Capítulo 4. Desconcierto

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Desde que me desperté Naruto no ha dicho ni una sola palabra, me pone nervioso, será que anoche me sintió besarlo, no, no creo conociendo lo escandaloso que es, enseguida habría pegado de gritos, pero entonces ¿Por qué esta tan serio y callado?

Por ahora me tengo que enfocar en la misión.

— Aquí es, esta es la zona, es claro que el sujeto no está, lo habrías detectado, pero antes de irnos a otra dimensión, deberíamos revisar si encontramos algo, como lo que está buscando, aunque no sabemos que es lo que quiere, ve por la derecha y yo a la izquierda, si encuentras algo me llamas de inmediato, yo haré lo mismo.

— Está bien— Contestó Naruto con una expresión seria.

Los dos ninjas, comenzaron a inspeccionar cada rincón de la edificación, parecía un castillo hecho de piedra gris, la nieve entraba por grietas grandes en el techo, las paredes tenían partiduras, en cada lado se observaban torres en forma de cilindro, de al menos tres pisos y no podía faltar la peculiar simbología de las ruinas de Kaguya, estaba ubicado en medio de un bosque de grandes pinos, así que era difícil dar con la construcción, principalmente sin contar con las coordenadas, por ello, era misión que solo Sasuke podía llevar a cabo, aunque con ello sacrificara el tiempo con su familia.

El Uchiha se concentraba en no salir de ahí con las manos vacías, sabe separar el trabajo de una situación personal, en cambio Naruto siempre ha tenido un problema serio con eso de los sentimientos y no se le da nada bien ocultarlos, aunque no sabía que estaba buscando analizaba el lugar de forma detallada, no obstante, algo le seguía dando vueltas en su mente.

Ese maldito, cómo puede estar como si nada, anoche apenas y pude volver a dormir, y cuando me despertó para hacer la guardia, seguía con la misma cara de siempre, además de que durmió tan placido.

No sé ni cómo sentirme, creo que estoy molesto, después de que se durmió quería apartarme de él, pero demonios tenia tanto frio que pudo más que mi orgullo, lo odio.

Hasta llegue a pensar que tal vez solo lo había soñado, y así como esta de indiferente estoy empezando a creer que sí, eso no pasó, pero no, estoy completamente seguro que si me besó.

Por otro lado, él no sabe que me desperté en ese momento, no se imagina que me di cuenta o quizá es, quizás es...

Ah, ¿Qué es esto?

— ¡Sasuke! — Gritó Naruto para que el Uchiha llegara hasta donde él se encontraba.

El azabache escuchó el llamado y se apresuró a ir a la parte derecha del castillo de dónde provenía el grito del rubio, entró a la torre y encontró unas escaleras hacía la parte superior de la torre y un pasillo recto muy poco iluminado frente a él, no se veía nada en su interior.

— ¡¿Dónde estás?! — preguntó el Uchiha preocupado.

— ¡Aquí abajo!

— ¡¿Abajo?! — preguntó Sasuke confundido.

— ¡Ah sí, sigue el pasillo, hay una puerta, y baja las escaleras, es como un sótano!

Sasuke avanzó rápidamente, estaba todo realmente oscuro pero cada que bajaba las escaleras podía notar la luz del cuerpo de Naruto, ahí estaba él inclinado frente a un enorme baúl, con una mano sostenía la tapa de la caja de madera y con la otra unos pergaminos.

— Mira teme, ¿Qué puede ser esto?

— No lo habrás pueden ser una trampa, había olvidado decírtelo antes de investigar.

— No soy ningún idiota, eso es algo que cualquier ninja sabe, estoy algo oxidado, pero no estúpido — dijo Naruto con un tono enfadado y frunciendo el ceño intensamente.

Era claro que Naruto no estaba de buen humor, principalmente con el Uchiha, se sentía su burla, ya estaba muy frustrado con lo que pasó por la noche, no quería estar enojado, pero sabía que no obtendría respuestas, algo que le disgustaba, aunque tampoco tenía ánimos de discutir. Quizás solo era cuestión de un poco de tiempo para que se calmara y estuviera como el Uchiha, como si nada haya pasado.

Sasuke conoce a Naruto, sabe cuándo algo le causa conflicto, en primer lugar, no había hablado desde que se despertó y ahora su comentario le había enojado, no quería ofenderlo, así que creyó que era conveniente saber la razón de su comportamiento antes de continuar, se acercó a Naruto y le tocó el antebrazo para relajarlo.

— Perdón, no era mi intención ofenderte, solo me preocupe, no es porque crea que eres estúpido, todo lo contrario, pero estoy acostumbrado a estar solo y preocuparme por mí, vienes conmigo así que mi compromiso es mayor, no tiene nada que ver contigo y tu fuerza o conocimientos, pero prometo intentar no ser tan sobreprotector ¿Está bien? — dijo el Uchiha con un semblante de preocupación.

Naruto lo miro fijamente a los ojos, pero los nervios provocaron que desviara su mirada a un lado, quitó el brazo que el pelinegro tocaba para rascar su cuello.

— Sí, está bien, creo que exageré un poco, no me hagas mucho caso— dijo el rubio con una risa nerviosa.

— ¿Pasa algo?

— No, ¿Por qué?

Tenía muchas ganas de decirle lo que tanto le daba vueltas en la cabeza, pero decidió olvidarlo y no volver a cuestionarse a sí mismo el asunto, quizás le estaba dando más importancia de lo que era y por ende haciendo que interfiriera con la misión, hizo una mueca con la boca y sonrió. Aunque no quiso quedarse con una sola duda.

— ¿Sasuke, eres sonámbulo?

¡Eh! ¡A qué viene eso? ¿Cómo es que me cambio el tema de repente? No entiendo.

— No, bueno no que yo sepa— respondió el Uchiha confundido — ¿Por qué?

— ¡Eh! No, nadamas, curiosidad.

— Pues yo no, pero tú, sí.

— ¿Qué? ¿Yo? ¿Yo, por qué? — preguntó asustado Naruto.

— Bueno, pocas veces me ha tocado verte, pero el capitán Yamato me dijo que eres un verdadero peligro, no sé qué tanto le has hecho.

— ¡Ah!, je, je, creo que sí.

— Bueno, ay que darnos prisa, vamos a llevarnos estos pergaminos, haremos que los abran con cuidado y extraigan la información que puedan. Ahora salgamos de aquí para ir a otra dimensión. ¿Estás listo?

— ¡Yes, sure!

Al salir de la torre, los ánimos entre los dos eran más tranquilos, habían terminado de recorrer el lugar y no había ningún indicio de alguna presencia, no podían quedarse esperando y permitir que terminara huyendo, era hora de que avanzar, Sasuke volvió usar su jutsu de espacio-tiempo y partieron a otro sitio.

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