Liam Payne se abrigó más y bajó el Stetson, mientras salía. Bajó por el sinuoso pavimento hasta el buzón, con el rostro entumecido por el áspero viento. El invierno acababa de comenzar y él ya estaba inquieto. La casa estaba silenciosa, alojando solo a él y a sus dos hermanos, hasta la próxima temporada de caza, cuando se llenaría de clientes. Durante diez años, guió a los cazadores a través de las montañas. Pero ahora se sentía nervioso. Insatisfecho.
Abrió el buzón y agarró los sobres. Se volvía a la casa, hojeando sin interés los sobres, cuando le llamó la atención un destello de color. Él parpadeó, volviendo a mirar. Allí, en la zanja, mitad cubierta por la nieve, había una persona. Dejando caer los sobres, se fue corriendo hacía ella y se arrodilló en la nieve. Atemorizado de lo que encontraría, agarró un pequeño hombro y le dio la vuelta.
Sorprendentemente, era una mujer. Una hermosa mujer. Le buscó el pulso, aguantando la respiración hasta que sintió un débil temblor en el cuello. Le quitó la nieve de la cara y acarició su rubio pelo.
¿Cómo había llegado aquí?
La cogió en los brazos, se levantó y caminó hacía la casa. Miró su pálido rostro, sintiendo una punzada en la ingle. Le recorrió un escalofrió y se vio invadido por emociones desconocidas. Ira, posesividad, preocupación, pura y simple lujuria.
Su verga se estaba hinchando y los vaqueros le quedaban cada vez más apretados. Fue conmocionado por el descubrimiento de que era ella, su mujer. Él nunca había reaccionado tan fuertemente a una mujer, y ciertamente no a una a la que no conocía, pero daba igual; sus hermanos podrían no sentir lo mismo.
De todos modos, no la podía dejar congelarse hasta morir. No pensaría en sus hermanos, hasta estar seguro de que no moriría.
Cuando entró en la casa, Louis levantó la cabeza del sofá, en donde estaba leyendo. Dejó caer el libro cuando vio la mujer de los brazos de Liam.
— ¿Qué demonios está pasando? —exigió, levantándose.
—La encontré fuera, en la zanja —murmuró Liam, examinado a su hermano, para ver su reacción.
Louis acortó la distancia que había entre ellos y miró a la mujer.
— ¿Está viva?
— ¿Qué está pasando? —indagó Harry, cuando entró en el salón. Su expresión era impenetrable, una mirada que había llegado a ser su segunda naturaleza, desde que salió del ejército. Por la primera vez en mucho tiempo, Liam sintió esperanza. Daría cualquier cosa para poder sacar a Harry de su infierno personal, en el que vivía. Si ella fuera la mujer...
Liam volvió su atención a la mujer de sus brazos.
—Necesito calentarla. Ve a preparar un baño caliente mientras yo le quito esta ropa mojada —le pidió a Harry. Louis levantó una ceja.
— ¿Vas desnudarla aquí?
Liam se encogió los hombros.
—Dudo que la modestia sea importante, cuando te estás muriendo de frío.
Los ojos de Louis se apenaron y se acercó más a la mujer. La estudió y le acarició la mejilla.
—Es bonita —dijo él en voz brusca.
Cuando miró a Liam, sus ojos brillaban por múltiples emociones: deseo, ternura y posesividad. Liam sintió triunfo. ¡Louis sentía lo mismo!
— ¿Qué están haciendo? —preguntó Harry cuándo volvió a la habitación.
— ¿El baño está preparado? —inquirió Liam.
Harry asintió y Liam pasó rápidamente por al lado.
—Te explicará Louis —dijo animado.
Liam caminó hasta su cuarto y la acostó suavemente en la cama. Ni siquiera tenía un abrigo. Frunciendo el ceño, empezó a quitarle el suéter mojado. Estaba helada. Cuando tiró el suéter por encima de la cabeza, se le cortó la respiración. El pequeño sostén que vestía no cubría mucho. La segunda cosa que notó, fue una grande contusión que arruinaba su piel de porcelana. Era del tamaño de su mano. Y él tenía manos grandes. ¿Tuvo alguna clase de accidente? ¿Y qué estaba haciendo caída en la zanja? Continuó su trabajo, quitándole los húmedos vaqueros. Mientras se los quitaba, vio claramente los oscuros rizos, a través de sus bragas. Así que ella no era rubia natural.
Sintiendo culpa por un instante, le quitó tanto las bragas como el sostén, dejándola completamente desnuda y la miró. No pensaba que fuera posible ponerse aún más duro. Cada nervio de su cuerpo estaba en alerta roja. Bastaría un toque y estallaría.
Juro ardientemente y luchó para controlar sus furiosas hormonas. Estaba inconsciente y herida, y todo en lo que podía pensar era meter su polla tan adentro, hasta que convertirla en suya para siempre.
La examinó en busca de cualquier herida. Su piel estaba fría, pero no presentaba ninguna señal de congelación. El baño no debía hacerle ningún daño.
Con mucho cuidado, levantó su cuerpo desnudo y la llevó al enorme baño que compartía con sus hermanos. Era del tamaño de una habitación, con dos duchas y una bañera jacuzzi. Una pared tenía cuatro pilas. Una indirecta de que un día, habría una mujer para compartir sus vidas.
La bañera estaba llena y él la dejó en el agua templada. Ella gimió, pero no abrió los ojos. La sostuvo, para que no resbalase en la bañera. Se giró, cuando escuchó la puerta. Harry estaba allí, con los ojos oscurecidos.
—Louis dice que es ella.
Liam asintió, sin saber que decir. Sabía que Harry necesitaba aceptarlo. Harry miró a la mujer, pero no se acercó.
—Esperaré hasta que acabes. No quiero que se despierte y encuentre a dos hombres en el baño. Podría asustarse.
—No tardaré —dijo Liam, intentando interpretar las sombras de los ojos de Harry—. Hazme el favor de meterle las ropas en la secadora.
Harry se encogió los hombros y salió del baño, cerrando silenciosamente la puerta detrás de él.
Liam volvió su atención hacia ella, para verla abrir los ojos. Ojos verdes y suaves, lo miraron fijamente con choque y confusión. Después, con miedo._____
Aqui esta el primer capitulo dulzuras! espero que les guste tanto como a mi y espero que comenten o el cuco las come jajaja. All the love. Mx
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La Mujer de Nuestras Vidas
FanfictionEsta novela no es mía la saque de una pagina de facebook que es mi favorita! bueno y ella la adapto así que los créditos va para isCamiStyles! ojala la disfruten igual que yo lo hice! aqui les dejo el Link: https://www.facebook.com/media/set/?set=a...