Shadow - Nuevas Especies

Capítulo 18

Shadow miraba hacia el bosque totalmente molesto, nunca le gusto la lluvia y menos la noche la cual le recordaba la oscuridad de su celda, pero por alguna razón sus sentidos estaban mas alertas que nunca, si bien el mismo sabia que sus sentidos siempre estuvieron alerta desde que Anastasia le había dicho que iban a tener un cachorro, esta vez no le gustaba los olores que traían la lluvia y el viento. Era un olor totalmente diferente al olor de aquellos humanos pero parecido al suyo, al principio pensó buscar en todo su territorio pero luego pensó que estaría dejando sola a su pequeña humana y a su cachorro y en estos momentos ellos eran lo mejor y lo principal para el.

Pero....

Al ver a aquellos hombres con olores distintos y armas dudo por un momento en ir a atacarlos, no quería dejar a su hembra sola, le dolía algo que el no entendía pero luego se dio cuenta que iba a morir antes de dejarla sola, entonces por mas que ataco y les gruñera a los de su misma especie en su pecho solo había un gran hueco por separarse de su pequeña humana, fue lo que mas le dolió en el mundo ya que el mismo que por mas tamaño y fuerza que tuviera, frente a las armas humanas el no era nada.

Al principio se sorprendió de que no le dispararan y que también lucharan a cuerpo con el; en su cabeza eran humanos que venían a atacar a su hembra, pero solo escuchaba a su hembra gritar de dolor. Solo quería acabar con esos humanos y por mas que intentaran matarlo con esas armar, el los mataría y dejaría a su hembra sin esos hombres y el así podría morir en paz. Pero todo murió para el cuando escucho el sonido tan conocido del arma y el dolor de la anestesia haciendo efecto pero para el fue afortunado al escuchar lo que para el seria el último sonido de la voz de su pequeña humana, por mas que halla sido el dolor de cualquier mujer al ver como el macho especie de su vida era disparado.

- ¡ CARAJO ! - grito Leo al ver como en un minuto todo se había ido a la mierda, tenia a una mujer desmayada embarazada y a aquel híbrido anestesiado - ¡ corran a avisar al helicóptero ! ¡ PERO YA ! - dos de las especies corrieron hasta las mochilas para llamar. Leo fue con rapidez hasta el cuerpo de Ana y por un segundo pensó que estaba muerta al verla con tanta sangre y demasiado pálida, sus labios eran morados, pero escucho su respiración, sabia que a este paso ella moriría. Con delicadeza y algo de miedo al no saber que pasaba, con cuidado acerco su mano a su vientre y agradeció a quien sea de sentir el corazón latiente de un cachorro - solo resiste - pensó.

Con destreza y rapidez los machos especies tomaron ambos cuerpos y los cargaron, Shadow tuvo que ser cargado por tres machos y el cuerpo de Ana fue sostenido con delicadeza. Sin pensarlo ya estaban en el helicóptero tratando de darle oxigeno darle a Ana, algunos la miraban con algo de tristeza ya que la mayoría tenían a su compañera en sus casas cuidando de sus hijos o esperando por ellos, no querían saber lo que se sentiría estar en el lugar del macho híbrido si su hembra y cachorro no sobrevivirían.

- Sobrevivirá ? - le pregunto un macho especie a Leo, si bien el no tenia muchos conocimientos en tema de la medicina aprendió al ver a su compañera trabajar en el hospital de la ONE.

- No lo se, pero... - ambos miraron a Shadow, el cual estaba recostado en el asiento, sabían la anestesia solo serviría para solo un momento y que el bosque era muy frondoso, si se despertaba y veía a su compañera para lo que él creería que es una amenaza, no dudaría en nada - temamos por los dos - todos asintieron.

Leo miro a Anastasia y una vez mas puso su mano en su vientre y sonrió al sentir los latidos.

Sera un gran macho si sobrevive

Pensó.

Abro los ojos de a poco al sentir como algo me iluminaba demasiado, cuando los pude abrir por completo solo veía un gran sol, con el cielo tan despejado que parecía el de una serie de caricaturas, al bajar tan solo un poco la mirada había una niña, a la cual reconocí al instante.