Los Gemelos Madrigal

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T/n T/a

Hoy...voy a salir, estoy segura y después de tanto tiempo lo haré, tengo que...han pasado unos meses...dos...para ser exactos, y voy a salir nuevamente. Cambié y supongo que para bien, al menos físicamente, mi cabello no es el de antes, mi piel está bien cuidada...y el ejercicio me hizo bien, aún que siento un poco de nervios...se que las pocas veces que me han visto los demás me han saludado y hablado normal, y mis amigas dicen que todos son mis amigos...así que no tengo porque tener miedo, supongo.

Escribí eso en mi diario, marque la página y lo cerré dejando un trozo de hilo rojo para marcar la página y el lápiz a un lado, lo guarde en mi caja de cosas especiales y la cerré con llave nuevamente...la última vez que mi madre vio accidentalmente mi diario y las cosas que escribía, fue un caos...al menos no paso eso con mi libro, que lo tengo solo para mí.

Me miré al espejo y pase mis dedos por mi cabello, jugué un poco con el para luego decidir que lo dejaré suelto.

Suspiré y salí de mi habitación, al bajar ahí estaba toda mi familia.

––– buenos días, mi amor..––– saludo mamá tomando mis mejillas y besando mi frente.

––– buenos días mamá. ––– saludé dándole una sonrisa y un beso en su mejilla.

Pase por su lado y le robé una arepa a mi hermano Raúl.

––– ¡Oye! ––– reclamó frunciendo el ceño.

Solo moví la arepa de un lado a otro con burla y me la comí.

––– hoy voy a salir...––– avisé mirando hacia abajo.

Rápidamente me gané miradas de mis padres y hermanos...en especial de mi abuela.

––– ¿Hablas en serio? ––– pregunto la abuela con sorpresa.

––– Si...ya comencé a aburrirme aquí y...bueno, no me quedaré toooda la vida en casa. ––– expliqué con una pequeña risita nerviosa.

––– ¡Al fin la rara va a salir! ––– añadió mi hermano Danilo levantando los brazos con emoción.

––– que bueno, ya te hacía falta mi niña...––– aviso papá dándome un abrazo ––– y recuerda, ten mucho cuidado...los jóvenes hoy en día son muy hormonales, si algo sucede tú no dudes en gritar y defenderte con lo que encuentres.

––– Claro...lo sé. ––– avisé tragando me el último pedazo de arepa que estaba en mi mano para luego chupar mis dedos.

––– ¿Y por qué la repentina idea de salir? ––– pregunto Danilo con burla.

Danilo como siempre, al ser el hermano mayor...en algo bromista, pero a la vez muy serio y sobreprotector...nos llevamos tan solo por dos años nada más, osea que el tiene diecisiete. Mientras que Raúl es el menor, muy menor...tiene trece años, pero su altura a veces lo ayuda un poco...así que eso me deja a mi como la hermana del medio de quince años, y lo peor es que soy la única niña por lo que son más cuidadosos conmigo...pero al criarme con mis dos hermanos, se que hacer en ocasiones y cosas de "chicos" o al menos cuando estoy con ellos.

––– ¡Cuídate mucho chamaca! ¡Ya verás si llegas a casa con un embarazo! ––– ordenó la abuela señalando me con un dedo.