Mi Ángel

Capítulo 11

Angela es llevada a un enorme salón donde Sebastián estaba sentado leyendo y subió su mirada al escucharla entrar
Sebastián se levantó y le indico que se sentara a su lado

- Buenos días cariño ¿dónde estabas?
- Sali a explorar la casa y llegue a la cocina
- ¿y que te pareció la casa?
- No vi mucho, pero parece ser enorme
- ríe- Lo es -toco una campanita y personas empezaron a entrar y colocar platos y cubiertos
- ¿Qué les gustaría desayunar?
- Cariño ¿qué te gustaría desayunar?
- Fruta, jugo y te
- ¿solo eso?
- si, ya no tengo mucha hambre
- asiente con la cabeza- Yo lo de siempre

Antony hizo una reverencia y se retiro
- Terminando de desayunar me gustaría mostrarte la casa y el jardín
- Si me encantaría, gracias
El desayuno transcurrió prácticamente en silencio cuando termino de desayunar, Angela fue a la habitación que compartió con Sebastián la noche anterior y recordó que su madre había prometido enviarle algo de su ropa, pero no sabía dónde la habían colocado. Ella buscaba en el armario cundo una voz la asusto.
- Le ayudo en algo su alteza real
- Con su mano en el pecho- Me asustaste
- Lo siento mucho su alteza real, yo soy Adelina soy su dama de compañía ¿le ayudo a buscar que ponerse?
- ¿Solo podría decirme donde está mi ropa?
- Claro su alteza pidió que la modista le hiciera estos vestidos- dijo sacando uno del gran armario que estaba en frente de ellas
- Esa no es mi ropa, mi madre me dijo que enviaría algunos de mis vestidos
- Lo siento su alteza no enviaron nada o al menos no a esta casa, tal vez debería de preguntarle a su madre a cuál de las propiedades de su alteza las ha enviado tal vez la envió a la que está más cerca de la ciudad donde viven sus suegros
- Tienes razón le enviare una carta más tarde mientras tendré que ver que me queda de aquí, lo siento debes creer que estoy siendo algo presuntuosa pero la verdad esperaba usar mi ropa es cómoda y sé que me que queda y esto es demasiado llamativo
- Apuesto a que cualquier cosa le quedara bien, pero podemos buscar algo más cómodo- dijo con una sonrisa
- Gracias

Al final escogieron un sencillo vestido azul cielo y blanco, guantes y sombrero a juego
- Creo que este es perfecto para un paseo. Bueno el sombrero- dijo quitándoselo- debería dejarlo para el exterior.
- Bueno su alteza quiere llevarme a conocer la casa y después dar un paso por el jardín así que- dijo tomando el sombrero- Creo que si lo voy a necesitar... más tarde
- yo estaré en la estancia esperándolos a que salgan de la casa para darle su sombrero y sus guantes.
- gracias
Ahora debo encontrarme con su alteza real
- ¿Aun lo llama su alteza real? Bueno sé que no me incumbe, pero me parece extraño, llevo años trabajando aquí y la princesa Emma siempre llama a su esposo como cariño o por su nombre
- Si bueno creo que es cuestión de que me acostumbre. Aún hay cosas de debo aprender
- Lo siento no quise sonar como si la regañara su alteza yo no tenía derecho a intervenir, bueno le diré a su alteza que ya está lista
- Gracias.

- entra por la puerta en solo unos segundos- Te ves hermosa como siempre
- Gracias su alteza real
- se acerca a Angela y toma su mano y la besa-Creo que dada la situación no tienes por qué llamarme así digo no pido que me llames cariño o amor, pero podrías empezar llamándome Sebastián
- ¿Es lo que usted quiere?
- Creo que podríamos empezar por ahí, ahora eres mi esposa somo iguales, y puedes no solo puedes deberías llamarme por mi nombre. Pero entiendo que será con el tiempo.
- Está bien creo que podría intentarlo. ¿Podría hacerle, perdón hacerte una pregunta?
- Las que quieras- dijo con una sonrisa
- ¿Mi madre no te dijo que enviaría algo de mi ropa?
- ¿No te gusto la ropa que la modista escogió para ti?
- No es eso es solo que no pensé que tendrías ya preparado todo un guarda ropa, digo nos conocimos hace menos de un mes
- Soy entusiasta demasiado al parecer
- No quiero que se sienta mal, sé que tenía una buena intención, pero no nos conocemos.
- Y por eso permití que llenaran tu armario con cosas como estas- dijo tomando un vestido de color naranja brillante-
- si es un poco extravagante pero no importa realmente, debe haber muchas cosas que pueda usar en lo que mama me envía mi ropa, de todas formas, gracias por pensar la intención
- No fue nada enserio. ¿Empezamos el recorrido?
- Si claro