Capítulo 22: Te encontré

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Megan Demie

Todo esté tiempo que había pasado sin Alsey se había convertido en el mismo infierno, todos los días que pasaban era una pesadilla más, no tenía ni idea de si ella seguía viva y mi corazón se detenía cada que un cuerpo era encontrado, estaba tan desesperada que había olvidado todo  y si no fuera por mi hermano la empresa de papá hubiese caído en banca rota.

Joshua siempre me llevaba a desayunar a cualquier lugar ese era mi único alimento del día, pero después de ese mensaje de texto y revisar sin que nadie se diera cuenta esa computadora y ver cómo sospechoso el nombre de Joshua mi mente trabajo tanto que había sacado mil conclusiones, debía ir a su casa, debía ver qué estaba pasando.

Estacione mi auto y antes de tocar gire mi cabeza al sentirme observada, una señora mayor me miraba en la casa de a lado, antes de poder hacer algo la puerta se abrió bruscamente.

— Megan pasa – dijo y lo mire

— Hola, lo siento iba a tocar pero me entretuve

— No te preocupes pasa – dijo y entre

El lugar se veía bien arreglado, camine y después el se puso delante de mi

— Siéntate aquí aún no termino el desayuno así que tendrás que esperarme un poco – dijo y yo le sonreí

Me senté en el sillón que el había indicado, por costumbre metí mi mano entre el sillón y sentí un papel, sabía de quién era esa letra, la conocía como la palma de mi mano.

El estómago se me revolvió al saber todo lo que había pasado, Joshua había estado enamorado y obsesionado de Alsey, había planeado todo y siempre se aseguró de que fuera ella quien encontrará todo, jugo con su mente y se ganó su confianza, se la llevo y después de encerrarla en su casa me había estado buscando para que jamás sospechara de el.

— ¿Que es eso? – pregunto al entrar y dejar las cosas sobre la mesa

— Nada importante, olvide que debía hacer algo – dije

— ¿Necesitas irte? – pregunto

— Estoy bien – mentí

Me senté frente a el mientras servía las cosas, mire hacía el sótano, ahí debía tenerla

Comenzamos a desayunar mientras el me hablaba sobre la señora Maclark, Alsey había escrito un poco sobre ella

— ¿Puedo ir a tu baño? – pregunté y el me miró

— Claro está en la última puerta – dijo

Le sonreí y me levanté, entre al baño y tome mi celular, envié mi ubicación al oficial Ryment y llame a la policía, el oficial prometió que estaba saliendo con un equipo.

Al regresar el estaba viendo hacia la puerta del sótano

— Tienes una casa linda – dije y el me miró

— ¿Te parece?

— A Alsey le hubiese gustado mucho – dije y el sonrió

— Estoy seguro de que si, tenemos gustos parecidos – dijo

— ¿Crees que ella esté viva? – pregunte

— No lo sé Megan ha pasado mucho tiempo – dijo el y se acomodo en la silla de nuevo

— Siento que está viva – dije y el miró a otro lado nervioso — La siento cerca

El sonido de las patrullas lo hice moverse aún más, se levantó

— Tengo que subir por algo – dijo y subió casi corriendo

Me levanté y corrí a abrir la puerta el oficial Ryment y 5 oficiales más entraron, abrieron el sótano y bajamos corriendo, sacaron herramientas para poder abrir la primera puerta, el corazón me latía como loco mis piernas estaban temblando, pues no sabía si lo que encontraríamos ahí abajo sería a Alsey viva o simplemente su cuerpo, la segunda puerta fue más difícil de abrir, escuché pasos arriba y pedí que fueran más oficiales y no el, cuando la puerta se abrió corrí primero que ellos para entrar, mire a todos lados, había una cocina pequeña, una mesa con dos sillas, un lava platos, platos, había un pequeño sofá, un cuarto y un baño, camine lentamente y gire la perilla al abrirla ella me miró y juro que todo el brillo volvió a mi

Sin pensarlo si quiera dos veces ambas nos lanzamos contra la otra, logré abrazarla sin que calleramos al piso, su cuerpo estaba temblando, la pegue a mi con todas mis fuerzas, tanto que estoy segura que ninguna de las dos podía respirar.

— Te encontré – dije cuando la solté, tome su rostro en mis manos

— Estás aquí – dijo tomando mis manos, las lágrimas resbalaban por nuestras mejillas

— Estoy aquí mi amor, estoy aquí te encontré mi amor estamos juntas – dije y besé sus labios en un desesperado y necesitado beso

El sabor de sus labios seguía ahí, nuestros labios se hacían unos solos bailando una dulce canción al mismo tiempo, me separé de ella.

Los oficiales registraron todo el lugar dejándonos ahí, no me importo, estábamos juntas, mire todo de nuevo y no me pude imaginar a mi novia estando ahí abajo, ella volvió a abrazarme, su olor estaba combinado con su olor original y el olor a humedad del lugar, ella estaba más delgada, tanto que sus pómulos resaltaban más de lo usual, al abrazarla podía sentir sus costillas.

— Te amo – dijo y yo sonreí

— Te amo – dije y dejé un beso en su frente

No podía creer que la tenía, la tenía de nuevo, podríamos casarnos, mudarnos a México, olvidar todo esto y estar juntas de nuevo, pero toda esa hermosa historia desapareció cuando lo ví entrar por esa puerta.

— Que hermosa escena – dijo el y Alsey me puso detrás de ella

— Joshua – dijo ella – Por favor no hagas nada

— Tu eres mía Alsey – dijo y se acercó más, mire sus manos y en una de ellas llevaba una pistola

— Déjala salir y yo me quedaré aquí – dijo ella

— No te dejare aquí – dije

— Ese es el problema – dijo y alzó el arma, pero no me estaba apuntando a mi, el arma estaba apuntando a ella – Tu jamás nos vas a dejar solos Megan, eres una maldita perra que me quiere robar a mi mujer y si no será mía entonces no será de nadie

— No hagas esto – dijo Alsey

— Te voy a matar y después moriré yo y así estaremos juntos siempre – dijo y cargo el arma

Yo estoy segura de que Alsey hubiese dado su vida por mi, siempre me mantuvo segura, me mantuvo tan segura que jamás tuve miedo de que algo me ocurriera a mi, siempre me cuidó, era momento de que yo lo hiciera, porque yo no quería vivir en un mundo donde ella no existiera, porque prefería morir antes de verla morir.

Justo cuando me moví para cubrirla el disparo el arma, no estoy segura de dónde me hirió, pero al mismo instante el calló al piso, Alsey me tomo en sus brazos, no estoy segura de mucho de lo que decía, solo puedo recordar que dijo

— Te amo Megan, por favor no me dejes te lo suplico

Pero por más que yo quise quedarme, solo pude acariciar su mejilla, recibir un beso y después de eso....

Todo se volvió negro y supe que había muerto.

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