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Pov ______

No se cuanto tiempo duré dormida, pero siento como si mis piernas hubieran sido trituradas. Abrí mis ojos lentamente, reconociendo instantáneamente donde estaba. El olor a medicina y la comodidad de mi futon me dieron una paz interna, permitiéndome soltar un suspiro, creí que moriría aquel día.
Poco a poco logré quedarme sentada en mi lugar, la ventana estaba abierta y en ella mi cuervo comiendo semillas.

- Hola tu... ¿Están ricas? - me grazno como afirmación, reí un poco ante eso.

Iba a ponerme de pie pero la puerta siendo abierta llamo mi atención.
Por ella paso Aoi, al verme sus ojos se criztalizaron, apretando más el agarre que tenia en la bandeja de comida de sus manos.

- _____-Sama...

A pasos cortos se acerco hasta mi, dejando la bandeja de comida en el suelo mientras ella tomaba asiento.

- Realmente me-

No la deje teeminar cuando la envolví en mis brazos, abrazándola fuertemente. Ambas teníamos miedo... Ella de perderme y yo de dejarla sola junto con las niñas.

- Perdoname por siempre preocuparte... Perdoname por asustarlas de esa manera. - susurre abrazandola más contra mi, su cuerpo temblaba un poco.

- ¡_____-Sama! Que alivio que este a salvo... Gracias al cielo. - rompió en llanto en mis brazos, no pude evitar también yo derrama algunas lágrimas.

- ¡Wuah! ¡_____-Sama!

Las voces de Kiyo, Sumi y Naho resonaron en la habitación, para después sentir como sus tres cuerpesitos se apegaban a mi. Ellas también lloraban.

- Ya todo esta bien. Yo estoy aquí y todo estará mejor, no morire tan facil, de eso esten seguras. - las cuatro menores me tenian bien abrazada, pero tenían cuidado de no aplastar mis piernas.

Después de un rato donde intentaba calmarlas, logré mi cometido. Se separaron de mi y tomaron asiento en frente mio.

- ¿Dónde esta Kanao? En todo el rato que llevo despierta no a venido a verme.

- Kanao está de misión, salió hace un rato, fue una misión de último momento.

- Entiendo... ¿Cuanto duré dormida? La verdad ¡Me siento muy energética! - Aoi rió mientras me servía té, yo solo me dedicaba a comer la fruta que había traido.

- Que bueno que estes energética, en dos horas hay una reunión. Prepárate porque todos debemos de estar ahí.

Una quinta voz se sumo a la platica, haciendo que las niñas y yo voltearamos hacia la puerta.

- ¡Tokito-Kun! ¿Ya te haz recuperado? Te ves muy bien de salud. - el me veía con una sonrisa recargado en el marco de la puerta. Esta sonriendo... ¿De que me perdí?

- Al menos me encuentro mejor que tu. Pensé que tardarías más en despertar, dormiste solo tres horas. - espera... ¿¡Tres horas!?

- Vaya, pensé que había dormido días... O al menos así lo sentí.

- Es normal, estabas muy cansada. Por cierto, tu y yo tenemos una platica pendiente, no creas que se me olvido. - como la persona tan madura que soy solo le saqué la lengua.

𝐋𝐚 𝐮𝐥𝐭𝐢𝐦𝐚 𝐊𝐨𝐜𝐡𝐨 - Kimetsu No Yaiba Fanfic - Donde viven las historias. Descúbrelo ahora