¡Felix manos a la obra!

5. El plan de Felix

- Pst, Felix despierta. - decía Han Jisung tratando de que el pequeño niño se levantara, se supone que tenía que ir a dejarlo a la escuela en menos de una hora pero este parecía no tener intenciones de hacerlo.

Por otro lado, el pecoso llevaba tiempo ya despierto pero se negaba a abrir sus ojos, hoy no quería ir a la escuela, solamente quería quedarse a jugar con su nueva casita todo el día a lado de su niñero, no iba a dejar que nadie arruinara sus planes, aparte sabía que hoy el castaño no tenía clases, era el momento perfecto.

- Lixie, despierta por favor. - continuaba pidiendo Jisung zarandeando con mayor fuerza su cuerpecito destapándolo en el proceso. - Si no lo haces el cupcake que te mandó mi mamá me lo voy a comer. - añadió como un último intento esperando algún signo de que siguiera vivo.

Como por arte de magia el niño se levantó casi golpeando la cabeza del contrario. - ¿Es de chocolate? - preguntó interesado haciendo parpadear sus ojitos repetidas veces en un intento de mostrarse inocente.

- Eres un interesado. - musitó el mayor levantándose del lugar para poder acercar el dichoso uniforme.

- Esque quería jugar contigo en mi nueva casita.  - argumentó mientras trataba de quitar su pijama con varios jalones provocando que el mayor se apiadara de el y pudiera ayudarlo.

- Podemos jugar cuando regreses.

- Más te vale, luego me dices eso pero te terminas durmiendo. - dijo bromeando el pecoso haciendo reír al contrario, aunque falso no era.

- Perdón por tener que ir a la escuela también y luego cuidar de un niño caprichoso. - comentó sarcástico viendo como Felix reía bajito.

El pequeño ya casi terminaba de vestirse, solamente le faltaba tender su cama y  preparar su mochila, solamente teniendo que echar sus lápices de colores.

Jisung viendo que ya no tenia nada que hacer ahí le ordenó a su menor que se apurara, pues todavía necesitaba preparar su almuerzo. Dejándolo sólo, Felix se puso a pensar qué podría hacer para poder quedarse en casa, en serio no tenía ganas de ir a la escuela, se supone que hoy harían manualidades pero el nisiquiera compró los materiales, tenía que pensar en algo rápido sino quería que su niñero prácticamente lo arrastrara hasta la puerta.

°°°

Dando saltitos el pecoso fue bajando las escaleras tomando las correas de su mochila para que no se moviera mucho. - Oye Hannie, tengo algo que decirte.

- ¡Te escucho! - gritó Jisung desde la cocina donde se encontraba preparando el lunch del pequeño niño.

- Hoy vamos a hacer manualidades... - comentó haciendo una pausa dramática, por otro lado, Jisung ya sabía hacia donde iba el asunto, quería golpearse contra una ventana. -  pero no tengo los materiales, así que pensé que podríamos pedírselos a Minho hyung. - soltó aquello mientras veía sus lindas uñitas.

Su malévolo plan consistía en que irían a pedirle a Minho su ayuda y ¡BAM! como siempre los mayores se quedarían platicando y viendo como bobos. Aunque no sabía el porqué pasaba eso, de lo que sí estaba seguro era que ya no lo llevarían a la escuela...

Tan rápido como aquel nombre salió de la boquita del menor Han salió cargando una pequeña lochera en dirección a Felix. - No podemos hacer eso, de camino pasamos por una papelería y listo. - contestó seriamente el castaño, aún no estaba listo para hacer un ridículo por la mañana, casi estaba seguro de que su menor lo hacía a propósito. - Agarra tus cosas, nos vamos.

- Hannie, tengo que comprar palitos de madera y pintura, tú una vez me dijiste que debemos de cuidar el planeta. Minho hyung tiene muuuuchos en su patio que de seguro va a tirar, el puede darme algunos, sino llamaré a la señora Han y le diré que eres un mal ejemplo.