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Dejé ir la puerta del refrigerador de manera dramática para después caminar al sillón de la sala con un vaso de jugo en mi mano.

Cuando pensé que por fin podría dormir, tuve que abrir mis ojos que se habían comenzado a cerrar por el cansancio.

—¿Jiho? ¿Qué haces despierto?

Los piecitos del pelinegro caminaron dudosos hacia mi dirección, sus ojitos negros me miraban dudosos, llegó a mi lado y como si de un secreto se tratase susurró en mi oreja.

—¿Dónde está papá?

Sin querer un pequeño nudo se formó en mi garganta. Fue el momento en que me di cuenta que los niños ya no habían estado viendo a su padre por las noches durante las últimas semanas. Ni siquiera yo me había percatado de eso.

Me dolía mentirle con una dulce excusa pero la situación me había agarrado desprevenida, no sabía qué decirle al pequeño niño que se encontraba frente a mí. "Lo que pasa es que tú papa y yo nos estamos divorciando", sí, eso era, ¿pero siquiera lo entendería?

Lo alcé con mis manos para que tomara lugar a mi lado, se acomodó envolviendo sus brazos alrededor de mi cintura y aún mirándome con inocencia.

—Jiho, sucede que...

Mis palabras no salían, no sabía qué decir y no quería arruinarlo con un malentendido. Aunque me costase admitirlo, necesitaba aquí a Jaehyun para que me ayudara con la situación.

—Papá está viviendo en la otra casa ¿verdad? —Asentí culpándome a mí por no poder darle una respuesta a su anterior pregunta— ¿Es por qué ya no nos quiere?

—No... no Jiho, no es por eso.

Sus manitas se formaron en un puño, mientras que los bordes de sus labios cayeron para abajo, comenzando a sollozar lo abracé contra mi vientre.

Me quedé cuidando a mi pequeño niño que sollozaba con cuidado de no hacer ruido, Jiho a su corta edad ya había vivido la experiencia de quedarse dormido mientras lloraba.

Mis manos peinaban una y otra vez los delgados cabellos de su cabeza; cuando ambos gemelos nacieron tenían poco cabello que apenas se llegaba a notar, Jaehyun había bromeado con eso diciendo que sus cabezas parecían rodillas.

Nuevamente esa persona volvía a apoderarse de mis pensamientos, ayudándome a olvidar que ese mismo día un señor con barba mal rasurada me había estampado con la entrada de una cafetería sacándome sangre en el acto de violencia.

Jiho dormía plácidamente en mis rodillas, mi corazón se arrugaba como una pasa al ver a mi dulce niño pasar un mal momento debido la torpeza de su madre que no podía contarle la situación que la familia atravesaba.

¿Qué haría ahora?

Tomé al pequeño entre mis manos para cargarlo de una manera que me dejara maniobrar con una mano, terminé mi jugo y lo llevé al fregadero para después subir al cuarto de los gemelos. Una vez al lado de su cama verde lo acomodé debajo de las cobijas, sus mejillas estaban levemente rojas.

Aunque sólo Jihyo había heredado los hoyuelos de Jaehyun, ambos habían obtenido la particularidad de sonrojarse con facilidad; de mi parte, claro, habían sacado la belleza.

Antes de retirarme de la habitación eché un vistazo rápido a Jihyo, se encontraba descansando profundamente. Me quedé unos minutos observando la paz con la que dormían para después acercarme y dejarles un beso en su frente, y por fin irme a mi respectiva cama.

Cuando entré a la habitación, la cama matrimonial me dio la bienvenida e invitándome a acostarme encima de ella, cerré mis ojos y me dejé caer contra el colchón que rebotó levemente debido a mi peso, era realmente cómoda. En un momento la luz de la luna se coló por la ventana y rebotó con un artefacto desconocido, iluminando en una fina línea mi párpado.

Abrí mis ojos por la incomodidad del fragmento de luz para mover el objeto que reflejaba aquel destello, pero un tacto frío de metal me quitó el sueño que por fin apoderaba mi cuerpo. Me senté en la cama, mirando a la pequeña mesa que se encontraba frente a la ventana.

Con una energía que no sabía de dónde había sacado y más aún a estas horas de la noche, me levanté buscando una prenda cómoda para intercambiar por mi traje; un pantalón de pijama y una blusa de algodón holgada, perfecto.

Una vez de vuelta en la cama, mis manos abrieron la tapa de la cajita metálica que había traído a casa la vez que volví con mi madre biológica. Varios papeles salieron volando debido a la presión dentro de la caja.

Tomé la primera hoja que mis ojos encontraron, mirando con suma concentración cada movimiento de mis manos mientras el pedazo de papel comenzaba a revelar su contenido, sintiendo mi corazón bombear sangre rápidamente.

Borré al instante una sonrisa que se había dibujado en mi cara, ¿por qué mi corazón se emocionaba? ¿era porque me había agitado buscando la ropa?

—Eunsoo, calma a tu corazón, es sólo papel.

Carraspeé para borrar el momento incómodo que había creado en mi mente y volver a lo que estaba haciendo.

Al dispararse el interior de la caja las cartas se habían desordenado, por lo que me encontraba leyéndolas sin orden alguno. El silencio provocó que el tiempo se fuese tan rápido sin darme cuenta de ello.

Eran las dos de la madrugada y aún me encontraba leyendo el contenido de todos esos papeles, miré el manojo de cartas que había leído y las que faltaban.

Más fácil eran contar las que había leído que eran diez que contar las que seguían en la caja. Bostecé sintiendo por fin el sueño llegar a mí, acomodé las cartas que había revisado en un cajón pequeño y dejé la caja cerrada en la mesa.

Volví a acomodarme en el colchón suave de la cama, para cerrar mis ojos que comenzaba a pesar cada vez más, logrando dormir y dando por finalizado el día.

(♡)

"10/12

Eun, eres muy bonita. ¿Ya te lo había dicho? Es que enserio eres muy bonita, las cicatrices en tu nariz se lucen muy bien en ti ¿es raro que piense eso?

Cada vez que tus ojos negros me atrapan siento que cada cosa que vivo tiene sentido, estoy tan feliz de poder estar a tu lado, no cabe en mi pequeño cuerpo tanto amor que siento por ti, no puede ser ¿dije amor? creo que sí.

Eun te amo mucho >3< (Mis compañeros de dibujo me dicen que esta es una cara muy usada entre las parejas), buscaré otras formas de demostrarte mi amor que no sean estas caras porque me dan algo de vergüenza.

En fin, hoy cumplimos un mes de pareja y te diría lo hermoso que es estar contigo pero serían muchas hojas y quiero decirte todo mejor en persona. Espero que Hyunjoo te entregue esta carta.

Te esperaré en la salida del campus Eun bonita xoxo (esto me dijeron que significa besos y abrazos), pero no te preocupes, no te besaré si no me lo permites."

"06/08

Hola querida Eun, lamento tanto no poder estar a tu lado en este momento pero con poca gente aquí tengo que encargarme de mucho. Pasó Hyojung por unas ropas para nuestro bebé, las seleccioné yo mismo, color blanco porque te gusta mucho.

No tengo muchas palabras que decir pero tan pronto como me entere que está pasando algo en el hospital dejaré todo el trabajo e iré corriendo, aunque sea así quiero llegar a ver pronto a nuestro bebé, pero también me preocupo por ti. Eres muy fuerte Eun, no sé que decirle a alguien que va a tener un bebé, yo tengo miedo, pero sé que todo estará bien.

Mañana les daré un día de descanso a la gente de la oficina y podré visitarte, hasta entonces nos estaremos viendo.

Te amo mucho Eun"

【❤】

It'll Be Okay; Jung JaehyunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora