KADIKH | The 100 #6

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"¿Que es un prime?"

Pero no solo eran niños los que habían llegado. 

Detrás de ellos aparecieron un grupo de personas adultas, bien vestidas y muchos armados que hicieron que los del espacio soltaran sus armas. Lyanna rápidamente recordó el papel que tenía que interpretar, se escondió un poco detrás de Ryder, siendo una observadora, de tímida y temerosa, haciéndoles creer a todas las personas que les apuntaban que ella solo era una chica asustada, incapaz de hacer daño. 

— Recuerden estamos en su hogar. Todos mantengan la calma— Bellamy le recordó al grupo a la vez que todos dejaban sus armas en el suelo y alzaban las manos.

Lyanna por mas que le ardía, tenía que quedarse atrás y no dar la cara por su gente tuvo que hacerlo, quedándose atrás de Abby y Murphy.

— Esta bien— Clarke dio unos pasos hacia adelante, sus manos en el aire en signo de rendición— . Somos de la Tierra. Venimos en paz. 

— Kaylee, ¿donde has estado?— una mujer de tez negra y vistiendo ropas importantes fue hacia la mujer con esposas— . ¿Donde esta tu familia?

La mujer, Kaylee, vio al grupo nuevo,

— Ellos la asesinaron.

Lyanna se dio tan rápido la vuelta para ver a Raven que se hubiera roto el cuello, la morena bajo la mirada. Rápidamente analizo a la guardia que había, a la vez que mantenía su cara asustada, ninguno de los hombres  y mujeres traía rifles o pistolas, todos tenían elegantes lanzas con puntas de metal.

— Eso no es bueno— Jordan hizo una mueca.

Pero lo que fue peor fue cuando Murphy en el suelo empezó a temblar con violencia, Abby inmediatamente lo puso de lado.

— No, no ahora. Esta convulsionando— la doctora jadeó mientras Clarke se arrodillo a su lado viendo a los recién llegados con suplica.

— Ayúdennos por favor. Nuestro amigo esta muriendo.

— No esta respirando— Abby afirmó, empezando a hacer las compresiones en el pecho de Murphy.

— Déjenme pasar—  la voz de un hombre dio una firme orden e hizo que cualquier murmuro de la multitud se callara. Lyanna pudo ver por encima del hombro a un hombre con un abrigo largo que avanzaba con dos guardias a sus espaldas, todo el mundo se hacia a un lado, dejándolo pasar.  El hombre se veía de la misma edad que Diago, los demás lo veían con admiración, como si fuera su salvador, su mesías, Lyanna podía ver la devoción de la gente por él, pero no aun la devoción de él por su pueblo. Él observó el grupo y la joven reina se aseguro de evitar su mirada y abrazarse al brazo de Ryder como si estuviera temblando.

— Háganlos retroceder— el hombre le ordenó a sus guardias que les apuntaron a los demás con sus lanzas, Lyanna y Ryder al igual que los otros dieron unos pasos hacia atrás;