"𝚈𝚘 𝚗𝚎𝚌𝚎𝚜𝚒𝚝𝚘 𝚌𝚘𝚖𝚙𝚊𝚗̃𝚎𝚛𝚘𝚜 , 𝚙𝚎𝚛𝚘
𝚌𝚘𝚖𝚙𝚊𝚗̃𝚎𝚛𝚘𝚜 𝚟𝚒𝚟𝚘𝚜; 𝚗𝚘 𝚖𝚞𝚎𝚛𝚝𝚘𝚜 𝚢
𝚌𝚊𝚍𝚊́𝚟𝚎𝚛𝚎𝚜 𝚚𝚞𝚎 𝚝𝚎𝚗𝚐𝚊 𝚚𝚞𝚎 𝚕𝚕𝚎𝚟𝚊𝚛
𝚊 𝚌𝚞𝚎𝚜𝚝𝚊𝚜 𝚙𝚘𝚛 𝚍𝚘𝚗𝚍𝚎 𝚟𝚊𝚢𝚊."
𝙽𝚒𝚎𝚝𝚣𝚜𝚌𝚑𝚎
La primera semana de entrenamientos estaba por terminar, durante la semana todos los entrenamientos fueron de resistencia. Golpearon a los cabos, los pusieron 7 horas parados bajo el sol sin ingerir alimentos o bebidas, doblegaron sus ejercicios junto a los horarios y el tiempo, la "carrera de obstáculos" era extensa e intensa y todo con un tiempo establecido... era una tortura para los cabos. Y estos entrenamientos los hacían todos y cada uno... lo que significaba que también los hijos de los rangos altos lo recibían sin rechiste, lo que comenzaba ser un problema para el matrimonio Kirishima, los cuales se habían distanciado bastante en esa semana. Entre Jiro y Sero las cosas iban pasando con normalidad, no eran buenas pero no querían hacerlo un problema, así que no eran malas mientras que Bakugo parecía que durante todo el día había estado pegado a su catre junto a King que le hizo compañía... él no sabía porqué pero las energías y ganas le fallaron, esfumándose por completo. Pero al estar toda la mañana y tarde en su espacio, decidió levantarse, ponerse sus botas para salir con una botella en manos.Salió de la caseta y su vista se enfocó en el cielo... la luna brillaba con intensidad y esa noche lo hizo recordar a todas las noches qué pasó con ella, sentados en una banca. Soltó un suspiro y haló con brusquedad sus cabellos para caminar un poco, mientras vagaba cerca de un pequeño risco a las afueras del campamento, vió no muy lejos de donde él estaba a alguien sentado en el suelo. Decidió acercarse y se encontró con Kirishima y Sero, ambos miraban el horizonte. Sin decir nada caminó y se sentó junto a ellos, quienes lo miraron por un segundo. Bakugo dirigió su vista hacia Kirishima, quien parecía que había perdido su esencia, estos últimos días se le había visto deprimido y muy callado, sin mencionar que también se había estado aislando.
- ¿Qué es lo que no los deja dormir? - Preguntó el cenizo, encontrándose con el rostro deprimido de Kirishima y el rostro cansado de Sero.
- Estoy confundido... estoy enamorado de Jiro pero... no sé lo que ella quiere o piensa... no entiendo como lidiar con lo que siento y no puedo entenderla con claridad. Es que, dime... ¿cómo mierda voy a entender lo que tenemos si no la puedo entender a ella? - El peli-negro habló con cierta vagancia en su voz. - Yo sólo estoy fluyendo... hoy me puede decir "Si" y mañana me dice un "No" y aveces lo hace indirectamente y para ser sincero no lo capto. - Sero se encogió de hombros tratando de restarle importancia pero lucía bastante decaído, sin embargo el teñido soltó un suspiro pesado para llevar su vista a sus manos.
- Las cosas con Mina no van nada bien... - Bakugo y Sero volvieron su vista al horizonte mientras seguían escuchando al teñido...
- C-Creo que... a-acaba de dejarme... - Se escuchó un sollozo bajo, mientras que eso llamó rápidamente la atención del cenizo y el peli-negro... ¿Habían escuchado bien? Kirishima se revolvió buscando algo en su bolsillo derecho de su pantalón mientras lloraba en silencio y con la cabeza baja. Cuando pareció encontrar lo que buscaba lo sacó dentro de su mano para luego abrirla y enseñarles a sus fieles amigos el anillo de compromiso que él le había comprado a Mina hace 18 años.
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Entre el Bien y el Mal. {Kacchako/ Bakuraka}
ActionCuando tu niña se convierte en mujer y más si se apellida: "Bakugo". Tarde o temprano... tendrá que salir del nido a volar y conocer el mundo. Una chica que sabe lo que quiere y eso es seguir los pasos de su abuelo y su padre. Pero el amor... no es...