THE FACE OF LIES/ KOOKV

CHAPTER 43

Okey vamos a rezarle a tremenda joyita. En serio que temazo y pues bueno ya saben quienes son los implicados. 

Perdón por los errores ortográficos mis pulguis.

Lo presentía, quizás no eran simplemente una bala adherida a su pálida piel.

 En aquellos lugares casi ocultos, detrás de sus costillas, en las piernas, cerca de sus hombros, en su espalda. En cada parte de esa hermosa piel, incluso, detrás de esa camisa había marcas de cortes con cuchilla. De ellas solo quedaban pequeñas señas que con mucho tiempo y cuidado fueron sanando. Pero ahí estaban, al igual  que esa marca en su costado derecho. Aquel chico de alas rotas llevaba el sello de una cruel tortura, del alguien que se creyó con el derecho de destruirlo. Con sus manos, deseando tener el remedio para borrarlas comenzó acariciarlas presionando con su pulgar aquella herida de bala, sintió se estremeció entre sus brazos, bajando su mirada, sintiendo el peso de cada una de ella. Él solo pudo grabarse cada una de ellas, endurecer el nudo en su garganta mientras las curaba, con besos, con suaves caricias, con sus manos y labios permitiéndose borrar el dolor y la ira de cada una de ellas.

- No sientas pena Narciso, eres hermoso, tan hermoso. Cada parte de ti, cada una de ellas... Las llenaré de amor, no tienes que sentir que te hace menos hermoso, creo que te embellecen. - Taehyung lloraba y el no podía evitar sentir odiar a alguien que ni siquiera conocía, solo deseaba poder haber estado allí para recibir tal castigo.

- ¿Me amas así?

- No te amo Taehyung, siento mas que amor. Una inmensidad que cubre mi cuerpo, toda el alma. Algo que va mas allá de amar. Deseo cada parte de ti con toda la belleza que te caracteriza. No hay mayor perfección ante mis ojos que sentirte tan real ante mi, tan frágil, tan entregado a mis caricias. No tienes que dudar de mi sentir, contigo he sentido todo sin la necesidad de que pasaran décadas. 

- Es esto es lo que soy Jungkook, este es mi pasado. Si me amas aun sabiendo que fue destruido entonces no impediré que lo hagas. Me permitiré amarte, porque contigo lo he sentido todo, pero si en ti nació lastima y recelo tienes la libertad de irte. 

El brillo en los ojos de Jungkook no cambiaron, Taehyung seguía siendo el chico mas hermoso del universo ante sus ojos, su percepción no había cambiado en absoluto y con la intensidad del sentir se había incrementado a grandes rasgos. Desesperado abrazó aquel débil cuerpo, para sentirse mas cerca de aquella realidad, para acunarlo entre sus brazos y hacerle sentir lo que sentía. Las cálidas lagrimas de su Taehyung recorrieron su hombro, pero le importó porque el también estaba llorando, necesitaba llorar por aquel pasado incierto, pero doloroso. De alguna forma, el necesita sentirse a su lado, hacerlo ver que caminaba a su lado, que podría confiar en que lo protegería de la tormenta. 

-- Esta bien Kookie ya pasó ahora báñate conmigo antes de que me arrepienta - Sonreía aun con sus ojos rojos y su nariz carmesí, aun tiritando por sentirse tan expuesto, pero estaba bien porque era por él, por el chico de su vida. Porque Jungkook ya no era solo el idiota a quien se propuso vencer, Jungkook era el amor de su vida.

Luego de acariciar su mejilla y besar su cabecita, hizo que se sentara en la tina de espaldas a él. Se deleitó enjuagando esa linda y tan suave melena. Para él, era inevitable no recordar al niño de cabello naranja, Taehyung había dejado de ser ese pequeño tigre naranja que tanto quería. Ahora era un hermoso ejemplar de pelaje gris, tan imponente y hermoso y lo amaba. Su chico tarareaba la canción que había compuesto para él y sonrió al notar la buena memoria que tenía su novio. Luego de refregar con delicadeza todo su cuerpo fue el menor quien se giro para bañarlo aún empapado en espumas por su cuerpo, con el brillo del jabón en su cuerpo, con su cabello mojado y esa jodida sonrisa. Taehyung era su permitido. Era la persona a la que se permitía perderse mirándolo, sonriendo, sintiendo.