Ｒｏｌｌｅｒ Ｃｏａｓｔｅｒ |SooJun|

🍒37🍒

Sin mirar atrás y en modo prácticamente automático, de alguna manera, YeonJun consiguió llegar hasta el departamento de Jimin.

Parecía que su cerebro se había bloqueado negando e ignorando la fuerte realidad que le golpeaba cada vez más.
Se rehusaba ante toda esta serie de cambios y quería esconderse como un niño asustado a la oscuridad.

Jimin se encontraba justo a punto de salir pues le habían notificado de la huida de YeonJun en casa de su querido novio, y fue cuando abrió la puerta del pequeño departamento cuando lo vio llegar agitado y llorando. Sin pensarlo dos veces se desplomó en sus brazos, desahogandose en el cuidado de su mejor amigo.

—Todo va a estar bien YeonJun, todo va a estar bien —le reconfortaba el mayor a lo que el negó.

—¿Como va a estar todo bien Jimin? Si el se va a ir muy lejos —dijo con si voz amortiguada por el profundo abrazo—. ¿Qué voy a hacer yo solo?

Jimin pudo haberle dicho que no estaría solo, que tenía a sus amigos que lo querían mucho pero sabía que no se refería a esa clase de soledad.

Era solo un chico enamorado temeroso a que lo dejen de amar.

Y él lo entendía.

—Me mintió —informó el menor— Todo este tiempo me dijo que estaríamos juntos y que nunca me dejaría ¿Como pudo hacerme esto?

—Todo tiene una explicación YeonJun, a lo mejor SooBin tiene todo un plan y no lo has dejado explicarlo ¿O si? —se separaron y YeonJun le vio sintiéndose culpable.

Un pequeño sentimiento de enojo y frustración llegó a su pecho.

—¿Qué me puede decir? ¿Qué tan difícil era decírmelo todo desde el principio en vez de venirme a enterar por parte de su madre en pleno discurso?

—¿Y todo crees que esto es ser fácil? —fue referente a la situación— También debes de dar de tu parte cariño, lo más probable es que tenía miedo de herir tus sentimientos.

—Y aun así resultaron heridos —bufó el de trenzas—. Como sea, nada quitara el hecho de que se irá, se olvidara de mi y nunca lo volveré a  ver.

—Wow —Jimin lo tomó desde sus hombros— ¿Tú como estas tan seguro de eso? ¿Tan poca confianza le tienes a Soobin? Y si es así, entonces ¿Pará qué ha sido todo este camino de obstáculos? Yo sé que creer en alguien puede costarte pero a veces tienes que ceder un poco, más con quien te ha demostrado que te ama.

YeonJun se mantuvo reflexionando aquellas palabras, que casi sonaban a regaño, y comenzó a recapitular los últimos meses. Tantas idas y venidas deberían significar algo ¿No?

—Escucha YeonJun... —comenzó Jimin tomando su bolso y atrayendo al menor de la mano— ¿Por qué mejor no vamos de regreso a su casa? Así van a poder hablar tranquilamente, vas a quitarles a todos el susto que les dejaste y podrás aclarar cualquier duda que tengas.

El de trenzas pareció convencido así que después de aceptar fueron directamente a la residencia Choi.

Al llegar a la casa de nuevo esta se veía casi vacía, los invitados se habían ido no mucho después del discurso y quedaban únicamente quienes recidian en el lugar.

Soobin salió como rayo hacia la puerta cuando está se abrió y YeonJun se asomó por ella, un poco avergonzado de su anterior actitud. Aunque ha decir verdad, nadie lo culpaba por ello.

—¡Hyung! —el pelinegro tiró directamente a YeonJun a sus brazos, aferrándose a él como si fuera a escapar de nuevo en cualquier momento. Tampoco pudo ocultar sus sentimientos a flor de piel, así que habló entre pequeñas lágrimas— ¿Donde estabas? ¿Por qué te fuiste así? ¿Sabes cuanto miedo tenía que te pasara algo? —se separó lo suficiente como para verlo a los ojos después de dejar un beso en su frente—. No lo vuelvas a hacer, por favor.