Eric y yo veíamos la tele el estaba recargado en mi pecho.
-no crees que deberíamos estar en nuestras respectivas camas-preguntó Eric.
-¿por qué? Adoro esta contigo-dije mirándolo.
-pueden venir Gene y Bruce-dije levantándome.
-Gene nunca vendría a nuestro cuarto y Bruce se levanta tarde los días que no tenemos concierto-dijo Eric levantándose.
Decidí darme un baño y Eric me siguió nuestros labios se unieron en el vaivén de un beso que en segundos iba intensificandose rápidamente nos quitamos ropa mientras entrábamos en la ducha lentamente el empezó a entrar en mi lo que me hacía gemir con mucha fuerza la regadera abierta no ayudaba mucho ya que Eric alcanzó mi punto dulce lo que me hizo gemir como loco después me pese de rodillas y comencé a lamer su miembro adoraba oir sus gemidos eran tan tiernos y luego Eric volvió a entrar en mi tocando nuevamente mi punto dulce gimiendo con más fuerza Eric se movía muy rápido y eso me exitaba hasta que se vino dentro de mi para luego salir lo que me hizo soltar un gemidos más fuerte.
-wow eso fue increíble-dije besando su frente.
-hagamos lo está noche-dijo Eric.
-está bien dije abrazándola.
Nos bañamos haciendo como que nada pasó y disimulamos un poco lo que pasó en la ducha nos vestimos y seguimos viendo la tele de pronto alguien tocó la puerta era Gene.
-¿¡se puede saber por hacían tanto ruido!? No dejan dormir a Bruce!- dijo Gene muy enojado.
-es que Eric se resbaló con la barra de jabón del hotel y lo tuve que ayudar-dije mientras fingía masajear la pierna de Eric.
-Eric ten más cuidado ¿¡no ves que es muy peligroso!?-lo regaño Gene.
-es que se me cayó el jabón de las manos-dijo Eric con cara de regañado.
-y que tiene Bruce?-pregunté.
-dos cosas se siente mal y anoche tuvimos sexo-dijo Gene dijo preocupado.
-llevalo a la enfermería-dije preocupado.
-ya lo lleve y le dieron una pastilla-dijo Gene yéndose a su cuarto con Bruce.
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mi lindo gatito (StarCat)
Hayran KurguDurante la gira del álbum revenge Paul Stanley y Eric Singer se enamoran y tienen un romance y lo que parecía un cuento de hadas fue en realidad sólo el comienzo