Amnesia. [Zayn Malik]

Capítulo 11.

Me quedo parada, sin saber qué hacer o qué decir. Zayn ha apartado la mirada hacia el suelo, y yo hago lo mismo. Pasa un largo rato hasta que uno de los dos se atreve a hablar.

-Yo... -empiezo- tú también me gustas a mí -veo al chico, que vuelve a mirarme, de reojo, y me callo, incapaz de seguir hablando. Segundos después el chico suelta una carcajada.

-Te pediría salir, pero ya estamos viviendo juntos, así que -se encoge de hombros y no puedo evitar reírme.

Seguimos un rato sin hablar, perdidos, cada uno en su propia mente. Siento que mi cabeza da vueltas, soy incapaz de pensar con claridad, y tengo una sensación extraña, como un hormigueo en el pecho y en el estómago. No sé exactamente en qué momento ha empezado a gustarme. La primera vez que lo vi me pareció guapo, pero no me gustaba. Supongo que ha sido con el paso de los días, cuando lo he ido conociendo. Porque lo conozco, al menos conozco todo lo que es posible, dado que no tiene pasado. Puede que haya sido la sonrisa de lado que aparece en su cara cuando me mira, o el gesto de sus ojos marrones, que tienen algo que yo no he visto nunca antes.

Mi móvil suena, desbloqueo la pantalla y veo que Ed me está llamando, así que cojo la llamada.

-Claudia, ¿dónde estás? -oigo la voz del chico al otro lado de la línea.

-Eh... esto... pues en el instituto no.

-Ya, gracias, eso ya lo veo -dice Ed irónicamente-. Y también veo que te has olvidado del examen de Literatura que tenemos en cinco minutos.

-¿Qué...? OH, MIERDA, ES VERDAD. ZAYN, TENGO QUE IR AL INSTITUTO AHORA MISMO -el chico me mira preocupado; solo está oyendo mi parte de la conversación, por lo que no sabe el motivo de mi repentina prisa por volver tan pronto.

-¿Zayn? ¿Te has ido con él? -pregunta Ed, por algún motivo noto en su tono de voz que está molesto.

-Voy para allá, Dios, llego tarde. Gracias Ed -corto la llamada y me pongo de pie para salir corriendo hacia el instituto, y Zayn se levanta conmigo.

-Pero ¿qué ha pasado? -pregunta, siguiéndome.

-Se me había olvidado. Tengo examen ahora. La verdad es que no contaba con estar fuera del instituto tanto tiempo... pensé que estaría contigo una hora o así...

-¿Y cuánto has estado? -Zayn me mira extrañado.

-Dos horas -intento avanzar más rápido, a este paso no voy a llegar al examen.

-¿Qué? No puede ser... -saca el móvil de su bolsillo mientras camina a toda prisa a mi lado-. Ah. Pues sí. Lo siento, es culpa mía, no tenía que haberte...

-No es culpa tuya -lo corto-, en todo caso sería mi culpa, pero en realidad ha estado muy bien, así que no me arrepiento de haberme saltado las clases. En fin, no ha sido culpa de nadie.

-Ese es un razonamiento muy raro -dice Zayn.

-Tengo que inventarme una excusa para decirle al profesor, o sino no me dejará hacer el examen por llegar tarde -intento pensar rápido, pero la presencia del chico a mi lado me lo impide.

-Dile que... estabas en el médico o en el dentista.

-Eso es demasiado típico, no va a colar.

Un cuarto de hora después llegamos al instituto, y casi sin pensar, beso a Zayn en los labios para despedirme, y entro corriendo al instituto. Me giro antes de cruzar la puerta y veo que me está mirando, con media sonrisa en la cara.

-Suerte -me dice.

Cierro la puerta a mi espalda y subo las escaleras tan rápido como mis cortas piernas me permiten, sin poder evitar que una sonrisa tonta cruce mi cara. Llego a la clase de Literatura y llamo a la puerta con los nudillos. Segundos después mi profesor abre, y me mira, esperando una justificación.