Ｒｏｌｌｅｒ Ｃｏａｓｔｅｒ |SooJun|

🍒33🍒

La mañana siguiente llegó y con ella el sentimiento de vacío dentro de YeonJun.
No podía explicarlo bien, pero sentía algo raro molestarle y con ello cierta tristeza.

A pesar de odiar estar en su casa nunca imaginó que dolería estar fuera de ella.

—¡¿Hablas en serio?! —Cuestionó la madre de SooBin luego de que ambos le contasen lo ocurrido la noche anterior, claro omitiendo íntimos detalles. Después de todo los moretes de los dos delataban una tragedia.

La mujer reaccionó con preocupación y no tuvo que pensar dos veces para aceptar darle morada al chico de trenzas, después de todo se trataban del novio de su hijo.

Eso sí, había condiciones.

— Mi mamá piensa que somos unos promiscuos ¿Puedes creerlo? ¡No vamos a hacer nada! —Se quejó cruzando sus brazos y abultando los labios al hablar con YeonJun sobre la regla de su madre.

“Dormirá en el cuarto de JungKook y tu hermano contigo” Dictó la mujer.

Podía ser muy abierta con sus hijos, pero también estaba consciente en que seguían siendo adolescentes y todo el mundo puede deducir que pasa cuando dejas un par de novios a esa edad solos toda la noche.

Simple prevención.

— Calma SooBinnie, tu madre lo dijo por algo. Bastante agradecido estoy porque me dejen quedarme aquí, no puedo quejarme de nada —Abrazó su cintura—. Aparte creo que fue algo inteligente ¿Te imaginas dormir todas las noches juntos? —Se acercó a susurrarle al oído con travesura—. No podría quitarte las manos de encima.

—Yaaah... Hyung —Se sonrojó y le abrazó con fuerza también— Creo que sería yo quien no podría controlarse —Ronroneó y restregó su nariz sobre las mejillas del mayor, sacándole una risita.

YeonJun amaba la manera en que SooBin podía perder cualquier rastro de vergüenza, era algo nuevo y no podía esperar para ver hasta donde llegaba ese lado descarado que su lindo novio ocultaba.

—De todos modos —Continuó SooBin—. No creo que pudiera hacer algo con mi mamá al otro lado del pasillo.

—Ooh SooBin créeme, podríamos —Informó a lo que el peli negro abrió los ojos con sorpresa, lo que YeonJun planteaba le hacía cosquillar de una extraña manera.

— Ugh, por favor abstenganse de cometer actos pecaminosos sobre mi cama —Pidió JungKook entrando a su habitación, minutos atrás se la había presentado a YeonJun y simplemente la abandonó por unos momentos para ir por sábanas limpias.

Ambos jóvenes se separaron sonrojados.

—Gracias por las sábanas, Hyung —Tomó YeonJun entre sus manos las telas—. Y no se preocupe, lo menos que quiero es ser una molestia.

JungKook soltó una risita, ahora era como molestar a dos hermanos.

—Solo no dejen manchas en mis cosas, fuera de eso no le diré a mamá que SooBin se escabullirá por las noches.

—¡Hyung!

—¡Es broma! —Carcajeó al ver su hermano con las orejas rojas de la vergüenza— No aguantas nada, SooBinnie.

Imitó la manera cariñosa en que YeonJun se dirige al menor y lo único que obtuvo fue un par de golpes con la almohada más cercana. El de trenzas simplemente rió con ternura, era lindo ver a dos hermanos bromear.

—Como sea —volvió a hablar JungKook—. Abajo te esta esperando unos amigos tuyos con una camioneta negra.

—Oh, se ha de tratar de Jimin hyung —asintió—. Gracias, ya vamos.