Capítulo 31.

1.4K 87 4
                                    

Abro los ojos de golpe. No veo nada, está todo oscuro. Me doy cuenta de tengo las manos agarradas con fuerza a los bordes del colchón en el que estoy tumbada. Espero a que mi respiración se acompase. ¿Dónde estoy? He tenido una pesadilla horrible. Tengo que tranquilizarme. Oigo la lenta respiración de mi hermano. Ya me acuerdo, estoy en casa de mi abuela. Espera, ¿y Zayn? ¿Por qué no lo oigo respirar también? Escucho un susurro.

-Clau -repite Zayn-. ¿Estás despierta?

-Mmmm... sí -digo frotando mis ojos e incorporándome un poco en la cama.

-¿Estás bien?

-Sí, sí. Creo que he tenido una pesadilla. ¿Por qué estás despierto? ¿Tú estás bien? -el chico tarda en responderme.

-Sí -dice no muy convencido.

-Zayn -digo. Quiero que me cuente qué le pasa-. Me lo puedes decir.

-Ya, es que... no sé. No puedo dormir.

-Ven aquí conmigo -susurro. Estamos hablando muy bajo para no despertar a mi hermano.

-Clau, estoy bien, de verdad.

-Vale, pues yo no. Así que ven aquí, por favor -digo para convencerlo.

-¿Y si tu hermano se despierta y nos ve juntos?

-Me da igual. No se va a despertar, venga -no veo nada, pero oigo que las sábanas de la cama de al lado, a mi derecha, se mueven y siento la mano de Zayn en mi brazo tanteando por dónde va. Me muevo hacia la izquierda y aparto las mantas para que el chico se tumbe debajo de ellas a mi lado. Pasa el brazo izquierdo por debajo de mi cuello y yo apoyo la cabeza en su pecho desnudo.

-¿Me vas a decir por qué no puedes dormir? -pregunto, levantando un poco la cabeza para darle un beso donde creo que está su mejilla. Él suspira. Siento los latidos acelerados de su corazón.

-Es que... no sé. Creo que... puede ser que haya recordado algo, pero no estoy seguro. A lo mejor solo lo he soñado. Me he despertado... como con unas imágenes en la cabeza, ¿sabes? Después no he podido volver a dormir. Y entonces me ha parecido que tú te despertabas.

Me quedo paralizada unos segundos. No me había parado a pensar esto pero... si él empieza a recordar su vida puede que... puede que él se vaya. Lejos. Muy lejos. Con su familia. Con su novia. ¿Y si no vuelvo a verlo nunca?
Joder, soy muy egoísta, ya lo sé, pero no podría soportar que él se fuera, y menos ahora. Aunque sé que lo correcto es hacer todo lo posible por ayudarlo a recordar. Y si lo quiero de verdad tengo que ayudarlo. Por mucho que me puedan doler las consecuencias. Respiro profundamente.

-¿Y qué es lo que recuerdas? -susurro, intentando que no se me note que estoy aguantando las lágrimas.

-Muy poco, la verdad. Una mujer. Pero la cara... está borrosa. Y un chico. A él lo recuerdo mejor; parecía más mayor que yo, y se parecía a mí. No sé cómo explicarlo, Clau. A lo mejor solo lo he soñado.

No sé qué decir, así que solo le doy un beso en el pecho, donde tengo apoyada la cabeza.

-Te quiero -digo.

Él me acaricia la espalda.

-Te quiero -responde-. Pero no quiero quedarme dormido en tu cama y que mañana por la mañana nos vea toda tu familia.

-Jo. Es que... Bueno, tienes razón.

-Es que... ¿qué? -pregunta él.

-Que no puedo dormir bien si no estás conmigo -digo. Me siento estúpida en el momento en el que eso sale de mi boca y me arrepiento, pero siento cómo el corazón de Zayn empieza a latir más deprisa en su pecho, y al notarlo, el mío hace lo mismo.

Zayn respira profundamente.

-Entonces me quedo -dice. Sonrío. No me merezco todo lo que me quiere.

El crujido de la litera de Diego, encima de la mía, me despierta. Abro los ojos; ya entra un poco de luz por la ventana, no como esta noche, así que ya puedo ver algo. Sigo en la misma posición en la que me dormí, apoyada en el pecho de Zayn. Ahora puedo ver sus tatuajes de cerca. ¿Es cosa mía o cada día tiene más? También veo las heridas que tiene por todo el torso, supongo que se quitó la venda para ducharse. Tengo que volver a curarle. Aunque ahora que lo pienso, mi madre dijo que lo haría. Levanto un poco la vista para mirarle a la cara. Qué mono está dormido; podría mirarlo toda mi vida.
Oigo ruidos en la cocina, seguro que mi abuela y mis padres ya se han levantado. ¿Y si entran aquí y nos ven así? ¿Qué hago? No quiero despertar a Zayn, así que me levanto con cuidado, lo tapo bien con las mantas para que no tenga frío y lo beso en la mejilla. Me meto en su cama. Al menos, si entra alguien ahora no nos pillará juntos.

La cama de mi hermano vuelve a crujir y yo finjo que estoy dormida. Abro un poco un ojo y veo a Diego bajar por la pequeña escalerita que hay desde su litera hasta el suelo, y después sale de la habitación, cerrando la puerta sin hacer ruido.

-Buenos días -me dice Zayn segundos después. Me giro hacia él sobresaltada.

-¡Ay! Hola, me has asustado. No sabía que estabas despierto -me sonríe de lado.

-¿Qué tal has dormido?

-Bien -respondo-. ¿Y tú?

-Después de meterme en tu cama, mucho mejor -dice, y sé que está a punto de decir alguna tontería o guarrada por el tono de su voz y la sonrisa en su cara.

-Eso ha sonado bastante mal -digo, tapándome con las mantas hasta el cuello.

-¿Lo ves? Ya estás malinterpretando las cosas -dice riéndose. Pongo los ojos en blanco y me río también. La puerta de la habitación se abre y mi padre se asoma.

-Buenos días, bellos durmientes. ¿Sabéis qué hora es, por casualidad?

-No, y no me importa -me río, seguro que es muy tarde, aunque me da igual-. Déjanos dormir, papá.

-¿Dormir? ¡Pero si ya estábais despiertos! Se os oye reíros desde la cocina. Además, ya es casi hora de comer, y ya sabes que si no haces más de cinco comidas al día tu abuela se altera -me río; mi abuela está obsesionada con que comemos poco. Mi padre agarra una almohada que hay encima de una silla y se la lanza a Zayn a la cabeza. El chico empieza a reírse y me la tira a mí-. ¡Venga, vagos! ¡Que sois unos vagos! -mi padre saca su móvil, nos hace una foto (¡con estas pintas!) y sale de la habitación riéndose.

Salgo de debajo de las mantas y me incorporo en la cama, Zayn hace lo mismo. Agarra una camiseta gris de manga corta y se la pone.

-Estabas mejor sin ella -le digo mientras salgo de la habitación con una sonrisa.

Amnesia. [Zayn Malik]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora