Joseph..

Ignorando los gritos del menor corrió con todas sus fuerzas por el sendero donde estaban las cintas que indicaban la zona segura, llegando al final de dicho sendero pudo divisar a sir Joseph con el pequeño rubio en sus brazos...

_ *sería* que sucedió...

_ al parecer la princesa salió de la zona segura...

_ m...mamá ! *Lloroso* Atenea no me hizo caso, le dije que si se iba s..se perdería !!!

_ está bien *sonríe* ahora quedate con el sir mientras busco a tu hermana, lamento poner a trabajar a sir Joseph cuando apenas regreso al imperio hace unos días

_ *niega* su protección es mi responsabilidad..

Miro por última vez al pequeño rubio y comenzó a correr en dirección a los jardines imperiales, solo esperaba que Atenea este sana y salva...
Mal día para darle vacaciones a Sarph y samira....

Mentiría si dijera que no estaba asustada pero sabía que en este tipo de situaciones lo mejor era tomar las cosas con la cabeza fría...

_ ATENEA !!!!

Grito con fuerza mientras esperaba escuchar algún sonido pero fue en vano, siguió corriendo entre los árboles del jardín mientras pequeñas gotas de lluvia comenzaban a caer sobre ella, por qué demonios tenía que ser tan grande ese maldito jardín...

_ MAMA !!!!! AYUDA POR FAVOR !!!!!

A lo lejos la voz desesperada y asustada de Atenea logro llegar a sus oídos, siguió el llanto hasta dar con las paredes del palacio y ahí se encontró una escena que detuvo su corazón...
La pequeña pelirroja lloraba contra la pared de piedra mientras un gran perro negro gruñía frente a ella, era demaciado grande y sus dientes eran filosos, acaso no podía ser un perro normal !?

_ a...atenea d...debes estar q...quieta

Con sigilo de acercó hasta ellos mientras observaba como aquel perro cada vez gruñía más fuerte, debía llegar rápido pero si hacía ruido de más ese animal atacaría a su pequeña..

_ MAMA !!!

al ver como el gran perro se acercaba a ella el pánico la atacó y grito entre llantos llamando a su madre, esto al animal le dió una clara señal de ataque, parecía que sus filosos colmillos atravesarían su frágil cuerpo por lo que cerro sus ojos en espera de lo peor.....

_ eh ?

Grande fue su sorpresa al no sentir ningún tipo de dolor por lo que con cuidado abrió sus ojos......

_ e....estás b...bien ?

Sobre ella estaba su madre quien la protegía con su cuerpo, sus manos comenzaron a temblar al ver la sangre proveniente de la espalda de la rubia

_ m...mamá !?

_ shh *sonrie* vamos regresemos con los demás....

La rubia tomo a la pequeña en brazos con cuidado y la abrazo contra su pecho, suspiró mientras miraba hacia atrás....

_ lo lamento tanto perrito *sería* tu no tenías la culpa de nada...

Para evitar que el perro atacará a Atenea la abrazo y recibió el ataque en su cuerpo, nunca quiso pero para evitar que las volviera a atacar tuvo que inyectar veneno en el animal...
Ese perro no era normal, fue modificado por magos por lo que ponerlo a dormir no funcionaría....
Aún así sentía compasión por ellos...

Abrazo con cuidado a Atenea mientras lloraba y emprendió el regreso a la zona segura del palacio, sin duda la pequeña se había asustado pero eso no la salvaría de su mereció regaño, después de todo Melissa les explico muchas veces que no debían salir de la zona segura....

Fin~



La madre del Angel y el DemonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora