Me convertiré en un aventurero

Sentimientos correspondidos y monsterfilia

Techo de la iglesia abandonada 4:30 AM

Bostece y me estire aún no había tanta luz como para despertar pero lo hice quería preparar un rápido desayuno para que bell se relajara no creo que ya no quiera ir a la mazmorra después de todo el derroto a un minotauro el solo eso seguro lo motivara a hacerse más fuerte como casi todas las mañanas salgo al bosque que esta cerca de las murallas esta vez cace un jabalí será difícil de cocinar pero no imposible ya pasando una hora tenía todo listo y entre a la habitación de la iglesia para dejarle su desayuno listo mientras yo salía directo a taller de Tsubaki para tomar la armadura la espada y los cuchillos que le encargue a Tsubaki, al llegar abrí la puerta y avise mi llegada.

Issei—hola buenos días, Tsubaki—dije desde la puerta de su taller sin esperar que Tsubaki saltara para abrazarme.

Tsubaki—buenos días mi lindo Issei ¿me has extrañado? ¡porque yo sí! ～ –dijo ella de forma un poco coqueta.

Issei—pues siendo sincero si te extrañé mucho Tsubaki—dije mientras la abrazaba tomándola de la cintura para acercarla a mi cosa que correspondió pasando sus brazos por donde estaba mi cuello mientras sonreía hermosamente.

Tsubaki—eso me hace muy feliz pero bueno pasando al trabajo ven ya tengo todo listo apropósito Eina-san me conto lo que paso, dime que es eso de invitar a alguien a una cita sin pedírmela a mi primero—dijo ella mientras me sujetaba del brazo y me llevaba a su mesa de trabajo.

Issei—bueno eso pues Eina no tenía nada que hacer y cómo se armó de valor para tratar de invitarme decidí mejor ser yo el que la invitara en cuanto a lo otro me encantaría una cita contigo solo que ahora debo conseguir más dinero no es que no tenga pero me estoy esforzando para comprarle una casa a mi diosa.

Tsubaki—eso es muy bueno de tu parte Issei, a y cuando vuelvas de la mazmorra me gustaría hablar contigo de algo muy importante—dijo mientras su cara tomaba un tono un poco rojizo.

Issei—está bien Tsubaki una vez termine vendré aquí ¿está bien? –pregunte y ella solo asintió.

Tsubaki—bien sin más rodeos aquí esta tu encargo—dijo para pasar a mostrarme una armadura negra que parece de cuero pero está hecha con las plumas del grifo que aunque parezca una mala armadura para proteger en realidad es bastante dura—ven a probartela y deja que todos vean mi más genial creación—dijo ella con orgullo.

Rápidamente me la probé y quedaba excelente no me limitaba mi movimiento y me hacía sentir un poco más ligero talvez sea un efecto de las plumas.

Tsubaki—la armadura es muy resistente y puedes imbuir algo de magia en ella para endurecerla aún más y tiene otra sorpresa envía magia a tu espalda—dicho y hecho concentre magia en mi espalda y de ella salieron 4 pares de alas negras que me recordaban a las alas de los ángeles caídos.

Tsubaki—con las alas fuera puedes volar un poco diría unos 15 minutos dependiendo de la cantidad de magia que les pongas podrías durar un poco más—dijo admirando las alas en mi espalda.

Issei—ya veo creo que esta armadura es increíble muchas gracias, Tsubaki—dije para inmediatamente darle un abrazo cosa que ella correspondió.

Tsubaki—no gracias a ti por aparecer en mi vida antes de conocerte estaba aburrida nadie traía un material bueno que valiera la pena y pensaba solo en vender lo que me quedaba pero tú me trajiste algo tan increíble que fui imposible no emocionarme así que espero trabajar contigo mucho tiempo.

Issei—también espero lo mismo bueno me llevare los cuchillos y te encargo la espada guárdala por favor.

Tsubaki—estas seguro me gustaría que también la llevaras—dijo ella mientras sostenía la espada hecha por ella.